Ducky es un viejo conocido entre los analistas de Profesional Review. En esta ocasión tenemos la oportunidad de analizar el Ducky One 2 RGB TKL, un teclado compacto perfecto tanto para trabajar como echar unas cuantas partidas. ¡Echémosle un vistazo!
El Ducky One 2 RGB TKL nos llega presentado en una caja azul marino de acabado mate. En su portada tenemos un diseño geométrico destacado con resina acompañado del nombre de la marca y modelo de serie, la One 2. En uno de los laterales disponemos de una pegatina con el número de serie acompañado del código de barras.
Vamos al reverso y aquí tampoco encontramos una imagen del producto, sino información sobre sus dimensiones, peso y tipo de interfaz acompañado de la Web Oficial del fabricante. En la zona derecha destaca el sello de interruptores Cherry MX, de entre los que podemos elegir la variedad que más nos guste.
El Ducky One 2 RGB TKL es un formato compacto que prescinde de teclado numérico y apuesta por una reducción de tamaño y transportabilidad. Su peso es inferior a un kilo (950g) y nos llega con distribución completamente española.
El chasis externo del Ducky One 2 RGB TKL está cubierto con dos láminas de plástico en las que se combina una cubierta superior negra e inferior de color blanco. De un primer vistazo notamos que los márgenes respecto a las teclas son bastante reducidos, por lo que el teclado apuesta por una reducción en sus dimensiones base (365x135x40mm).
El acabado de la placa superior negra se extiende parcialmente por los laterales izquierdo y derecho, actuando como una doble capa en la que visualmente el negro se mantiene del mismo grosor mientras que la pieza blanca añade un ángulo de elevación trasero a la estructura por defecto.
A este respecto encontraremos que la diferencia de elevación entre el Ducky One 2 RGB TKL una vez desplegamos las patillas es considerable, alcanzando un ángulo que resulta más ergonómico a la hora de mecanografiar o jugar.
Dándole la vuelta lo primero que observaremos son las cuatro superficies de goma antideslizante negra que están situadas en cada una de las esquinas del teclado, asegurando un agarre correcto sobre nuestro escritorio. También en el centro de la estructura observaremos una placa de aluminio con marca, modelo, número de serie y otros certificados grabados con láser.
Adicionalmente, en el margen superior apreciamos la clavija de conexión así como dos vías en las que podemos reconducir el cable para que reaparezca por la zona izquierda o derecha del teclado respectivamente. A lo largo de los carriles son observables varios salientes de seguridad que se encargan de mantener el cable fijo sin que se esparza por la mesa bajo el teclado.
Este método de sujeción se repite en las propias patillas traseras, que también cuentan con caucho en su base para mantener una buena fijación en la mesa, detalle que se agradece bastante. Estas patillas disponen de dos modalidades de elevación integradas dentro de una misma bisagra, lo que amplía el abanico total de opciones y es una estrategia bastante habitual en los productos de Ducky.
Ya que estamos comentando la zona posterior, llamará la atención de algunos lectores el panel de cuatro interruptores presente en la zona inferior derecha. Este es un “Switch Selector” (DIP Switch), que nos permite optar ente diferentes layouts según la combinación que escojamos.
De este modo podremos cambiar la distribución de símbolos (Fn, Pn, CapsLock, R Ctrl…) y caracteres en el teclado y así adaptarlos a diferentes formatos (Colemak, Dvorak y Qwerty). Esta también es una característica reincidente en Ducky. Aunque puede que el público general no le saque mucho partido, aquellos de vosotros que tendáis a intercambiar idiomas podréis encontrarlo muy útil.
En la zona trasera apreciamos por último el acabado levemente biselado que también está presente en la parte frontal aunque con una longitud menor.
El logo de Ducky y modelo de serie One 2 RGB hacen acto de presencia respetando la paleta cromática que combina blanco, negro y rojo como únicos colores dominantes.
Finalmente fijamos la vista en el puerto de conexión para el cable del Ducky One 2 RGB TKL, que se trata en este caso de un USB tipo C. Detalle muy agradecido es que este modelo de teclado disponga de cable extraible, lo cual siempre supone una gran ventaja cuando queremos reemplazarlo por un modelo diferente.
El Ducky One 2 RGB TKL que ha caído en nuestras manos llega equipado con interruptores Cherry MX Brown.
Este modelo de interruptor es de tipo táctil, lo cual significa que percibimos una resistencia en su recorrido de pulsado justo en la distancia de activación. Son algo más duros que los Cherry Red (55g) pero no tanto como los Black (60g).
Los keycaps que llegan equipados por defecto son con un acabado negro levemente brillantes. El material con que están realizados es ABS, lo cual les confiere una cierta suavidad al tacto.
Están fabricados con doble inyección, lo cual permite el traspaso de la luz a través de sus caracteres cuando se emplea retroiluminación. La lectura de por sí resulta muy correcta dado que se emplea una tipografía de un cierto grosor, lo que ofrece una transmisión de luz bastante alta.
No obstante, la cosa no termina aquí. Como mencionamos en el inicio, el Ducky One 2 RGB TKL nos ofrece un extractor de teclas dentro del embalaje, el cual llega acompañado de un set de diez teclas adicionales:
Todos estos keycaps ya no están realizados en ABS, sino PBT. Este material plástico ofrece un tacto levemente más áspero y acabado mate, aunque tienen el inconveniente de que no son retroiluminados.
La barra espaciadora alternativa por su parte es la única excepción del lote realizada en ABS en lugar de PBT. Esto se debe a que su característico diseño del cerdo salvaje está serigrafiado con doble inyección y es retroiluminable.
