NZXT nos sorprende una vez más en el diseño de sus chasis, atreviéndose ahora con una configuración casi única en el mercado. El NZXT H1 es un chasis vertical en forma de cubo alargado increíblemente compacto para placas ITX.
Pero lo más interesante sin duda es que incluye sistema de refrigeración líquida de 140 mm preinstalado y fuente de alimentación SFX 80Plus Gold de 650W y un cable Riser para llegar la conexión PCIe hacia la cámara de GPU que soporta tamaños completos. Un diseño de montaje sumamente estudiado al nivel de las torres de ordenador pre-montadas.
Si queréis ver lo que ofrece este chasis ITX vertical no es perdáis este análisis. Pero antes damos las gracias a NZXT por su confianza en nosotros al cedernos su producto para este análisis.
Ya desde el inicio la NZXT H1 muestra su característica única de diseño, con una caja de cartón rígido de forma cuadrada y alargada de un tamaño amplio. En todas sus caras encontramos una impresión a color blanco brillante en donde se muestran todos del chasis en todo su esplendor, así como algunas de sus características. Una de las que más se remarcan es el hecho de soportar tarjetas gráficas de tamaño completo.
Abrimos entonces la caja por la parte superior y extraemos lo que viene siendo un completo molde tipo sándwich fabricante en espuma de polietileno de gran calidad. En su interior, tenemos metido el chasis completamente cerrado y asilado a golpes y caídas. Este a su vez tiene una bolsa de plástico que lo protege, mientras que la caja de accesorios está ubicada en el interior del chasis.
El bundle de este producto cuenta con los siguientes elementos:
Cabe decir que el bundle es sumamente completo, y debido a que tenemos bastantes elementos ya montados en el NZXT H1, el fabricante no se ha olvidado de los adaptadores y Backplate genérico para montajes tanto en plataforma Intel como AMD. Más adelante lo veremos en detalle.
Por lo demás, es más o menos lo esperado en un chasis, con sus correspondientes tornillos de los cuales tenemos los justos y necesarios y a sus instrucciones que en este caso serán importantes.
Empezamos como siempre por el diseño exterior del NZXT H1, un chasis muy distinto a lo que estamos acostumbrados y del que tenemos que contar muchas, cosas, especialmente de su interior.
Ya desde fuera se nos deja ver que es una torre con todas las palabras, por ser muy esbelta y estrechita, en forma de cubo con esquinas claramente cuadradas e incluso su correspondiente cristal templado. Sus medidas son de 187 mm de anchura y también 187 mm de profundidad, aunque cuenta con medio centímetro más en este caso. Finalmente, su altura es de 387,7 mm es decir, casi la altura de una ATX compacta.
En la NZXT H1 vemos el sello distintivo de la marca, con líneas muy limpias en todas sus caras y aspecto sobrio con predominancia de paneles de metal con un denso agujereado para permitir el paso de aire de la forma más eficaz posible. Estará disponible en los colores negro y blanco como suele ser habitual en NZXT.
Vamos a empezar el análisis en detalle con la parte superior, la cual está ocupada por una placa de metal liso unida a dos laterales. En una de las esquinas tenemos el panel I/O que cuenta con:
Botón de encendido con LED incluido
Panel simple y minimalista como el resto de chasis de la marca. Nos hubiera gustado más un par de USB Type-A, ya que los puertos de la placa en este casis no quedarán demasiado accesibles.
La cara que consideramos principal de la NZXT H1 lógicamente es la que cuenta con ventana. Concretamente se trata de un vidrio templado con un ligero ahumado y que se monta sobre un chasis de acero con estructura muy sólida y perfectamente acabado. Los marcos de alrededor tienen un acabado opaco para esconder los anclajes y el acero del chasis, con el logotipo de grandes dimensiones en la parte inferior.
Este panel es perfectamente extraíble y además de una forma bastante sencilla. Para su fijación se han utilizado anclajes de bola que encajan en unos clics en las cuatro esquinas. Parece un montaje lo suficientemente seguro como para manipular el chasis en cualquier posición si miedo a que se caiga.
Si nos dirigimos al lado opuesto, justo atrás, nos vamos a encontrar por ningún lado el panel de puerto de la placa ni nada por el estilo. En su lugar se ha instalado una chapa de acero completamente agujereada que ocupa absolutamente toda la zona. Tras ella encontraremos el hardware y en este caso ningún filtro anti polvo, ya que por ella el aire entrará o saldrá por convección natural.
