La silla gaming Drift DR500 forma parte de la nueva remesa del fabricante español, siendo el segundo modelo en prestaciones y calidad por debajo de la DR550 y encima de la DR250. Tenemos un diseño agresivo y llamativo para jugadores terminado en piel de poliuretano de calidad y textura superiores a la generación anterior, así como FOAM de 65 kg/m3 en el interior.
Un silla muy cómoda y sobre todo diseñada para durar por su buen chasis, brindando una excelente ergonomía gracias a los reposabrazos 4D y asiendo reclinable. Implementa un nuevo sistema de balanceo dinámico que mejora el confort y el centro de gravedad, siendo bloqueable mediante una palana inferior. Todo esto y mucho más lo descubriremos en nuestro análisis, así que ¡empecemos ya!
Como siempre, agradecemos la confianza que Drift deposita en nosotros al cedernos esta silla para su análisis.
El peso de esta silla DRIFT DR500 ronda los 25 Kg, y la encontramos metida dentro de una gran caja de cartón rígido estándar con acabado neutro como es habitual en esto casos. Las medidas del paquete serán de 86 cm de largo, 65 cm de ancho y 34 cm de alto. En resumidas cuentas, deberíamos de necesitar la ayuda de un compañero para transportarla. En las caras exteriores tenemos el modelo de silla y algunas especificaciones en la zona lateral.
La apertura la debemos realizar por la cara que se marca como superior, para de esta forma obtener las partes correctamente en caso de que alguna vez queramos guardarlas. La silla vendrá completamente desmontada, incluidos los reposabrazos, y con cada componente separado del otro mediante un panel de espuma y una bolsa de plástico.
El bundle va a contener los siguientes elementos:
En este caso no se disponen de tornillos de repuesto, así que tengamos cuidado con los presentes, que se encuentran metidos en un molde de cartón separados por clase.
Tras haber lanzado al mercado unos cuantos modelos de gama de entrada y media como la DR111, el fabricante ha hecho lo propio en la gama media y alta con hasta tres modelos. La DRIFT DR500 es el modelo justo por debajo de la DR550 que básicamente supera a esta en un acabado algo más premium y más de oficina con colores negro y marrón.
Pero el modelo que nos ocupa tiene claramente un corte más gaming, y tan solo debemos ver las configuraciones de color para darnos cuenta. Además del modelo negro y rojo que analizamos, también estará disponible en negro y azul, negro y verde, y finalmente negro y carbono como el modelo más discreto y que seguramente guste a más público. La silla una vez montada tendrá unas medidas de 70 cm de ancho, 55 cm de profundidad y entre 126 y 136 cm de altura dependiendo de la extensión a la que coloquemos el pistón. Como vemos es una considerable altura, y con el cabezal integrado que tiene, asegura una espléndida comodidad.
Soporta un peso máximo de 150 kg gracias a un pistón de clase 4, así que les vendrá muy bien a aquellos usuarios que tengan una estatura aproximada de 180 o 190 cm o incluso un poco más. La anchura del sillón es apta para personas de complexión fuerte, y posiblemente otros usuarios más bajitos necesiten un reposapiés para que no se queden sin apoyo. Por otro lado la densidad general de la espuma que se ha utilizado para respaldo y asiento asciende a los 65 kg/m3, que es realmente elevada y aportará una sensación de bastante dureza.
Otro aspecto general a tener en cuenta de esta silla DRIFT DR500 es que cuenta con acabado en piel sintética de poliuretano. Esto por un lado es malo para ambientes calurosos al ser en definitiva plástico poco transpirable. Pero por el otro, será un material muy sencillo de mantener y limpiar, siempre sin productos abrasivos, y además la estética es más premium que una silla de tela.
Tras la presentación de sus características generales, vamos a ir viendo cada elemento en detalle y conociendo mejor esta DRIFT DR500.
Empezamos por la base de la DRIFT DR500, que será el primer elemento que montemos para ir colocando todo lo demás. En esta ocasión tenemos un formato en estrella de 5 puntos de poyo con una extensión de 70 cm. Como una buena gama alta, el material que utiliza es acero de gran grosor para soportar esos 150 kg de peso máximo recomendado, con un acabado en negro satinado. La textura de la superficie es ligeramente rugosa, dándole un muy buen aspecto externo y claramente superior a las patas de plástico.
