Uno de los portátiles que Acer ha preparado para esta recta final de año es el Acer Predator Triton 300, un equipo gaming que apuesta por un hardware formado por el procesador Intel Core i7-9750H, tarjeta gráfica Nvidia GTX 1650 y 16 GB de memoria RAM. El equipo no es precisamente de los más compactos y más livianos, pero admite doble ranura NVMe y unidades SSD de 2,5”.
El diseño es Predator de pura cepa, con acabados en aluminio, muy robusto y un muy buen teclado RGB de 4 zonas y touchpad. En cuanto a su pantalla, tenemos una IPS de 15,6 pulgadas trabajando a 144 Hz y 3 ms de respuesta, muy indicada para esta GPU por su rendimiento en Full HD.
Antes de comenzar este análisis, agradecemos a Acer su confianza en nosotros al cedernos temporalmente este portátil para su análisis.
El Acer Predator Triton 300 nos ha llegado en una caja de cartón grueso sin nada más en su cara exterior que el logotipo de Predator y la referencia del modelo en el lateral. Dentro de esta caja encontraremos otras dos, la primera que contiene el portátil y la segunda el cargador. Ambas están protegidas con dos moldes de espuma de polietileno.
Accedemos a la pequeña caja que trae el portátil, una construida en cartón duro y mucho más estética que la principal. El equipo viene metido en una bolsa de tela negra completamente en solitario.
En bundle es en este caso bastante escueto:
Acer no se anda con rodeos en su gama de portátiles gaming, y este Acer Predator Triton 300 destaca sobre todo en su excelente construcción y la sensación de dureza que inspira al usuario cuando lo toca. Tenemos una pantalla de 15,6 pulgadas que aprovecha bastante bien el espacio, dándonos unas medidas de 363 mm de ancho, 259 mm de profundidad y casi 23 m de grosor, por lo que no estamos ante un diseño Max-Q precisamente. Su peso también es elevado, con 2,5 kg sin unidad mecánica de 2,5 pulgadas.
Esto se debe principalmente a que el fabricante ha utilizado aluminio para los acabados en tapa, base del teclado y carcasa trasera, así que solamente vamos a ver plástico en el marco que rodea la pantalla. Además es una carcasa bastante gruesa que aporta mucha rigidez a la pantalla y al resto de elementos como el teclado, que para nada se hunde. El color también es el distintivo de la serie, un gris azulado con acabado ligeramente satinado muy bonito. En general vemos en este caso un muy buen trabajo.
La tapa cuenta en este caso con el logotipo de Predator en la parte central y se incluye iluminación LED azul en ella. En cuanto a los marcos de pantalla del Acer Predator Triton 300, tenemos uno superior bastante amplio, con 15 mm de grosor, laterales de 10 mm y el inferior de 30 mm, no dando precisamente el mejor porcentaje en superficie útil con un 77%. En la parte superior tenemos la WebCam integrada y la matriz de micrófonos, y el sistema de bisagras es uno tradicional con una a cada lado, siendo bastante gruesas y de calidad.
En este caso se ha aprovechado todo el espacio disponible para colocar un teclado con numpad y fila de teclas F por supuesto. En este caso cuenta con retroiluminación RGB pero que se gestionará mediante 4 zonas. Por su parte el touchpad está instalado más bien hacia la zona izquierda para mejorar la interacción de usuario en juegos al tener accesibles WASD y touchpad con una sola mano.
Finalmente la parte inferior no guarda demasiados secretos, se trata simplemente de una carcasa de aluminio que se encarga de cubrir toda la zona de PCB con bastantes aberturas para refrigeración. Al desmontarla también quedarán expuestos todos los puertos, ya que ésta pasa a cubrir también los laterales.
Nos vamos a los laterales del Acer Predator Triton 300 para ver que tenemos en cuanto a conectividad y puertos para periféricos. Aprovechamos para ver una zona frontal muy sobria y sin escalones, aunque sí se ha utilizado dos biseles en los extremos para dar más detalle a la estética. La parte trasera está totalmente abierta, con una rejilla a la derecha por la que entra el aire, y el disipador aleteado a la izquierda por donde saldrá expulsado.