Pero en la parte inferior de la NZXT H1 se ha dejado un pequeño hueco de unos 3 cm cuya función es la de permitir meter los cables hacia la placa base, porque sí, el panel de puertos está orientado hacia abajo. A la derecha podemos ver el enchufe para el cable de alimentación de la fuente, del formato estándar de 3 pines que se ha llevado hasta ahí con un alargador preinstalado.
Seguimos con los dos laterales del chasis que esta vez forman un solo bloque de metal junto a la parte superior. Ambas caras cuentan con un agujereado exactamente igual al que hemos visto antes, pero esta vez sí que están protegidos por un filtro anti polvo de malla fina y desmontable.
Uno de los laterales aporta la entrada de aire para el sistema de refrigeración líquida de 140 mm que ya está preinstalado. Este tiene el filtro en el interior, en una segunda capa que ahora veremos.
Mientras tanto, la cara que nos queda da acceso a la entrada de aire para la tarjeta gráfica, que estará instalada en montaje vertical en esta zona.
Solo queda saber que el bloque metálico que integra parte superior y dos laterales se extraerá fácilmente tirando hacia arriba de él. Está montado sobre un sistema de railes a cada lado, y solamente tiene la posibilidad de instalar sobre una posición para que los agujeros superiores coincidan con el panel I/O de puertos. A su vez quedará fijado e inamovible cuando instalemos los dos laterales restantes.
Por hacer una pequeña crítica, no le vemos mucho sentido el haber colocado el cristal mirando hacia la fuente, ya que no vemos absolutamente nada relevante del interior. Hubiera sido mejor colocarlo frente a la tarjeta gráfica para admirar su diseño.
Estamos de acuerdo en que de la forma actual es más eficaz para la refrigeración, pero con laterales tan abiertos creemos que no habría problema en acristalar la GPU.
Casi vamos a tener que ir cara por cara para ver el interior del NZXT H1, ya que es sumamente peculiar y nos presenta un montaje muy bien estudiado y digno de los chasis personalizados para torres de ordenador.
Retiramos todas las chapas y lo que encontramos es una estructura metálica muy fuerte y con el espacio justo para trabajar. El interior se puede dividir en 4 zonas que veremos ahora mismo.
Parte central en donde se encuentra el sistema de refrigeración líquida ya montado y preparado para conectarse a una placa Intel o AMD. Necesariamente tendrá que ser de tamaño ITX estándar, ya que no hay espacio para más. Esta se colocará en posición vertical y con el panel de puertos mirando hacia abajo.
También podemos considerar la zona inferior como una zona más, ya que presenta un hueco amplio para meter y conectar los cables para periféricos y demás. Obviamente no es lo más cómodo para el usuario, pero admite tamaños de pen drive de unos 4 o 5 cm de longitud.
Después tenemos la zona de la tarjeta gráfica, no completamente aislada, pero sí con un espacio propio en donde se admiten tamaños de 305×128 mm o 265×145 mm, con un grosor máximo de 2,5 slots. Realmente podremos meter un grosor de 2,7 slots si así nos lo proponemos, pero los ventiladores quedarán pegados a la chapa.
Un enorme y gran detalle es contar también con el cable Riser preinstalado que traslada la conexión PCIe x16 de la placa hasta el compartimento de la GPU. Y lo cierto es que es uno de gran calidad en sus cables y dos cabeceras PCIe reforzadas y con bloqueo de conexión. El sistema queda bastante discreto y bien implementado.
Nos queda el espacio para la PSU, la cual irá colocada en la zona superior del NZXT H1 en una esquina e inevitablemente será de tamaño SFX. La toma de ventilación está mirando hacia la misma cara que radiador del AIO, el cual tenemos justo debajo.
Como hemos dicho, el filtro anti polvo está directamente situado sobre este radiador el cual se instala en un marco con bisagra removible y abatible muy cómodo y manejable para efectuar el montaje o desmontaje del mismo.
No tiene demasiado sentido, pero si retiramos la refrigeración tendremos espacio para meter un ventilador solo de 140 mm y un disipador de aproximadamente 3 a 5 cm según grosor del ventilador.