No dispone de elementos específicos para apoyar los pies, aunque tampoco será un problema para el desgaste de los brazos. Si le damos la vuelta al elemento, veremos un refuerzo de metal en la zona central que evitará que los brazos se hundan. Y moviéndonos hacia los extremos, por supuesto encontraremos los correspondiente agujeros reforzados para poder instalar las ruedas. Estos no tienen ninguna peculiaridad que remarcar, y permitirán una instalación a presión de las ruedas.
Las cinco ruedas están construidas en plástico rígido y superficie de rodamiento en nailon, con un diámetro bastante amplio de 60 mm. Cada unidad cuenta con dos ruedas que girarán de forma individual para asegurar la máxima versatilidad en el desplazamiento, y su columna de soporte permitirá el giro 360o para orientarlas a cualquier dirección. No cuentan con ningún tipo de freno, ni tampoco protección en la banda de rodadura, algo que hubiera sido muy positivo al no disponer de demasiadas sillas en el mercado con este sistema y a un precio competitivo.
Son ruedas provistas de 8 radios también de plástico con rodamiento por cojinetes, o eso suponemos debido a que no se ven. Para efectuar la instalación, solamente tendremos que introducirlas en el correspondiente agujero, y una arandela a presión interna se encargará de mantenerlas sujetas. Lo más importante es saber que ruedan muy bien, al ser de gran tamaño son muy silenciosas y no se quedan frenadas.
Esta silla gaming DRIFT DR500 está utilizando un pistón de clase 4, algo muy habitual por no decir repetitivo en casi todas las sillas de este tipo. Es prácticamente el mismo que utilizarán otros modelos del fabricante, aunque en esta ocasión el recorrido que soporta es de 80 mm, un poquito más que por ejemplo los 70 mm de la DR111, pero igual que la DR250. Partirá de una altura de 24 cm hasta los 31,5 cm medidos en la zona inferior al sistema de control de altura.
La otra parte necesaria para efectuar el movimiento de la silla DRIFT DR500 la realiza el mecanismo en el que irá instalada la zona superior del pistón. Este sistema de balanceo es una de las principales novedades que se introduce en este modelo, subiendo bastante la calidad del mecanismo. Incorpora un nuevo mecanismo de balanceo que permite repartir mejor el peso del cuerpo en la silla para mejorar el centro de gravedad.
A efectos prácticos lo que hemos notado es un balanceo más suave de la silla y en mayor rango de forma segura, casi tanto como el equivalente a retrepar el respaldo unos 35o. En la zona inferior disponemos de una palanca a cada lado, que en la posición sentados en la silla, la derecha sería para regular la altura, y la izquierda para bloquear el balanceo de la silla.
El sistema basculante también incluirá un elemento de regulación de la dureza para así poner más blando o duro ese movimiento. De fábrica lo cierto es que viene demasiado blando para mi gusto, así que con un apretón se quedará mucho más estable en caso de que pensemos inclinar la DRIFT DR500.
Este elemento necesitará cuatro tornillos para su fijación a la base del asiento, los cuales debemos apretar al máximo posible para evitar chirrido con el uso. Así mismo, hemos visto una buena lubricación para el agujero de instalación del pistón y en la zona de mecanismo de inclinación. En caso de que en un breve espacio de tiempo notéis chirridos, pues debéis lubricar nuevamente las uniones movibles de la silla e incluso las atornilladas. No es un defecto de fabricación, simplemente un efecto que se produce tras un tiempo de uso.
Ahora procedemos a analizar la zona del respaldo de la DRIFT DR500 con el máximo detalle posible. En esta ocasión no podría ser de otra forma, y tenemos un diseño de asiento tipo baquet similar a los coches deportivos. Además en una combinación entre color principal negro para la zona lumbar, y rojo o el color secundario que sea, en la zona de los bordes y el hilo de las terminaciones.