Situándonos primero en la zona izquierda encontramos los siguientes puertos:
Vemos una bastante buena conectividad, variada y con dos salidas de vídeo para monitores 4K. en este caso el puerto DisplayPort se ha sacado fuera del USB-C, por lo que éste trabajará a 5 Gbps en lugar de 10, así que no tenemos ninguna conexión USB a 10 Gbps.
Y en la zona derecha nos encontramos con los siguiente:
Aquí tenemos el resto de conectividad, en este caso con USB 2.0 en lugar de haber optado por uno de mayor velocidad. Creemos que el chipset HM370 se le podría a ver sacado más partido en este sentido.
Podemos decir sin lugar a dudas que ésta es la tónica general de este año, portátiles gaming con pantalla IPS a altas frecuencias de refresco. Más lejos quedan ya las VA y TN para este tipo de equipos si vemos como ha evolucionado la tecnología.
Así que en este Acer Predator Triton 300 cuenta con una pantalla con tecnología IPS que ofrece una resolución nativa Full HD (1920x1080p). Su frecuencia de refresco es de 144 Hz y tienen una velocidad de respuesta de 3 ms, aunque no implementa tecnología Nvidia G-Sync ni tampoco FreeSync, lo que hubiera sido un buen detalle.
El fabricante no aporta mucha más información acerca de este panel, tan solo que tiene la tecnología propia de la marca llamada ComfyView. En todo caso es un panel bastante similar a los ya visto en otros equipos gaming de la competencia. Con nuestro colorímetro conoceremos más acerca de este panel.
Hemos efectuado algunas pruebas de calibración para este panel IPS del Acer Predator Triton 300 con nuestro colorímetro X-Rite Colormunki Display, y los programas HCFR y DisplayCAL 3, siendo ambos gratuitos y estando disponibles para cualquier usuario con colorímetro. Con estas herramientas analizaremos las gráficas de color de la pantalla en los espacios DCI-P3 y sRGB, y compararemos los colores que entrega el monitor respecto a la paleta de referencia de ambos espacios de color.
Las pruebas se han realizado con el brillo al 100% en todo momento y la configuración de fábrica de la pantalla con 144 Hz y la configuración estándar de color que en este caso no podremos cambiar desde el panel de Nvidia.
Para profundizar un poco más en las prestaciones de la pantalla hemos utilizado los test disponibles en testufo, concretamente el de ghosting y flickering para verificar el correcto funcionamiento de la pantalla.
En esta ocasión parece que hemos encontrado un ligero ghosting en este panel para la transición de píxeles negros a más claros. No es una estela demasiado amplia pero sí que se deja notar levemente.
Posteriormente hemos contrastado estas capturas con las que ahora realizamos en Metro Exodus, y en este no hemos detectado absolutamente nada en la práctica. Vemos que por ejemplo las figuran están correctamente definidas, y el efecto de sombra replicación que aparece en las horas de los árboles no es ghosting sino efecto del propio juego en la transición y la cámara.
Por otro lado estamos completamente libres de flickering tras haberlo comprobado con el correspondiente test en esta página. En cuanto a bleeding, hemos notado un ligero punto en el marco superior, parte izquierda, aunque es muy leve y solamente la notaremos con nuestra vista y no en la cámara. Finalmente el glow IPS parece que está suficientemente controlado en el panel, dándonos una imagen bastante uniforme en esta escala de grises a la que el ser humano es especialmente sensible en los cambios de tono.
| Medidas | Contraste | Valor Gamma | Temperatura de color | Nivel de negros |
| @100% brillo | 1097:1 | 2,30 | 7471K | 0,2815 cd/m2 |
Tenemos unos valores bastante similares en general a lo que ofrece otros paneles IPS de estas características y resolución, con un contraste superando los mínimos y llegado a casi 1100:1. El valor gamma esta ligeramente elevado por encima de lo ideal, que sería 2,2, lo cual se reflejará en las gráficas de los siguientes apartados. De igual forma la temperatura de color está un poco lejos de los 6500K, lo cual es algo características en el fabricante, ya que en otros equipos y monitores hemos visto esta tendencia a los tonos azulados de la serie Predator.
El brillo se sitúa cerca de los 300 nits, de hecho casi se llega a esta cifra en la zona inferior del panel, mientras que la parte superior será la más alejada, aunque siempre superando los 250 nits. Es un panel en general uniforme, por lo que no tendremos problemas en la calidad del color.
