Si pensabas limpiar tu refrigeración líquida, te aconsejamos leer esta guía para realizar un mantenimiento adecuado y con garantías.
Mantener una refrigeración líquida no es apto para novatos, así que hay que llevar a cabo un mantenimiento seguro y funcional. Muchos desaconsejamos este tipo de kits o refrigeraciones por este justo motivo: el mantenimiento. Si algunos ya se equivocan manteniendo un PC normal, no queráis verles en manos de un dispositivo de este calibre. Bienvenidos a nuestra guía sobre cómo limpiar la refrigeración líquida paso a paso.
Índice de contenidos
Lo primero que debéis saber, es que hay que realizar un mantenimiento a vuestra refrigeración líquida cada 6 meses. Es verdad que no pasa nada por pasarnos un poco, pero intentad que no pasen de los 6 meses. Llegado a ese punto, tenemos que reemplazar el líquido.
Todo depende de cómo tengamos hecha la instalación, así que tened en cuenta la forma en la que instalasteis el kit. Si tenéis los tubos bien cerrados, y añadisteis espirales de plata o biocidas, tenéis mucho trabajo hecho.
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En primer lugar, debéis conocer la cantidad de liquido que necesitáis para poder pedir nuevos fluidos. Si tenéis un sistema de drenaje en la refrigeración, será mucho más sencillo.
La necesitamos para lavar bien todo el circuito, como para rellenar el kit entero. Tenéis que comprar una garrafa grande de unos 4 litros aproximadamente. Es muy importante que tengamos una buena garrafa porque la vamos a utilizar mucho.
Se trata de un tubo transparente de PMMA que suelen ser de 12 milímetros. Los podemos encontrar por Amazon o por tiendas de informática como PCcomponentes, Coolmod o Wipoid. Son tubos de refrigeración líquida normales y corrientes. Son esenciales para limpiar la refrigeración líquida También los encontramos en 10 ó 13 milímetros.
Sacaremos el líquido de la refrigeración mediante un tubo que irá a esta botella, también nos vale cualquier garrafa que tengáis sin usar de casa.
Básicamente, será el recipiente estrella para limpiar la refrigeración líquida porque transportaremos mucho líquido a través de ella. Mi consejo es que sea de dos litros porque nunca se sabe si se nos puede quedar corta.
El embudo nos servirá para poder verter el líquido de una botella a otra de forma cómoda y sin derramar nada. Lo tendréis que limpiar igualmente para que la transmisión de fluidos sea buena.
Básicamente, se trata de comprar nuevos líquidos para nuestra refrigeración. Aquí la elección suele ser muy particular, así que sólo me limitaré a decir que compréis un buen líquido de 1 litro de marcas como Mayhems, el de Corsair o EKWB.
Aunque esto es optativo, hay muchos usuarios que quieren darle un poco de color a su kit, así que podéis comprar un líquido concentrado de mil colores distintos. Como consejo, probad a buscar en YouTube si alguien tiene el concentrado que os gusta para ver cómo queda antes de comprarlo. Con el tiempo el efecto pasará y tintará el tubo.
Simplemente, es una garrafa vacía de unos 4 litros o más con la que vamos a transportar mezclas y que vamos a usar para mezclar bien nuestro nuevo fluido.
ATENCIÓN: leeros el paso completo antes de realizarlo porque podéis cometer algún error. No realicéis el proceso conforme lo leéis, sino que leed bien lo que hay que hacer porque dentro del paso hay muchas cosas por hacer.
Antes de retirarla, aseguraros de que la llave no está en paralelo con la salida porque, de ser así, estará abierta. Si la llave está en horizontal, significa que estará cerrada, por lo que podemos retirar la toma tranquilamente porque no se va a salir nada.
Quitamos la tapa superior del depósito y desconectamos el cable de 24 pines que va de la fuente a la placa base. También apagamos la fuente de alimentación de atrás.
Colocamos el tubo con el que vamos a extraer el líquido en la «boca de riego«, en el extremo que se queda fuera ponemos la botella y giramos la llave de forma perpendicular para abrir el circuito.
Cuando se termine de echar todo y los tubos se queden como con «anillos«, cerraremos la llave. Ahora, tenéis que limpiar los extremos del tubo con un poco de papel de cocina.
Recordad que hemos abierto la tapa superior del depósito y que la llave está cerrada, así que vertimos agua destilada en el mismo.
Cuando llenemos casi todo el depósito (dejad un dedo de distancia), cerramos la tapa del mismo y encendemos el ordenador. Si lo hemos hecho bien, el fluido circulará por todo el circuito.
Con el PC en funcionamiento, vamos a volver a extraer el líquido mediante el tubo hacia la botella.
Cuando esté casi vacío, hará burbujas. Cerramos la llave otra vez y volvemos a echar agua destilada en el depósito. No lo llenéis hasta arriba. Vamos a tener que repetir el proceso hasta que tengamos un fluido limpio = totalmente transparente.
Debéis tener en cuenta del material que estáis utilizando para no corromper el circuito. Cuidado con utilizar líquidos corrosivos o incompatibles porque se puede dañar el circuito.
Vamos a apagar el ordenador, abrir la llave y extraer todo el líquido en la botella. Aquí hay que prestar atención a los residuos que se queden de los anteriores fluidos, lo podréis ver en los resquicios del depósito: parte superior e inferior.
Para ello, desmontaremos el depósito y lo limpiaremos a fondo después.
Llegó la hora de ponerse manos a la obra: hay que limpiar cualquier pieza que haya estado en contacto con el anterior fluido. Así que hay que hacer lo siguiente:
Después de hacer el trabajo superficial, la cosa se pone seria. Hay que limpiar el bloque de agua que está encima del procesador. Así que, desmontamos el bloque de agua y todas sus piezas hasta llegar al procesador. Llevad cuidado en este punto.
Cogeremos el embudo y lo pondremos encima de una botella nueva. Normalmente, los líquidos vienen formato de 1 ó 2 litros.
Ahora, llenad la botella de agua destilada. Cuando esté llena, pasamos ese agua de la botella a la garrafa. Echamos todo el fluido nuevo a la botella y rellenamos el resto de la botella con agua destilada.
Vertemos la botella en la misma garrafa que antes. Cuando terminemos, quitamos el embudo y lo limpiamos.
Si habéis llegado hasta aquí, supongo que tendréis una garrafa con agua destilada y el fluido nuevo ¿Verdad? Si es así, llega el momento de rellenar el depósito con el fluido nuevo.
Haced lo siguiente:
Cogemos el «tinte» y echamos una gota en el depósito. Esperad un rato y volved a echar otra gota. Hacéis lo mismo, echáis otra gota y esperáis. Basta con que lo hagamos 2 ó 3 veces.
Ya tendremos nuestro nuevo circuito limpio y colorido.
Hasta aquí nuestro tutorial. Sabemos que es complejo y que puede ser difícil de entender, pero se trata de un proceso algo laborioso. Sólo esperamos que sigáis la guía con sumo cuidado para que podáis disfrutar de vuestra refrigeración líquida.
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