Todos conocen a Samsung como una empresa que vende de todo, pero es útil conocer su historia porque es más que inspiradora. Nos adentramos en el ADN coreano y descubrimos cómo se fragua todo.
Nos vamos a inicios del siglo XX, un momento político complicado en todo el territorio de Corea, que estaba bajo el dominio de la ocupación japonesa. Debemos resaltar un nombre por encima de todos: Lee Byung-chul, nacido en 1910, quien marcaría el inicio de Samsung como empresa.
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En su momento, a Lee Byung-chul le preguntaron lo mismo y aseguró que la palabra coreana de Samsung significa «3 estrellas«:
Lee Byung-chul funda Samsung como una empresa comercial que se dedicaba a varios fines: procesamiento de comida, textil, seguros, seguridad y ropa. Entonces, Corea del Sur era una colonia japonesa, y Lee decide trasladarse a Daegu para fundar Mitsuboshi Trading Company, que en coreano es Samsung Sanghoe.
Lee empezó Samsung como una pequeña empresa con 40 trabajadores establecida en Su-dong. Era una pescadería que vendía pescado seco, noodles y comida autóctona. La empresa prosperó y en 1947 deciden trasladarse a Seúl, pero pocos años después estallaría la Guerra de Corea (1950-1953). Esto forzó a Lee a cerrar su empresa en Seúl.
Decidió montar una refinería de azúcar llamada Cheil Jedan en Busan. Un año después de terminar la guerra, Lee creó Cheil Mojik y construyó la planta en Daegu, la ciudad donde se trasladó en un inicio.
Byung-chul volvió a diversificar Samsung en otros sectores porque mantenía la idea de que fuese una empresa líder en un rango de sectores amplio. Por ello, empezaron a invertir en el sector de los seguros, seguridad y ropa.
Cho Hong-jai, el fundador de Hyosung (grupo empresarial de motos), decidió invertir en la nueva empresa llamada Samsung Trading Corporation, con Lee a la cabeza. Dicha empresa se llama hoy Samsung C&T Corporation. Esta fusión no funcionó mucho porque Cho y Lee pensaban de diferente manera, así que se separaron.
Sin embargo, tendríamos que esperar hasta 1960 para ver al gigante en acción. A finales de 1960 se crean distintas empresas relacionadas con el mundo tecnológico, como son: Samsung Electronics Devices, Samsung Electro-Mechanics, Samsung Corning o Samsung Semiconductor & Telecommunications.
El primer producto tecnológico de Samsung fue una televisión en blanco y negro, algo muy corriente para la época, ¿verdad?
El primer paso fue adquirir el hardware de telecomunicaciones de Hanguk Jeonja Tongsin, una empresa coreana localizada en Gumi. Los primeros productos eran centralitas, pero esta adquisición facilitó el desarrollo de sistemas de teléfonos y fax para convertirse, después, en el centro de la fabricación de teléfonos móviles de Samsung.
De hecho, cabe destacar que lanzó su primer ordenador personal de 8-bit solo para el mercado coreano: el SPC-1000, el cual se servía de una cinta audio casette para guardar y cargar información.
En 1987 tiene lugar la trágica noticia: Lee Byung-chul muere. El efecto de esta noticia produjo que todo el grupo empresarial de Samsung se dividiera en 5 grupos:
A día de hoy, ninguna de ellas están relacionadas o conectadas con el grupo Samsung. En la década de los 80, Samsung Electronics empezó a invertir ferozmente en investigación y desarrollo, algo que marcaría la historia de la tecnología.
Se puede afirmar con rotundidad que su inversión en investigación ha sido lo que le ha empujado a estar al frente de la industria de la tecnología. Samsung volvió a diversificar dentro del mundo tecnológico: montó fábricas por todo el mundo.
Sin embargo, Samsung Semiconductor iba a ser un negocio redondo para la compañía, el cual le daría un impulso brutal a partir de los 90 en adelante.
Las piezas del puzzle se empiezan a unir con los movimientos del grupo empresarial de Samsung en esta década. Samsung gana las concursos públicos para la construcción de las torres Petronas de Malasia, la torre Taipei 101 de Taiwan o el Burj Khalifa de Dubai.
Entre todo este ajetreo empresarial, Samsung introduce la SDRAM y el SDR. Era un tipo de memoria que se sincronizaba con la frecuencia de la CPU, por lo que podía soportar hasta 133 MHz. Esto se produjo en 1992, pero hasta 1996 no se vendería con 16 MB de salida en cada módulo.