Para el espacio sRGB tendremos una cobertura del 89,9%, que no está nada mal para estar orientado a gaming. De hecho podemos ver un triángulo de cobertura prácticamente idéntico al que ofrecen los paneles de otros equipos como los MSI o los Asus Zephyrus que montan también este tipo de IPS.
El Delta E medio se sitúa en 3,23, siendo relativamente alto aunque dentro de lo permisible, que sería 5. Con una calibración sería suficiente para ajustar estos valores por debajo de 2 o incluso la unidad. En las gráficas de color vemos una clara predominancia del color azul en el espectro, y lo que comentábamos del valor Gamma, el cual sube bastante a partir del 60% de blanco.
Respecto a este espacio más exigente tenemos una cobertura del 68,8% y un Delta E similar al caso anterior con 3,69. Una vez más es similar a otros modelos que hemos probado, y lo cierto es que una certificación Pantone vendría muy bien para tener una calibración un poco mejor de fábrica. No obstante son valores aceptables para este panel ya que no está pensado para diseño.
Tras ver las prestaciones de la pantalla de forma detallada, vamos a darle también un repaso a otros elementos multimedia como es el sonido de este Acer Predator Triton 300 siempre importante para gaming.
El sistema integrado consiste en dos altavoces rectangulares de 3W ubicados en la parte inferior del equipo, uno a cada lado. Éstos nos ofrecen un buen volumen de sonido, aunque con poca presencia de graves, por lo que un usuario gamer debería decantarse por usar auriculares para mejor inmersión.
De hecho Acer ha integrado su tecnología Waves NX 3D Audio en su DAC dedicado a auriculares. Con éste podremos configurar una salida de sonido envolvente de alta calidad y en 3D si tenemos unos auriculares a la altura.
Respecto a la WebCam, se ha instalado una estándar que ofrece una resolución en fotos y vídeo en HD a 1280x720p grabando a 30 FPS. No es en este caso novedad alguna, ni tampoco su matriz de doble micrófono para conversaciones en chats y partidas. Todo esto estará ubicado en el marco superior de la pantalla.
El teclado de este Acer Predator Triton 300 nos ha encantado en lo que a sensaciones de escritura y juego se refiere. En el modelo que analizamos tenemos una configuración sin letra Ñ al no estar aún disponible en nuestro país. Con las medidas de este equipo ha sido posible integrar también teclado numérico en el lateral derecho, y además con cierta separación respecto al mapeado de caracteres. En la parte superior y en solitario tenemos un botón para activar el modo turbo de ventilación, así como un botón integrado en el numpad para abrir el software PredatorSense.
Las teclas funcionan a través de un sistema de membrana de tipo chiclet con un recorrido algo mayor que otros teclados gaming, siendo de 2 mm aproximadamente, por lo que tenemos las teclas algo más elevadas. Gracias a esto se hace bastante cómodo escribir sin equivocarnos. La membrana ofrece un tacto muy amortiguado y de accionamiento directo pero suave y lo cierto es que es una delicia, al menos para mi gusto personal.
Tampoco puede faltar una completa retroiluminación RGB que en este caso se podrá gestionar en 4 agrupamientos de teclas, no siendo posible direccionarlo tecla a tecla. No es por tanto la máxima versatilidad, pero el resultado sigue siendo muy bueno y llamativo. Además las teclas son de tipo backlit así que todo el borde lateral se iluminará y mejorará la experiencia de uso.
El touchpad por su parte se trata de un panel táctil de configuración completa y con los botones integrados. La superficie de navegación es bastante amplia, con 105 mm de ancho y 80 mm de alto, acabado en bordes redondeados y con biseles pulidos sobre el aluminio. Personalmente prefiero botones independientes para gaming, pero este touchpad se nota especialmente bien instalado, sin holgura y con un clic muy suave y directo, así que me ha gustado bastante.
Veamos ahora el software que se incluye en este Acer Predator Triton 300. PredatorSense es el programa que se encarga de la monitorización y gestión del hardware e iluminación del equipo.
Consta de 7 apartados, aunque los más interesantes son los primeros 5. El apartado de inicio es un Dashboard en el que podremos ver las temperaturas del sistema, pudiendo seleccionar el modo de overclocking de la CPU o un perfil de iluminación que hayamos configurado. El siguiente apartado se encarga de la iluminación del teclado, pudiendo personalizar las 4 zonas disponibles aunque no el logotipo de la tapa.
