Si tienes un PC o portátil Thunderbolt 3 y necesitas un disco portátil de alto rendimiento, te presentamos la caja ORICO Thunderbolt 3 NVME M2 Enclosure. Se trata de un encapsulado con controladora Thunderbolt 3 JHL6340 con velocidades de 40 Gbps para aprovechar toda la potencia del SSD que instales en su interior.
Con esta potente interfaz podremos aprovechar las velocidades máximas que admiten los SSD NVMe PCIe 3.0 x4 en forma de disco portátil. Ideal para creadores y usuarios que necesitan transportar grandes volúmenes de datos entre sus equipos, aunque deben ser siempre Thunderbolt 3, no siendo compatible con USB 3.2. ¿Qué velocidades alcanzaremos con el ORICO V500 en su interior?
Antes de empezar, agradecemos a ORICO su confianza en nosotros por cedernos este producto para su análisis.
| ORICO Thunderbolt 3 NVME M2 Enclosure (SCM2T3-G40) | |
| Material | Aluminio |
| Colores | Gris o blanco |
| Interfaz interna | M.2 M-Key NVMe PCIe 3.0 x4 |
| Interfaz Externa | Thunderbolt 3 |
| Capacidad máxima | 2 TB |
| Formatos soportados | 2280 |
| Compatibilidad | Mac, Windows y Linux |
| Dimensiones | 41 x 101 x 15,4 mm |
| Peso | 88 g |
| Precio | 117 euros aproximadamente |
Este ORICO Thunderbolt 3 NVME M2 Enclosure nos llega en una pequeña caja de cartón semirrígido de compactas dimensiones y apertura en forma de cajón. En las caras exteriores tenemos lo típico, fotos del producto acompañadas de sus especificaciones principales.
Para acceder al contenido solo debemos de empujar desde uno de los laterales y extraer el pequeño cajón de cartón rígido del interior. Este cuenta con un molde de plástico en donde permanece perfectamente colocado el encapsulado de SSD dentro de una bolsa. En el hueco bajo él tendremos el resto de accesorios.
El bundle que nos propone el fabricante contendrá los siguientes elementos:
Como casi siempre, el fabricante chino nos proporciona todo el contenido necesario para que podamos armar nuestro disco portátil sin que necesitemos herramientas externas. De hecho, los tornillos utilizados son todos tipo torx, así que el destornillador incluido será fundamental.
Esta ORICO Thunderbolt 3 NVME M2 Enclosure no es la primera que presenta el fabricante, de hecho, hace ya un tiempo analizamos otra especialmente diseñada para interfaz USB 3.2 Gen 2. Esta vendría genial a aquellos usuarios que necesiten almacenamiento portable de alto rendimiento y que no tengan Thunderbolt 3 en su equipo.
Por otro lado, ORICO cuenta con dos encapsulados muy muy similares al que analizamos hoy, el APM2T3-G40 y el TFM2T3-G40. Un poco más refinados en el diseño exterior y con exactamente las mismas cualidades, capacidad y hardware. La idea será escoger el que cueste más barato o el que más nos guste, este modelo de análisis ORICO SCM2T3-G40 es el más económico de los tres.
Respecto a su diseño, podríamos considerarlos un poco más agresivo o menos refinado que sus hermanos, aunque está construido íntegramente en aluminio como los demás. El color también será el mismo, bien en gris plata como el modelo de análisis o en blanco. Sus medidas son de 41 mm de ancho, 101 mm de largo y 15,4 mm de grosor, así que en cuestión de tamaño no vamos a tener problemas de portabilidad en bolsos o incluso bolsillos. El peso será de unos 90 g, sin contar el cable.
El diseño se basa en un rectángulo con esquinas bastante prominentes, aunque ligeramente redondeadas, y en uno de los laterales tenemos la insignia de ORICO bien visible. La zona superior será la que cambia más respecto a sus hermanos, y el ORICO Thunderbolt 3 NVME M2 Enclosure tiene una superficie provista de un denso aleteado. De esta forma podrá mejorar la refrigeración del SSD que instalemos en su interior. Esto será especialmente importante si utilizamos unidades de alto rendimiento que superen los 3000 MB/s, ya que suelen calentarse bastante bajo estrés.
El conector se sitúa en una de las caras laterales, ligeramente movido hacia un lado y por supuesto de tipo USB Type-C. Su estética general es simple y sobria, ya que todos los laterales son completamente lisos al igual que la parte inferior. En esta última encontraremos un pequeño tornillo que luego retiraremos para abrir el encapsulado y acceder al interior.
El ORICO SCM2T3-G40 también incluye un muy útil Thermal pad de silicona conductora con un tamaño de 2280. Esta debemos colocarla sobre la parte superior del SSD, quedando en contacto con la tapa del encapsulado y así poder refrigerar adecuadamente la unidad. Es un excelente de talle que no todas las cajas traen, y en este aspecto los chinos siempre cuidan mucho sus presentaciones.
Sin mucho más que ver fuera, vamos a extraer el tornillo de la zona inferior para abrir por completo el ORICO Thunderbolt 3 NVME M2 Enclosure. Este se compone de dos partes estilo cajón bien construidas y con el detalle de tener una región más delgada para colocar ahí el thermal pad.