Lee Kun-hee mantiene el legado de su padre Lee Byung-chul realizando varios movimientos en 1993: vendió 10 filiales del grupo Samsung, lo que reduciría el tamaño del grupo considerablemente. Sin embargo, había un motivo más que razonado: concentrar todos los esfuerzos económicos en 3 industrias:
Con electrónica nos referimos a TODO lo que os podáis imaginar:
En 1996, Samsung desarrolla el primer módulo DDR de la historia, que vendría con 64 MB. Intel cometería el error de apostar por Rambus, en vez de DDR, que llegó a dar 400 MHz, y los AMD Athlon fueron los primeros en soportarlas.
Llegó 1997 y estalló una crisis financiera en todo Asia, dejando rotas a muchísimas empresas coreanas. Samsung salió a flote, pero tuvo que vender el 80% de Samsung Motor a Renault. Por si fuera poco, Samsung se metió de lleno en la década de los 90 a construir aviones y helicópteros, fundando Korea Aerospace Industries (KAI) en 1999.
¿Qué podemos decir de Samsung en la primera década de los 2000? Fue una locura la de sectores que coparon a los niveles más altos. Para no irnos por las ramas, lo mejor que podemos hacer es diversificar, como han hecho estos coreanos durante toda su vida.
Anteriormente, hemos dicho que Samsung creó los paneles LCD, pero en 2004 se hace con el 40% de la cuota del mercado del OLED, desarrollando y creando el AMOLED. Solo en este apartado, la empresa generó 100 millones de dólares, que en 2006 serían 475 millones.
Metidos en 2006, Samsung tenía más de 600 patentes americanas y más de 2.800 patentes internacionales, siendo el propietario de la mayoría de tecnologías AMOLED. Estos paneles aterrizaron en sus propios teléfonos, llamándose «Super AMOLED» porque eran táctiles. A día de hoy, es uno de los mejores paneles del mercado de smartphones, siendo usados por OnePlus, Xiaomi y Huawei.
Llegamos a 2007, momento en el que vimos aterrizar el panel LCD de 40 pulgadas con 10 mm de grosor; justo un año más tarde lo redujo a 7.9 mm. Ya en 2008, empezó a fabricar non-stop paneles LCD de 24 pulgadas para monitores de escritorio y paneles de 12.1 pulgadas para portátiles.
Un año después, Samsung se metió de lleno en el desarrollo de televisiones LED con un grosor de 3.9 mm. La campaña de publicidad comparaba ese grosor como el de 2 monedas juntas, ¡qué locura!
Después, sus objetivos fueron subir a la resolución 1080p, conseguir 120 Hz de tasa de refresco y un contraste de 5000:1. Llegaríamos a 2013, momento en el que veríamos la primera televisión OLED curva de la historia.
Apple pone la primera piedra con los iPhone en 2010, pero Samsung pretende responder con Samsung Galaxy S, una gama alta dentro de smartphones. Samsung usó todos los sistemas operativos: Windows Phone, Symbian, LiMo y Bada, este último es suyo. En 2012, sería el fabricante de smartphones con más ventas del mundo, pasando a Nokia, que era líder desde 1998.
Sería en 2013 cuando decidió apostar por Android y Windows Phone, aunque más por la primera: lanzo más de 43 smartphones en ese año. Está claro que el fin de Nokia fue pasar de Symbian a Windows Phone, pero Samsung tuvo algo que ver con sus terminales.
Poco se tienen en cuenta la presencia de Samsung en los mercados emergentes, siendo más potente en países subdesarrollados.
Los inicios de Android no fueron los mejores, pero poco a poco ha ido asentando su capa de personalización TouchWiz y su sistema operativo Tizen, el cual está presente en su gama Gear y en sus televisiones. Hay que decir que la mayoría de los avances producidos en smartwatches vinieron de la mano de Google (con el Moto 360) y con los Galaxy Gear de Samsung. En ese sentido, Apple ha sido de las últimas en invertir en dicho nicho de mercado.
Por último, no olvidar el tropiezo del Galaxy Note 7, el cual traía un defecto de fábrica en el chasis que comprimía demasiado los componentes, lo que provocaba una combustión mientras se usaba o se cargaba. Tuvo que retirarlo en 2016, alegando que las baterías eran las que producían ese exceso de calor.
Los smartphones han cobrado protagonismo en la historia de Samsung, siendo más conocida por esta división, que por otras.
Samsung se dio cuenta del nicho de mercado que era la fabricación de semiconductores. Nos tenemos que remontar a 2006 para ver la primera inversión fuerte de la historia de Samsung en este sector.
Sería en 2010 cuando empezaría a producir semiconductores con un proceso de fabricación de 20 nm. Tres años después, pasaría a los 10 nm FinFET, evolucionando a los 7 nm FinFET en 2018. Aquí, la principal rival es TSMC, que avanza a los mismos compases que la empresa coreana.
Sin embargo, Samsung sería la primera en producir el primer nodo de 5 nm, y sería en 2018. Las fábricas de semiconductores principales se encuentran en Corea del Sur y la compañía ya tiene previsto fabricar semiconductores de 3 nm GAAFET a partir de 2021.
