La serpiente tricéfala vuelve a la carga para presentar el ratón más rápido creado hasta la fecha: Razer Viper 8K. El nuevo miembro de la familia de las víboras nos ofrece una latencia mínima con una tasa de sondeo de 8.000 Hz y 20.000 DPI gracias a su sensor Razer Focus+ 20K. ¿Tenéis ganas de saber más? ¡Pues comenzamos!
Ya sabéis cómo se las gasta Razer. Una compañía fundada en 1998 con una gran experiencia en el sector, está entre los pesos pesados de la industria y en su haber disponemos de muchísimos productos orientados al gaming más exigente. Aprovechamos como siempre para agradecer a la marca la confianza depositada en Profesional Review por el préstamo y análisis del producto.
El embalaje de Razer Viper 8K sigue la línea habitual de la marca: una caja de cartón satinado con detalles destacados en resina reflectante y el negro y verde como colores dominantes. Ya en su portada se nos muestra una imagen del producto acompañada del isotipo de Razer y tres aspectos destacados: Hyperpolling de 8.000 Hz, sensor óptico Focus+ 20K e iluminación Razer Chroma RGB.
En el reverso por su parte disponemos de una infografía general en que se nos describen las cualidades más potentes del producto además de las anteriormente mencionadas, como el uso de cable Speedflex, deslizadores de teflón o peso reducido.
Abriendo el embalaje nos recibe una caja de cartón reciclado con el logo de Razer como única decoración. En su interior encontraremos un saquito de polipiel con el Razer Viper 8K y documentación diversa.
Razer Viper 8K es un modelo de ratón ambidiestro muy ligero (poco más de 71 gramos de peso). Sus dimensiones son de 126,73 x 57,6 x 37,81 mm y el material empleado continúa la línea de los últimos años con un uso de plástico ligeramente granulado para una mejor resistencia al sudor.
Como diseño ambidiestro, estamos ante un ratón simétrico al 100%. Ambos laterales presentan botones auxiliares y sendas superficies de caucho texturizado antideslizante para optimizar el agarre. Los botones M1 y M2 son piezas independientes para una mejor pulsación y la rueda de scroll central cuenta también con un recubrimiento de caucho estriado.
La elevación del Razer Viper 8K es más bien escasa, presentando una joroba suave ligeramente descentrada hacia atrás si lo observamos con una vista lateral. El punto de conexión del cable se encuentra en una superficie inclinada, lo que ayuda a proteger parcialmente la zona de unión y sirve de apoyo a la goma de refuerzo aquí situada para contrarrestar los tirones. Tanto en la zona delantera del ratón como alrededores de la rueda de scroll podemos notar un cambio en los acabados del plástico negro mate, dando lugar a unas finas bandas con terminación reflectante ya presentes en la gama Viper original.
Dándole la vuelta, Razer Viper 8K dispone de tres deslizadores de teflón. La elección de este material continúa la fuerte tendencia de la industria dado sus mejores cualidades a la hora de reducir la fricción y el desgaste frente al vinilo de toda la vida. También aquí podremos observar diversa información a cerca de la marca, número de serie, sensor y certificados de calidad.
En esta sección destaca la presencia central del sensor Razer Focus+ 20K DPI, el modelo más potente de la compañía, con 50G de aceleración y 650 puntos IPS. Este monstruito se combina con una tasa de refresco de 8.000 Hz, lo que genera una latencia virtualmente inexistente si lo comparamos con los 1.000 Hz de los ratones gaming convencionales. Entraremos a explicar y comparar más en detalles estas características en la sección de Puesta en uso, ¡así que seguid leyendo!
Es en la parte inferior donde encontraremos el botón para modificar los DPI activos. A nivel personal es algo que a la redacción de Profesional Review nos convence bastante pues tenemos la mala tendencia a pulsarlo accidentalmente cuando está situado junto a la rueda de scroll durante las partidas más frenéticas. No obstante esto es una cuestión de gustos y además implica que no podríamos intercambiar ese botón originalmente asignado a los DPIs por una función alternativa en partida, aunque eso depende ya de cada jugador.
