Der8auer ha sido el alquimista que ha puesto a funcionar dicha posibilidad: ha hecho un overclock al Ryzen 9 5950X con la refrigeración Intel TEC.
El ingeniero alemán ha cogido el último refrigerador de Intel y lo ha hecho trabajar con EKWB para subir de frecuencia al Ryzen 9 5950X. Lógicamente, ha tenido que realizar alguna modificación para que la solución TEC funcionase en el socket AM4. Además, ha tenido que hacer algún que otro ajuste en el software.
Por un lado, Intel TEC requiere un control software completo para hacerlo funcionar como es debido, por lo que Der8auer ha tenido que trabajar con una máquina secundaria potenciada por un i9-10900K para poder controlar el software.
No hay duda de que es un experimento de laboratorio, y la idea era ver las capacidades que ofrece este Ryzen 9 5950X. Esta CPU alcanzó los 90ºC con la solución TEC deshabilitada, cayendo en picado a los 50ºC cuando el bloque de agua se ha puesto a funcionar.
En lo que a videojuegos respecta, el 5950X alcanza los 5.05 GHz en single-core si activamos el perfil de overclock automático. Mientras tanto, el procesador, normalmente, era overclockeado a 4.8-4.9 GHz en todos sus núcleos cuando se usaba esta solución de Intel TEC.
Con el TEC funcionando sin regular, el Ryzen 9 5950X logra una temperatura espectacular y llega a los 5.3 GHz en todos los núcleos.
Der8auer ha utilizado una placa base ASUS Maximus XII EXTREME Z490 para hacer funcionar el i9-10900K, el cual estaba refrigerado por un disipador Noctua.
Por otro lado, la máquina AMD está protagonizada por otra placa ASUS DARK HERO X570, que es donde tenemos al Ryzen 9 con el bloque de agua de EKWB adaptado para que encaje bien en este socket.
Si os fijáis, la refrigeración de EKWB está conectada a la placa Intel para «engañar al software».
Una vez en Windows, podéis ver que tenemos dos modos para hacer funcionar el Intel TEC: Cryo o Unregulated (sin regular).
Como veis, la temperatura baja hasta 5 grados de diferencia si lo activamos en este modo, por lo que el overclock del Ryzen 9 5950X es patente, logrando 22ºC en IDLE.
En el primer test de Cinebench que realiza Der8auer, vemos como la CPU se pone a 83ºC sin pestañear. Por el contrario, con el modo «cryo» activado la CPU baja a 53ºC en mitad del mismo test.
En el caso de los videojuegos, supera los 5.0 GHz con el modo de overclock automático sin pestañear, ni alcanzar 50ºC, lo que es un rendimiento espectacular.
Por último, quedaba probar la frecuencia máxima en todos los núcleos, la cual llega a 5.3 GHz sin tener problemas de temperatura en absoluto. Cuando Der8auer quería subir a 5.4 GHz el PC se reiniciaba.
Si podéis optar a una buena refrigeración, no hay duda de que podréis disfrutar de los Ryzen 5000 en toda su esencia, pudiendo subirlos bastante.
En nuestro caso, comprobamos el potencial de overclock que tiene el Ryzen 7 5800X, dejando claro que se puede subir más la frecuencia.
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