Además, todo este avance era un beneficio para otros negocios de la compañía, como son las memorias RAM o los SSDs. En 2014, se convertiría en el fabricante de semiconductores más grande del mundo, superando a Intel.
En 2001, Samsung vuelve a hacer historia creando la memoria DDR2, que ofrecía más frecuencia, menos voltaje y aparecían los módulos DIMM y SO-DIMM. Vimos desde 400 MHz hasta 1066 MHz.
Cuando llega 2005, hay un problema: los sistemas operativos no soportaban tanta memoria RAM, pero los videojuegos pedían más. Así que, en 2007, Samsung decide comercializar la memoria DDR3, que parte desde 512 MB de capacidad. Por primera vez, llegaríamos a ver módulos de hasta 16 GB por unidad, consiguiendo 2113 MHz.
Por último, la memoria RAM DDR4 fue lanzada por el mismo gigante coreano en 2014. En esta ocasión, se volvía a reducir el voltaje, se traían memorias con más capacidad y la frecuencia sobrepasaba los 5000 MHz en las últimas remesas.
En mi opinión, Samsung se adelantó a aquel contexto porque las únicas plataformas que podían soportarla era el socket LGA 2011-v3, que situaba procesadores Intel por los 600€.
La tecnología SSD saldría al mercado a partir de 2010, aunque se había trabajado en ella desde 1950, pero ni mucho menos a la magnitud de la que hablamos. Primero, veríamos SSDs de 1 GB, que serían realmente caros.
Samsung empezó con la línea 750 EVO en 2016, momento en el que también lanzó un SSD con 15.36 TB que costaba $10.000. Vimos llegar al mercado los 850 y 860 en sus gamas PRO y EVO, aunque lo mejor estaba por llegar.
Se marca un tanto en la historia tras introducir el SSD M.2 NVMe, con unas velocidades de lectura de 3.500 MB/s, así como 3.300 MB/s de escritura. Todas las unidades que usaban NAND Flash producidas por la misma Samsung fueron aclamadas por la crítica debido a que tenían un rendimiento brutal y una fiabilidad extraordinaria.
Llegaríamos a 2007 y Samsung introdujo la «Internet TV«, que permitía al usuario ver información por internet mientras veía la televisión. Después, desarrolló el Smart LED TV que permitía la instalación de aplicaciones en nuestro televisor. No tardaríamos en ver la mítica Samsung Apps Store para disfrutar de mucho contenido.
Sin duda, uno de los sectores que más dinero ha hecho ganar a Samsung, sin olvidar su puerto pesquero en Corea. Samsung vendió alrededor de 31 millones de televisiones en 2009, manteniendo el mayor share de mercado por 4º año consecutivo.
El año 2010 trajo la moda del 3D LED, algo que Samsung «quemó» mucho en sus campañas de marketing: vendió 1 millón de TVs en 6 meses desde su lanzamiento. En esta época, el 3D era «lo más», así que Samsung invirtió en ello:
No obstante, uno de los mejores avances del Smart TV vino con Tizen en 2015, el sistema operativo basado en Linux. Dio un vuelco al mundo de las Smart TVs porque ofrecía muchísimas funciones, una gran experiencia y, especialmente, un catálogo de apps brutal. Justo en 2019, anunciaría su primera televisión con Apple TV y AirPlay 2.
En este mercado, es importante destacar la invención del QLED, una tecnología similar al OLED, pero que no llega a ser orgánica. Samsung aprovechó para trabajar con Panasonic y 20th Century Fox para crear el HDR10+ y promocionarlo como estándar. De hecho, Amazon Video lo ofrece, así como Warner Bros y Universal se unieron a la propuesta.
Samsung decide meterse de lleno en el sector del sonido profesional adquiriendo Harman International. Para que os pongáis en situación, el grupo Harman contenía las siguientes marcas de audio:
Muchos audiófilos se llevaron las manos a la cabeza porque creían que iban a perderlas y se iban a convertir en Samsung, pero se han mantenido en el mercado. De hecho, Samsung aprovechó para incluir por primera vez auriculares AKG en sus Samsung Galaxy S8, unos auriculares que gozaron de una crítica estupenda, y cuyo precio no era bajo.
Por tanto, Samsung es un imperio que ha conquistado muchos sectores tecnológicos, ganándose el respeto de muchísimos fabricantes. Lo que empezó con una pescadería, se convertiría en un gigante tecnológico a batir.
Esperamos que os haya gustado este capítulo de la historia de Samsung. Si tenéis alguna duda, podéis comentarla y estaremos encantados de solucionarla.
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¿Qué te parece la historia de Samsung? ¿Consideras que es una empresa a batir?
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