En total, Razer Viper 8K cuenta con cuatro botones auxiliares (dos a la izquierda, dos a la derecha) además de los tradicionales M1, M2 y Scroll. Ya seamos diestros o zurdos, todos ellos son optomecánicos y configurables por software para asignar funciones o macros, por lo que en total disponemos de siete botones activos a la hora de jugar.
M4, M5, M6 y M7 presentan un relieve muy reducido en los laterales. Su formato es también un tanto fino y el punto de corte entre ambos resulta reducido, por lo que pulsaciones en el botón erróneo tienden a ser algo habituales al comienzo de su uso. El material empleado en ellos es exactamente el mismo que en la cubierta, por lo que tampoco aquí deberemos preocuparnos por superficies limosas con un uso prolongado.
Nuestra mirada se dirige ahora al cable, que se trata de un modelo Speedflex ultraligero con una extensión de 180 cm. No es extraíble, pero su principal cualidad radica en el escaso índice de arrastre que presenta en comparación a los recubrimientos por fibra trenzada tradicional. Su terminación en un puerto USB-A incluye el tradicional logo de Razer grabado en bajorrelieve y funda protectora para la conexión, que presenta la tradicional lengüeta verde menta corporativa.
Hasta ahora os hemos hablado del hardware de Razer Viper 8K: materiales, botones optomecánicos, sensor, cable y dseslizadores. Pero, ¿Qué tal se las gasta? ¿Es cómodo de usar? Comenzamos.
Razer Viper 8K es un ratón diseñado para manos medianas y grandes. Su diseño favorece tanto la sujeción de garra como palma, siendo bastante cómodo en esta última. Nosotros específicamente somos más de garra, y lo único que nos ha tomado algo de más tiempo para acostumbrarnos es el uso de los botones laterales (venimos de un modelo con interruptores más grandes). La rueda de scroll tiene un manejo suave de resistencia media, con pasos entre cada engranaje que se sienten bien bajo la yema de nuestros dedos y generan una sonoridad moderada.
Sobre la comodidad, para nuestras manos medianas da el tamaño perfecto. Es un ratón poco voluminoso tanto en grosor como joroba, algo especialmente bueno para dedos finos. Los botones principales responden al pulsado en la práctica totalidad de su superficie dado que se trata de modelos optomecánicos, por lo que no es necesario presionarlos hasta el fondo para que se active la detección. Este mecanismo genera que el tiempo de respuesta promedio se reduzca, algo que refuerza el enfoque general del ratón en minimizar la latencia al máximo. Como colofón, su ciclo de vida alcanza hasta 70 millones de clicks, algo que supera la media de 50 millones de los botones mecánicos convencionales.
Ahora que ya conocéis los mecanismos, hablemos de la respuesta al movimiento. El sensor Focus+ 20K no sólo aporta 20.000 DPI, sino que con sus 5G y 650 IPS compite con los modelos más precisos del mercado (la práctica totalidad de ellos derivados de la alta gama de PixArt). Lo que nos garantiza esto es una detección detallada de la superficie por la que pase, trazando un recorrido más suave y homogéneo incluso con movimientos rápidos.
Y ya que hablamos de rapidez, el HyperPolling se vuelve un tema mandatorio. Esta característica es la que define la tasa de sondeo, lo que viene a ser el número de veces por segundo que el ratón envía información al PC y actualiza datos sobre su posición.
Cuantos más hercios tenga el ratón, más datos se enviarán por segundo. Así, donde un ratón de 1000Hz actualiza 1000 veces por segundo, Razer Viper 8K hace lo propio con 8000 Hz.¿Y en qué se traduce todo esto? Pues básicamente que allí donde el resto tiene 1ms de respuesta, Razer Viper 8K nos ofrece 0.125ms. Nada mal, ¿eh?
Para mostraros visualmente la diferencia, hemos aprovechado que nuestro ratón habitual es el Razer Mamba Elite (1000Hz, 1ms) para compararlo al Razer Viper 8K en un test de rendimiento. En la gráfica, las partes más elevadas se corresponden a los movimientos más rápidos del ratón, mientras que el resto es estado de reposo o desplazamiento leve.