La capacidad de almacenamiento del NZXT H1 va a ser un poco escasa como habréis podido imaginar en un chasis con estas medidas y distribución. Y es que el dejar espacio para tarjeta gráficas completas hace que solamente podamos instalar 2 unidades de 2,5 pulgadas HDD o SSD, eso sí, en un armario metálico.
El protagonista lo tendréis precisamente en la captura anterior, con un par de bandejas extraíbles de plástico en donde poder colocarlos sin mayores problemas. Está situada justo detrás de la fuente de alimentación.
Así que no podremos instalar discos duros de 3,5 pulgadas, una notable pérdida para aquellos que quisieran reutilizar sus unidades. Por parte de unidades M.2 no vamos a tener mayores problemas en la capacidad de la placa base, ya que tanto por delante de la placa como por detrás de ella tenemos espacio libre para las ranuras.
El NZXT H1 cuenta con una excelente fuente de alimentación preinstalada, de hecho, bastante mejor de lo que cabía esperar, tanto en potencia como en certificación de eficiencia. Muchas torres de ordenador ya pre-montadas si siquiera están a la altura de este chasis en principio genérico.
Se trata de una fuente de alimentación NZXT S650 Gold SFX-L. Esta PSU cuenta con una potencia de 650W y certificación 80Plus Gold. Un gran detalle a tener en cuenta es que es 100% modular por lo que podremos intercambiar estos cables por unos CableMod si así lo deseamos.
En total contamos con doble salida para alimentación PCIe, 2 cables de alimentación para SATA, 1 cable de 4+4 pines apra CPU y el correspondiente ATX para la placa base. Su condición de modularidad admite expansión, aunque solamente vienen los cables ya instalados. 650W es más que suficiente para tarjetas gráficas y CPU de gran potencia.
Lo más interesante de este apartado va a ser el sistema de refrigeración líquida que se incluye en el NZXT H1. se trata de un NZXT M43, una variante AIO líquida con montaje de 140 mm y ventilador NZXT Aer P instalado en modo de succión de aire.
Nos parece un sistema de buena calidad a juzgar por su construcción, ya que tenemos un radiador de aluminio con marcos de metal rígidos e incluso sistema de purga y cambio de líquido.
Las tomas de los tubos son de plástico y metal, permitiendo el giro en ellos para adaptarlos a la posición final en el chasis. Finalmente, los tubos utilizados serán de caucho, grosor aceptable y con la suficiente longitud como para trabajar cómodamente en el hueco de la placa.
La bomba por su parte es bastante delgadita y con un cold plate de cobre pulido y abundante capa de pasta térmica pre-aplicada. Admite montajes para plataformas:
No tendría sentido alguno ofrecer compatibilidad con plataformas LGA 2066 o TR4 al no haber placas de tal formato. Obviamente incluye el Backplate genérico para las placas Intel en una bolsita incluida en el bundle. También los dos agarres de la bomba para AMD e Intel los cuales son intercambiables tan solo tirando del que esté colocado en el cabezal. Avisamos de que está bastante duro, así que tened cuidado. En general es un sistema de instalación bastante sencillo para todas las plataformas, usando el sistema de agarre propio de AMD sin necesidad de retirar el backplate.
El fabricante ha hecho en excelente trabajo de integración en este NZXT H1, fácilmente instalable y también extraíble, ya que el marco de sujeción del radiador tiene una bisagra para girarlos hacia fuera y librar el espacio para meter la placa y los cables. En ningún momento tenemos que retirarlo para trabajar por lo que el esfuerzo se reduce a retirar dos tornillos.
Vamos a proceder a realizar el montaje pertinente en el NZXT H1, que pare este caso hemos utilizado el siguiente hardware:
Un montaje basado por supuesto en placa ITX con memorias de perfil alto que en ningún momento han molestado para el montaje de la refrigeración líquida.
Sí que hemos tenido algún pequeño inconveniente al montar la placa base, ya que no podemos meter el destornillar recto porque molesta el marco superior, quedando este justo en medio. No es nada preocupante, pero será mejor utilizar un destornillador pequeño.
El cable Riser también podremos manejar de forma sencilla en la placa, ya que está perfectamente instalado y orientado hacia el lugar donde queda la ranura PCIe. Así mismo, llegar perfectamente al lugar en donde colocamos la tarjeta gráfica, con la medida justita, ni más ni menos.