Es un respaldo bastante amplio, ofreciendo unas medidas de 50 cm por la zona de mayor anchura y 80 cm de altura máxima. La zona del respaldo sin contar las orejas tiene 29 cm por la zona más estrecha y un grosor en la espuma de 7 cm en la zona suprior y unos 10 cm en la zona inferior. Se ha construido sobre un chasis tubular de acero con refuerzos internos que sujetan el molde de espuma de una sola pieza con 65 kg/m3 de densidad media.
Si en algo destaca este respaldo, es en su dureza y la buena sujeción que brinda para espaldas prácticamente de todos los tipos. Y es que en los laterales tenemos unas contundentes orejas que sobresalen bastante hacia delante y de unos 7 cm de grosor. La zona lumbar es un poquito más ancha que muchos modelos de gama media, y facilitará una posición más cómoda para personas de complexión fuerte. Las dos aberturas superiores están terminadas en un elemento de plástico brillante perfectamente sujeto. Mientras vaya pasando el tiempo, nos acostumbraremos a esta dureza, cuya ventaja es la de darnos muchísima vida útil sin hundimientos.
Todo el respaldo se ha cubierto con lona de piel sintética construida en poliuretano de muy alta calidad. Esto se nota tan solo a la vista, presentando un aspecto más parecido a la piel natural y con un acabado menos listo que en generaciones anteriores. El color en negro mate le sienta de muy bien, dándole un aspecto menos resbaloso y más confortable. Las sensaciones se reafirman en el momento en el que tocamos el material, ya que presenta muy buen acolchado y unas costuras en perfectas condiciones. El logotipo del cabezal tanto en la zona delantera como trasera está bordado en hilo, dándonos un acabado más premium y de mejor durabilidad, una constante en esta DRIFT DR500.
La parte trasera del respaldo está hecha exactamente en el mismo material de piel sintética, aunque tendrá una terminación dura, seguramente con una tabla. Justo a los lados encontraremos dos agujeros que nos permitirán instalar el respaldo sobre las varillas de acero del asiento. Estos agujeros en la lona de poliuretano no se han reforzado con costuras, así que tengamos cuidad al manipularlos para que no puedan romperse. Para tapar todo el sistema de sujeción tenemos dos embellecedores de plástico típicos.
Por parte de los cojines, la DRIFT DR500 incluye tanto uno lumbar como otro cervical, ambos con el mismo acabado exterior que la silla. Son cojines bastante amplios, aunque utilizan una espuma algo más blandita para mejorar la comodidad. El más cómodo como siempre será el cervical, ya que el lumbar ocupa bastante espacio y nos deja la espalda no demasiado pegada.
Vamos ya terminando con el análisis de componentes de la DRIFT DR500, y solamente nos queda por analizar el asiento y sus reposabrazos. En esta ocasión no vendrán instalados, lo que hubiera sido una pequeña ventaja para el usuario al ahorrarse colocar 8 tornillos.
El sillón tiene un diseño tipo baquet como el respaldo, y se presenta con dos notorias orejas a los lados para sujetar mejor nuestras piernas. Las medidas serán de 53 cm de profundidad útil (sin contar el espacio que ocupa el respaldo encima), 53 cm de anchura máxima, y 40 cm de anchura del asiento sin orejas. El grosor de su espuma de 65 kg/m3 llegará a su máxima en el frontal, con alrededor de 15 cm, siendo por tanto más gruesa de lo que vemos normalmente.
El acabado es exactamente el mismo que en el respaldo, con el recubrimiento de piel sintética con el mismo acabado rugoso. En la parte central tiene costura de adornos similares al respaldo, y una notable inclinación hacia dentro que mejorar nuestra comodidad. En la zona trasera nos encontraremos con el sistema de palanca para inclinar el respaldo hacia atrás, el cual nos permite llegar prácticamente a los 180o a pesar de que en las especificaciones solamente marca hasta los 135o. Cabe decir que la unidad que nos ha llegado viene con la palanca doblada hacia dentro, bien tocará arreglarla, o bien devolverla por una unidad en perfectas condiciones.