Continuando con otros menesteres, el cable del Ducky One 2 RGB TKL es un modelo extraible forrado en goma de unos 120cm. En el embalaje interesa destacar la presencia de una banda de velcro integrada en el cable para facilitar su guardado durante los desplazamientos así como dos capuchones de plástico para los conectores USB.
Su conexión con el teclado se realiza vía USB-C y con nuestro equipo presenta interfaz USB-A 2.0. En ambos puertos encontramos un refuerzo adicional en la zona de vinculación al cable, que cuenta con cierto grosor (unos 4mm).
Conectamos el Ducky One 2 RGB TKL y este se enciende por defecto con la retroiluminación RGB en arcoiris. Hemos empleado este teclado para un poco de todo, incluyendo la redacción de este artículo y unos cuantos juegos. Francamente los interruptores Cherry Brown no serían nuestra primera opción a la hora de jugar, pero debemos reconocer que una vez nos hacemos a ellos resultan cómdos, especialmente para escribir.
La percepción táctil dificulta errores de doble pulsación que sí son más corrientes en modelos lineales como Black y Red, mientras que la fuerza adicional requerida hace que sus pulsaciones se sientan bastante sólidas.
En general es un modelo de interruptor versátil, aunque desde nuestro punto de vista su uso parece más adecuado hacia mecanografía que juegos, especialmente si sois aficionados a formatos rápidos de disparos en primera persona que requieren gran velocidad.
Para personalizar cuestiones como iluminación y perfiles, nuestra opción recomendada es siempre el software. Ducky ofrece para el DUCKY One 2 RGB TKL el programa DuckyRGBSeries, el cual al iniciarse por primera vez nos ofrece entrar al panel o actualizar el firmware (cosa que recomendamos encarecidamente).
Una vez en su interior observaremos que la interfaz es extremadamente sencilla, contando con una visión general del teclado en que se nos muestra la iluminación y perfiles activos actualmente. Sin embargo no encontramos en este software la posibilidad de editar, crear o eliminar macros, lo cual es una pena.
No obstante, en el manual está la posibilidad de llevar a cabo cambios on the fly de sus características con los comandos adecuados, lo cual sí incluye la grabación de macros. De hecho, el teclado es compatible con Ducky Macro V2.0 (firmware) para ello, motivo por el que os instábamos a actualizarlo primero.
El Ducky One 2 RGB TKL presenta una iluminación bastante llamativa. En parte este efecto se debe a que el doble fondo en el que se encuentran los interruptores es de color blanco, lo cual genera un efecto espejo que hace que los colores ganen una cierta intensidad. El segundo punto es el grosor de los caracteres, que al ser ligeramente menos finos permiten un mejor traspaso de la luz.
No obstante, debemos tener presente que en los mecanismos Cherry MX, los LEDs se encuentran integrados justo debajo, por lo que es posible que notéis que el brillo resulta menos intenso que en otro tipo de teclados en los que el LED está fuera del mecanismo y justo debajo del carácter del keycap.
Personalmente consideramos que tienen una intensidad máxima adecuada y que las letras ganan una legibilidad muy buena cuando está activa, por lo que no hay motivo de queja por nuestra parte.
[irp]Con una tasa de sondeo de 1000Hz y switches Cherry MX, el Ducky One 2 RGB TKL es un teclado que no nos va a fallar tanto si estamos mecanografiando como dándolo todo en una partida. Los acabados del chasis en plástico se ciñen en gran medida a las dimensiones que ocupan las teclas, creando un marco bastante fino que ocupa el mínimo espacio.
Un cable extraíble y dos posiciones alternativas en patillas aseguradas con goma antideslizante así como la presencia de un panel DIP y set de keycaps adicionales son marca de la casa que encontramos en muchos de los productos de Ducky, por lo que esa atención al detalle es la que hace que la marca gane tantos puntos a su favor.
A nivel personal, quizás que el cable estuviese forrado en fibra habría añadido un plus de perfección que muchos usuarios habrían agradecido. Adicionalmente, la tecla de Bloq Mayus izquierda presenta un icono para cuando esta se active, aunque sólo se ilumina en blanco uno de los LEDs presentes en la zona de teclas de situadas en la fila 5 a la izquierda. Que esta opción fuese configurable (elegir entre la iluminación de la propia tecla o el LED auxiliar) habría sido otro detallazo, aunque reconocemos que es un aspecto mínimo.
Te recomendamos la lectura de: Mejores teclados del mercado.
El software es un programa muy asequible y sencillo de entender y usar, completamente en español. La ausencia de una sección dedicada a la edición de macros no nos convence demasiado, aunque somos conscientes de su posibilidad de hacerlo on the fly. En general nos ha parecido un producto redondo, que ofrece muy buenas opciones de configuración al usuario final, que es lo que cuenta.
Podemos adquirir el Ducky One 2 RGB TKL por unos 120,95€ en su distribuidor oficial en España. El precio puede variar levemente según el interruptor que elijamos. Resulta un presupuesto alto, pero también estamos hablando de un producto de buena calidad que está hecho para durar.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| SOFTWARE SIMPLE Y FUNCIONAL CON MEMORIA LOCAL | EL CABLE NO ESTÁ TRENZADO |
| DISEÑO COMPACTO CON CABLE EXTRAIBLE | |
| MUY BUENA LECTURA DE LOS CARACTERES |
El equipo de Profesional Review le otorga la Medalla de Oro:
En esta guía voy a explicar cómo responder una pregunta recurrente entre los usuarios: ¿cuánta…
Te ayudamos a construir tu PC silencioso, no solo en la elección de componentes, sino…
En esta guía te voy a explicar cómo funciona la herramienta para organizar pestañas de…