Otro aspecto que facilita bastante la vida es que prácticamente no tenemos que hacer esfuerzo alguno en las conexiones de alimentación, ya que todos los cables están enrutados para los lugares en donde van a ser utilizados. El montaje se queda bastante limpio y sin cable de por medio, aunque cierto es que la ventana de cristal no va a mostrar nada interesante del interior.
Con el montaje perfectamente realizado y el sistema en funcionamiento, podemos ver un resultado muy limpio. El NZXT H1 ha seguido apostando por una estética minimalista y sobria como la gama H con su peculiar formato compacto y alargado. Salvando las distancias, el chasis más parecido que hemos probado ha sido el Silverstone LD03, aunque este es más grande y viene totalmente vacío.
En este caso es un chasis que no incluye ningún tipo de iluminación integrada ni microcontrolador SmartDevice. Tras un tiempo con el equipo encendido no hemos visto signos de calentamiento en los componentes, debido a tenemos 3 de las 4 caras abiertas para la entrada y salida de aire.
El sistema de refrigeración también ha resultado ser muy silencioso, con una bomba que apenas se nota y el ventilador haciendo lo propio. Por ultimo el ventilador de la fuente de alimentación sí que se deja notar, aunque mucho menos que las fuentes ATX debido a su pequeño tamaño, algo que es asumible y normal.
Haciendo balance de nuestro análisis, no cabe duda de que el NZXT H1 es muy diferente a lo que nos tenía acostumbrados el fabricante en lo que a estructura y montaje se refiere. Eso sí, la personalidad sigue intacta, con líneas simples, sobrias y un aspecto claramente continuista respecto a la familia H200, H500, etc.
Si estamos cansados de chasis ITX en formatos típicos con este rompe esa tendencia al apostar por un diseño en cubo alargado sumamente compacto y muy ajustado a las medidas de una placa ITX para que sea un elemento más de decoración en nuestro escritorio. Solamente cambiaríamos la cara ocupada por el vidrio templado y la colocaríamos delante de la tarjeta gráfica, ya que se mostraría algo más interesante y no perjudicaría en exceso la refrigeración.
Hablando de refrigeración, la capacidad para ventiladores podemos decir que es nula, y no por ello malo, ya que en tres de las 4 caras están abiertas al exterior, dos de ellas con filtros. Pero lo más importante es que tenemos un sistema de refrigeración líquida AIO de 140 mm preinstalado. De muy buenas prestaciones, silencioso y exquisitamente integrado compatible con montajes para Intel y AMD de forma muy sencilla e intuitiva.
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Y para ahorrarnos el trabajo, NZXT también ha añadido una fuente de alimentación SFX de 650W 80Plus Gold. Con suficientes cables y capacidad para montar tarjetas gráficas de gran potencia y tamaño hasta 305 mm de largo y 2,5 slots de grosor. Y como su montaje es tan peculiar, pues también se incluye el alargador Riser PCIe, el cual también no ha encantado tanto en construcción como en diseño, al nivel de sistemas que valen 30 o 40 euros.
Detallitos como un montaje algo incómodo de los tornillos de la placa o un panel de puertos bastante básico se deben mencionar, pero no son para nada graves. NZXT ofrece una garantía de 3 años en todos los componentes del chasis excepto en la PSU, donde se amplía 10 años de garantía, lo cual no está nada mal de cara a la fiabilidad.
Finalmente, el precio de este chasis NZXT H1 es de 350 euros en su tienda oficial. Es un precio bastante elevado, pero hay que entender que tenemos tres elementos extras instalados que en conjunto pueden rondar los 200-230 euros, quedando el chasis en unos 100 y poco. Pensamos que no es un chasis para todo el mundo, y lo recomendamos para aquellos que planeen montarse un ordenador desde cero.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| + DISEÑO Y ORIGINALIDAD | – LA UBICACIÓN DEL CRISTAL NO ES LA IDÓNEA |
| + MONTAJE TRABAJADO E INTERESANTE | – NO ADMITE NINGÚN VENTILADOR EXTRA |
| + BUENA REFRIGERACIÓN EXTERIOR | – NO SOPORTA HDD DE 3,5” |
| + INCLUYE SISTEMA AIO DE 140 MM PARA INTEL Y AMD | |
| + INCLUYE PSU DE 650W GOLD Y CABLE RISER DE CALIDAD | |
| + MUY SILENCIOSA Y EFICIENTE |
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