En el caso de Mamba Elite, los picos reales siempre alcanzan un techo de 1000Hz, algo ampliamente superado por el Viper. No obstante, aquí nos gustaría hacer una anotación. Sobre el papel hay diferencia, pero estamos hablando de unas medidas de tiempo tan pequeñas que la diferencia resulta imperceptible para un usuario con un equipo medio y monitor de 60Hz con 1080p de resolución. En cambio, para todos aquellos que sí contéis con un equipo gaming de alta gama y busquéis hardware del mejor rendimiento, Razer Viper 8K sí puede ser tentador. Para los demás, objetivamente os recomendamos compararlo con el Viper Ultimate.
Tal y como os comentamos al inicio, Razer Viper 8K cuenta con una única zona iluminada, la cual está situada en el cuerpo central posterior del ratón. El tradicional isologo de Razer tiene una iluminación máxima intensa, nítida y personalizable a través de software, mientras que en su ausencia contaremos con una rotación de espectro RGB.
Las fotografías aquí tomadas fueron realizadas bajo iluminación de focos y con el RGB al máximo. Como podéis comprobar, tenemos una retroiluminación estupenda que se mantiene visible desde cualquier ángulo. A nivel personal también nos habría gustado el detalle de diademas LED en la rueda de scroll, aunque eso supondría el detalle de romper con la línea de diseño de la gama Viper de modo que lo dejamos pasar.
Como era de esperar, en nuestro análisis también incluimos los softwares de la compañía: Razer Chroma y Razer Synapse. Los lectores habituales ya sabéis que tenemos en bastante estima los programas de Razer no sólo por el diseño intuitivo de su interfaz, sino por el número de posibilidades técnicas que ofrece.
Dentro de Razer Viper 8K encontramos las siguientes categorías:
Por último, para todos aquellos que ya tengáis otros periféricos de Razer o compatibles con el software, en Razer Chroma Studio podréis establecer perfiles para el conjunto de periféricos activos, los cuales se guardarán en la nube vinculados a vuestra cuenta de Synapse.
Razer Viper 8K es el ratón más rápido del mundo. Una latencia mínima garantizada de 8000Hz y un sensor Focus+ con 20.000 DPI y 650 IPS nos entregan un producto con altísimas prestaciones, un ratón digno de la gama premium. No obstante, la eficacia del Viper 8K está en cifras, distancias y tiempos tan pequeños (hablamos de 1ms de respuesta convencional vs 0.125ms del Viper 8K) que no podemos evitar la pregunta de si el usuario ordinario puede realmente notar una diferencia.
No debéis pensar que intentamos ser negativos, todo lo contrario. Las especificaciones técnicas son excepcionales a todos los niveles. Dimensiones equilibradas, material antideslizante para el sudor, cable Speedflex de 180cm de longitud, interruptores optomecánicos, diseño ambidiestro, deslizadores de tefrón, iluminación RGB y perfiles programables… Al Razer Viper 8K no le falta ningún detalle, pero muchas de estas especificaciones ya estaban presentes en el Razer Viper original o el Ultimate, por lo que la única novedad tangible es la tasa de sondeo que aportan sus 8000 Hz.
Te recomendamos la lectura de: Mejores ratones del mercado.
Vale, ¿Y entonces, por qué comprarlo? Ay, amigos, el secreto está en el precio. Razer Viper 8K, el ratón más rápido del mercado, con el mejor sensor de la marca y lo último en diseño y hardware, tiene un precio de salida de 89,99€. Por menos de 100 euros podéis tener un ratón profesional que compite con lo mejor del mercado, algo que sorprende bastante cuando lo comparamos con marcas rivales e incluso otros modelos dentro de la propia Razer.
Sin embargo, la última palabra es siempre para vosotros: ¿Qué sensación tenéis tras leer el análisis? ¿Consideráis que el Razer Viper 8K cumple con las expectativas? Contadnos vuestras impresiones en los comentarios.
VENTAJAS | INCONVENIENTES |
EMPLEA LOS MEJORES MATERIALES Y ACABADOS DE LA COMPAÑÍA | OFRECE POCAS NOVEDADES RESPECTO A OTROS RATONES DE LA GAMA VIPER |
8.000 Hz Y RESPUESTA DE 0.125ms | |
SENSOR FOCUS+ 20K DPI |
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