El tercer apartado es una extensión del modo overclocking, que en esta unidad lo cierto es que no nos ha funcionado demasiado bien. No muestra la frecuencia en tiempo real, y la selección no tiene efecto sobre la CPU. Uno que sí es importante el de control de ventiladores, en donde podremos seleccionar uno de los perfiles existente o crear nosotros uno personalizado. Por último tenemos otro Dashboard que monitoriza también el hardware. Los dos últimos aparatados nos dan acceso directo a juegos o aplicaciones que tengamos instaladas.
Para que el botón “turbo” del teclado funcione necesitaremos este software instalado en el equipo. También se incluye la posibilidad de sincronizar el equipo con la aplicación PredatorSense para Smartphone.
Una de las ventajas de presentar los productos tras la primera mitad de año es que la gran mayoría de fabricantes ya han colocado tarjetas Wi-Fi 6 en ellos, y es exactamente lo que se ha hecho en el Acer Predator Triton 300.
Empezando precisamente por ella, tenemos una tarjeta Killer Wi-Fi 6 AX1650, que es la versión gaming de la Intel AX200 integrada en muchas placas base actuales. En cuanto a ancho de banda, nos da exactamente la misma, 2,4 Gbps para 5GHz y 733 Mbps para 2,4 GHz. Con el detalle de que cuenta con un programa para la gestión de cobertura y canales. Además esta tarjeta está instalada sobre una ranura M.2 2230, por lo que será intercambiable por otra.
Respecto a la conectividad de red cableada también se ha utilizado la firma Killer, con un chip E2500 que nos ofrecer un enlace a 10/100/1000 Mbps. Así que en este caso la red Wi-Fi será en más rápida que la cableada.
En este caso tenemos un portátil gaming con un precio bastante más ajustados que el resto de la familia Predator, y principalmente se debe a incorporar la nueva Nvidia GTX 1650, una tarjeta que como veremos más adelante funciona muy bien para resolución Full HD.
En el modelo de Acer Predator Triton 300 que nosotros analizamos (PT-315) nos encontramos con el procesador Intel Core i7-9750H. Una CPU que trabaja a una frecuencia base de 2,6 GHz y de 4,5 GHz en modo turbo boost. Esta es una CPU de 9ª generación Coffee Lake que cuenta con 6 núcleos y 12 hilos de procesamiento bajo un TDP de tan solo 45W junto una memoria caché L3 de 12 MB. En este caso la frecuencia máxima a la que ha rendido es de 3,8 GHz bajo estrés y con el modo overclocking máximo de PredatorSense activado debido a la refrigeración, que se queda un poco corta.
Continuamos con la tarjeta gráfica, que en este caso es la Nvidia GTX 1650 Max-Q, una nueva versión para portátiles de la Turing más discreta de todas que viene a sustituir la GTX 1050 Ti. Este chipset cuenta con 1024 Núcleos CUDA trabajando a una frecuencia entre 1395 MHz como base y de 1560 MHz a máximo rendimiento. Su memoria gráfica se compone de 4 GB GDDR5 Micron trabajando a 8 Gbps en un bus de 128 bit a 128 GB/s. Todo esto nos entrega un rendimiento de 32 ROPs y 64 TMUs con un TDP de tan solo 50W como máximo.
Como plataforma tenemos una placa base con el chipset Intel HM370 como cabía esperar, el cual se utiliza en la totalidad de casos para procesadores Intel de 9ª generación. Junto a este, se dispone de dos ranuras SO-DIMM que en este caso solamente una de ellas estará ocupada con un módulo de 16 GB DDR4 a 2666 MHz de Kingston y con chips Micron. La capacidad máxima es de 32 GB si compramos otro módulo aparte, pero es una pequeña desventaja no poder utilizar Dual Channel de serie que nos daría un extra de rendimiento en juegos. Y lo cierto es que en este sentido, sería mejor una configuración de 2×8 GB, por el hardware gráfico que tenemos.