Un buen detalle es que ya contamos con las protecciones inferiores de plástico preinstaladas, las cuales a veces vienen como elemento aparte en el bundle. Mucho cuidado con darle a la palanca sin tener el respaldo puesto, porque la presión que realiza el muelle sobre ella podría darnos algún que otro disgusto.
Ya pasando a la parte inferior del asiento, podemos ver que la espuma descansa sobre un chasis de acero tubular con tres grandes barras atravesando por donde nuestro cuerpo hace más presión al sentarse. A esto le sumamos dos arneses y dos pequeñas barras para sujetar la cubierta. Algo que consideramos positivo es que no tenemos una cubierta textil tapando esta zona, ya que éstas suelen degradarse bastante rápido provocando suciedad.
La DRIFT DR500 cuenta con reposabrazos 4D, lo que significa que prácticamente podemos moverlos hacia donde queramos. Estos vendrán sobre una estructura de hierro con carcasa de plástico telescópica y recubrimiento de poliuretano acolchado para la zona del brazo. Sus medidas son de 28 cm de largo, 10 cm de ancho y se quedarían a una longitud de 60 cm de extremo a extremo una vez instalados.
En este caso los ejes liberados nos bridarán estas posibilidades:
Como es normal en estos casos, la rigidez y la sujeción de los reposabrazos no es una maravilla, ya que al tener tantos ejes liberados encontraremos un poco de holgura en ellos. Al menos son bastante cómodos y amplios con un aceptable acolchado.
Pues así es como quedará esta DRIFT DR500 completamente montada y lista para usar. Una silla de una buena envergadura apta para personas de complexión fuerte al tener espacios amplios tanto en asiento como respaldo.
El procedimiento de montaje no reviste demasiados problemas, y tenemos un breve manual con los pasos a seguir para llevar a cabo el trabajo. Lo único que ha faltado es poner la referencia del tipo de tornillos en cada paso.
Drift es una de las marcas de sillas gaming más aclamadas, especialmente en lo que respeta a calidad/precio. Con esta nueva remesa de sillas nos ha dado más opciones para la gama media y alta usando diseños agresivos para gamers como es el caso de la DR500, o más elegantes para oficinas y despachos como la DR550.
Se trata de una silla bastante amplia en asiento y respaldo, siendo muy recomendable para personas altas y corpulentas. La espuma de 65 kg/m3 será perfecta para soportar un peso de hasta 150 kg con garantías y poca deformación con el paso del tiempo. Diseño ergonómico y esa dureza que nos da serán buenas noticias para nuestra espalda si vamos a estar muchas horas sentados en ella.
Te recomendamos la lectura de mejores sillas para PC del mercado
La movilidad es fantástica, con ruedas de radio amplio, respaldo reclinable y reposabrazos 4D. Además, tiene un rango de movimiento bastante amplio con 8 cm, cabecero y cojines para una mejor adaptación. Tanto las patas como el chasis son de acero, notándose más rígido y con mayor seguridad, y será una mejor opción que los típicos asientos con tabla y patas de plástico.
La DRIFT DR500 la encontraremos disponible en nuestro país por un precio de 249 euros, el cual está muy cerca de la DR300 y en torno al coste de la T1 de Corsair por ejemplo. Una muy buena silla si lo que queremos es tener el mejor setup para juegos a un precio asequible.
VENTAJAS | INCONVENIENTES |
+ DISEÑO | – REPOSABRAZOS CON UN POCO DE HOLGURA |
+ BUENOS ACABADOS Y PIEL DE POLIURETANO DE MEJOR CALIDAD | |
+ RESPALDO RECLINABLE Y REPOSABRAZOS 4D | |
+ BUENA SILLA PARA PERSONAS DE ALTA ENVERGADURA | |
+ CALIDAD/PRECIO |
El equipo de Profesional Review le otorga la medalla de platino:
CHIEFTEC acaba de presentar dos nuevas cajas para PC, Visio y Visio Air con un…
Asus ZenWiFi BT8 es un sistema Mesh Wi-Fi 7 el cual se sitúa por debajo…
Qualcomm anuncia nuevos SoC Snapdragon X, pero no se trata de una nueva generación, sino…