La PCB por supuesto contará con dos elementos clave, por un lado, la ranura M.2 M-Key PCIe 3.0 x4 en donde se conecta el SSD, y por otro el controlador JHL6340 Thunderbolt 3 a 40 Gbps. Recordemos una vez más que esta unidad solamente será compatible con equipos dotados de este tipo de conectividad, y no será detectado por aquellos con USB 3.2 Gen1, Gen2 o Gen 2×2. Esto reduce sus posibilidades de conexión, así que se debe tener muy en cuenta. En cuanto a sistemas operativos no habrá problema, pues es compatible con Windows, Mac y Linux.
Esta PCB no irá fijada a la carcasa, así que será perfectamente extraíble para una mejor instalación de la unidad SSD. El procedimiento será el habitual seguido en una placa base, colocando el SSD en la posición correcta y luego fijándolo con el tornillo que se incluye en el bundle. Lo ideal hubiese sido utilizar tornillos con cabeza Philips, por si se nos perdiera el destornillador que viene incluido, aunque tampoco es que sea nada grave.
Cuando todo esté cerrado y listo, será el turno de conectar el ORICO Thunderbolt 3 NVME M2 Enclosure en el puerto Thunderbolt de nuestro equipo.
Veremos en la zona superior un LED verde encendido que nos marca si hay actividad en la unidad. El cable que se ha incluido es de excelente calidad, con cubierta de goma, bastante grueso y con extremos reforzados con metal. Su longitud será de 50 cm, más que estándar en la interfaz Thunderbolt.
Tras ver con el suficiente detalle la estética y el sistema de montaje del ORICO Thunderbolt 3 NVME M2 Enclosure es el turno de realizar pruebas de rendimiento con él. Hemos utilizado una unidad ORICO Troodon V500 de 512 GB en su interior y un portátil Lenovo Yoga 730 para las pruebas, ya que es uno de los equipo que tenemos actualmente con Thunderbolt 3.
Es evidente que no estamos llegando a las velocidades de transferencia máximas ni de la interfaz ni del SSD interno, ya que por el camino siempre perderemos parte del ancho de banda al hacer el cambio de interfaz. Además, este SSD conectado directamente en placa alcanza como máximo los 2070 MB/s en lectura y 1500 MB/s en escritura.
Con una unidad de mayor rendimiento es posible que las velocidades de transferencia suban, pero también el SSD del equipo deberá ser igual o más potente para no hacer de cuello de botella. En cualquier caso, la capacidad de transferencia es impresionante y no defraudan en ningún caso, pero debemos tener un hardware lo suficientemente potente como para sacarle partido a la interfaz.
En cuanto a temperaturas no ha habido problemas, ya que la unidad instalad es bastante buena en este aspecto. La superficie aleteada está haciendo un buen trabajo, aunque quizás con SSD más potentes o de mayor calentamiento como los Intel o los ADATA, el encapsulado llegue a alcanzar altas temperaturas.
Obtenemos una media de 40 ºC según sensores vía sofware, mientras que con nuestra cámara térmica FLIR nos marca 33 ºC de pico durante el estrés del SSD. Por lo que, la caja cumple perfectamente las necesidades de refrigeración que se le exige a este tipo de dispositivos de almacenamiento.
ORICO es especialista en este tipo de productos orientados a la conectividad de periféricos de alta velocidad y cajas para unidades de almacenamiento. El trabajo realizado con este modelo es excelente, pero si preferimos una estética más pulida, tenemos dos modelos más de idénticas prestaciones y formato.
El ORICO Thunderbolt 3 NVME M2 Enclosure está claramente optimizado para darnos un extra en refrigeración, por ello será el más indicado para instalar unidades SSD M.2 de alto rendimiento y que generen temperaturas elevadas. El detalle de tener superficie aleteada e incluir un thermal pad de silicona es una excelente noticia para asegurar una larga vida del SSD.
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El proceso de instalación es sumamente sencillo y no reviste complicación alguna. Aunque debemos asegurarnos de no perder el destornillador que se incluye por ser cabezas torx no tan habituales. El cable incluido es de muy buena calidad, y con la longitud típica de la interfaz Thunderbolt. No es problema para la portabilidad, que está asegurada con un bajo peso y medidas muy compactas ajustadas a los SSD de 2280.
A nivel de rendimiento nos topamos con unas tasas muy buenas y convierte nuestro SSD NVME en un gran dispositivo externo. Aunque salga la nueva tecnología Thunderbolt 4 y lo equipo equipos de altos rendimiento, las tasas de transferencias serán las mismas. Aunque creemos que poco a poco el USB 3.2 irá ganando terreno y veremos mucho más dispositivos con esta interfaz.
El ORICO Thunderbolt 3 NVME M2 Enclosure estará disponible por un precio de aproximadamente 117 euros en Aliexpress. Si aprovechamos alguna oferte podríamos tenerlo por unos 95 euros, pero en tiendas como Amazon descartamos su compra por tener un precio bastante elevado. El resto de modelos están ligeramente más caros. Su elevado precio hace que sea un producto para uso muy concreto y solo para usuarios que le vayan a dar mucho y tengan equipos con Thunderbolt 3.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| + ENCAPSULADO ÍNTEGRAMENTE DE ALUMINIO | – ALTO PRECIO |
| + INCLUYE THERMAL PAD Y DESTORNILLADOR | – COMPATIBLE CON THUNDERBOLT 3 SOLAMENTE, ECHAMOS EN FALTA UNA CAJA PARA USB 3.2 |
| + MEDIDAS COMPACTAS Y BAJO PESO | |
| + FÁCIL INSTALACIÓN | |
| + VARIOS MODELOS DISPONIBLES |
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