Finalmente la configuración de almacenamiento del Acer Predator Triton 300 consiste en una unidad SSD M.2 NVMe PCIe 3.0 x4 Western Digital PCSN720 de 512 GB de almacenamiento. Estamos contentos de ver una unidad de gran rendimiento como lo es esta, ya que se situará en valores cercanos a 3500 MB/s en lectura secuencial y por encima de los 2000 MB/s en escritura con sus chips de memoria TLC. Junto a esta ranura tenemos otra M.2 de también PCIe x4 que además nos permitirá montar configuraciones en RAID 0 con un segundo SSD. Al ser un portátil relativamente grueso, tenemos espacio disponible para una unidad de 2,5” mecánica o solida bajo interfaz SATA.
El sistema de refrigeración elegido para este Acer Predator Triton 300 se queda un poco justo si deseamos obtener la máxima potencia del hardware, concretamente de la CPU. Nos encontramos en este caso con una configuración de doble ventilador agrupada y situada solamente a un lado del equipo, por lo que solamente tenemos dos salidas para el aire caliente. En este caso hubiéramos preferido uno a cada lado y 4 salidas, ya que espacio hay para ello.
Para capturar el calor de los chips se han utilizado dos cold plates de cobre junto a 3 heatpipes también de cobre instalados en serie sobre los dos chips. Esto significa que el calor generado por la CPU (chip más a la derecha) viajará por el tubo y pasará por la GPU (chip más a la izquierda) concentrándose bastante calor en la zona. Finalmente un largo bloque de aletas muy densas recoge todo el calor para evacuarlo a través de aire hacia el exterior.
El sistema funciona suficientemente bien cuando activamos el modo turbo de los ventiladores, que elevarán las RPM hasta los 6000 en ambas turbinas. Pero en mod normal no podremos evitar tener algo de throttling en la CPU, descendiendo la frecuencia hasta los 2,5-3,0 GHz.
Y finalizamos este análisis de características con la batería y autonomía del Acer Predator Triton 300. En esta ocasión se ha instalado una de Litio-Polímero que nos ofrece una potencia de 57,28 Wh y una capacidad de 3720 mAh. Para la alimentación externa tenemos en este caso un adaptador que ofrece 135W de potencia, más que suficiente para el conjunto CPU + GPU por ser en este caso una 1650.
Con un perfil de energía equilibrado y haciendo las típicas tareas de prueba como son el navegar, ver contenido multimedia en Internet y editar en Word hemos alcanzado aproximadamente las 4 horas y 20 minutos con un ciclo de carga completo, la pantalla a un brillo del 50% y el teclado con la iluminación activada. No está nada mal para ser un equipo gaming, por lo que nos va a permitir utilizarlo para estudiar en clase además de para jugar.
Dejamos atrás la descripción para pasar a la parte práctica, en donde veremos el rendimiento que nos ofrece este Acer Predator Triton 300 en benchmarks y juegos.
Todas las pruebas a las que hemos sometido este portátil se han llevado a cabo con el equipo enchufado a la corriente y el perfil de energía a máximo rendimiento. En caso del sistema de refrigeración lo hemos mantenido en configuración automática.
Comencemos por el benchmark de la unidad SSD Western Digital, para ello hemos utilizado CristalDiskMark en su versión 6.0.2.
Esta unidad nos ofrecerá un fantástico rendimiento tal y como hemos adelantado en el apartado de hardware, de hecho estamos superando los 2500 MB/s en escritura secuencial y casi llegando a los 3500 MB/s en lectura. Esto se traducirá en mejores tiempos de carga en juegos y mayor velocidad de inicio en los programas.
Veamos a continuación el bloque de test sintéticos. Para ello hemos utilizado los siguientes programas:
Al contar con una tarjeta gráfica de gama media, tenemos unos resultados algo más discretos que los potentes modelos de las gráficas, pero no deja de ser un desempeño bastante bueno para juegos de la actual generación.
Respecto a las puntuaciones de la CPU, son relativamente bajas, ya que debería de estar en torno a los 1200 puntos en Cinebench R15 y por encima de los 2500 puntos en R20. Esto se debe a que las frecuencias de funcionamiento no están llegado a su máximo, debido posiblemente a su configuración de BIOS y en parte también a las temperaturas, aunque con ventiladores en modo turbo hemos obtenido exactamente los mismos resultados.
Para establecer un rendimiento real de este Acer Predator Triton 300, hemos probado un total de 7 títulos con gráficos bastante existentes, los cuales son los siguientes, y con la siguiente configuración:
El proceso de estrés al que ha sido sometido el Acer Predator Triton 300 ha durado alrededor de 60 minutos, para así tener una media fiable de las temperaturas. Dicho proceso se ha llevado a cabo con Furmark, Prime95 en modo large y la captura de temperaturas con HWiNFO.
| Acer Predator Triton 300 | Reposo | Máx. rendimiento | Max rendimiento + ventiladores modo turbo |
| CPU | 43ºC | 92ºC | 84ºC |
| GPU | 37ºC | 69 ºC | 61ºC |
En este caso hemos querido diferenciar entre las temperaturas obtenidos con el sistema de refrigeración en modo automático y el perfil turbo a máximo rendimiento. En el primer caso obtendremos throttling en determinados núcleos incluso a una frecuencia por debajo de los 3,5 GHz, mientras que en el otro caso sí que es suficiente como para paliar este efecto, al menos en esta unidad. En consecuencia, pues obtendremos un sistema bastante ruidoso, con ventiladores que alcanzan las 6000 RPM, siendo este el motivo de diferenciar entre ambos modos.
Llegamos ya al final de otro análisis en el que tenemos un Acer Predator Triton 300 que nos ha dejado muy buenas sensaciones, ya que por algo más de 1000 euros tenemos un hardware bastante interesante y un diseño de muy buena calidad, en aluminio y que nos da una sensación de dureza bastante alta.
No es un diseño Max-Q ni tampoco el más compacto del mercado, pero esto nos da espacio suficiente para poder instalar unidades de almacenamiento mecánicas. Sí que nos hubiera gustado una refrigeración diferente, con los dos ventiladores separados y 4 conductos para aprovechar al máximo el espacio, ya que no es todo lo eficaz que nos gustaría.
De esta forma llegamos al rendimiento, el cual ha sido muy bueno en juegos con la GTX 1650, teniendo por ejemplo valores superiores a los 50 FPS en juegos como DOOM, Tomb Raider o Final Fantasy en calidad alta, que es muy bueno. También los tiempos de carga son excelentes con el SSD Western Digital, aunque una configuración de 16 GB de RAM en Dual Channel creemos que hubiera sido gran opción aquí.
Además estos 6C/12T serán un buen aliado para grandes cargas de procesamiento además de juegos, siendo uno de los portátiles gaming más ajustados en precio con este i7-9750H. Si bien es cierto que la configuración de fábrica no permite llegar al máximo de capacidad de la CPU, quedándose un poco por debajo de rivales directos.
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Respecto a la pantalla tenemos un panel de 144 Hz y 3 ms que ha rendido a la muy bien y con excelentes prestaciones para gaming, aunque si hemos visto un muy ligero ghosting solo en la prueba de testufo. Un panel que ciertamente utilizan otros fabricantes en sus portátiles y que es muy muy similar a estos, con calibración no óptima aunque suficiente para gaming.
Tanto teclado como touchpad nos han gustado mucho. En el primer caso tenemos unas teclas bastante amplias con un tacto de membrana genial y muy cómodo para escribir y jugar, con iluminación RGB configurable en 4 zonas. En el segundo, un touchpad muy bien instalado y amplio, y que a pesar de no tener botones independientes ofrece buen clic y nada de holgura.
Estas son los puntos más reseñables del Acer Predator Triton 300, el cual estará disponible en el mercado por un precio de unos 1300 euros, imaginamos que no a mucho tardar en nuestro país. Por ahora solo esta disponible fuera de nuestras fronteras y con teclado sin “ñ”, pero es buena opción si queremos un portátil con buena autonomía y sin renunciar a un hardware potente.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| + BUEN RENDIMIENTO EN GAMING +50 FPS EN ALTO | – REFRIGERACIÓN ALGO CORTA |
| + PANTALLA DE 144 HZ IPS | – CPU CON MARGEN DE MEJORA EN RENDIMIENTO |
| + CONSTRUCCIÓN EN ALUMINIO BASTANTE RESISTENTE | – CALIBRACIÓN DE PANTALLA MEJORABLE |
| + SSD ELEGIDO Y POSIBILIDAD DE AMPLIAR EN 2,5” Y RAID 0 | |
| + EXCELENTE TECLADO Y TOUCHPAD | |
| + AUTONOMÍA BUENA |
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