Aquí vamos a hablarte de Intel Turbo Boost, o más bien de su segunda versión. Esta es otra de las tecnologías que podemos encontrar entre las que conglomera una CPU y nos ayuda con las tareas de overclocking.
Índice de contenidos
¿Qué es Intel Turbo Boost?
Intel Turbo Boost es una tecnología de overclocking nativa de muchos procesadores Intel y fue creada en 2008. Más tarde, en 2011, veríamos su segunda iteración, la cual sigue estando operativa a día de hoy.
Es posible que no sepas nada de overclocking, pero no te asustes, ya que realmente no tendrás que hacer mucho. El tema hace más referencia a las CPUs actuales y su forma de repartir el trabajo.
Mientras estás en el escritorio, abres archivos, ves vídeos y otras tareas simples, el procesador apenas necesita potencia. En función a la carga de trabajo pedida, las frecuencias suben y bajan, pero siempre dentro de un umbral de seguridad.
Con esta técnica, permitimos que todos los núcleos alcancen números bastante más altos, pero normalmente por un breve periodo de tiempo. Esto nos permite resolver cálculos más ágilmente, lo que equivale a un rendimiento más eficiente y una experiencia de usuario más agradable.
Esto se diferencia ligeramente de las frecuencias boost, puesto que estas segundas solo se aplican solo sobre uno o dos núcleos.
Sin embargo, esta tecnología no es perfecta y cuanto más estable sea, mejor.
Por ejemplo, recientemente hemos vivido el caso de los problemas de frecuencias de AMD, ya que muchos procesadores no alcanzaban los números prometidos. Pese a usar las herramientas que la misma empresa nos ofrecía (como PB2 o PBO) no podíamos subir más, por lo que la marca se vio obligada a arreglar el microcódigo.
¿A quién repercute ITB?
Como te imaginarás, Intel Turbo Boost afecta principalmente al procesador, pero como quizás sabrás, las CPUs Intel suelen llevar gráfica integrada. Por esto, no solo el chip principal aumenta el rendimiento, sino que también lo hace la pequeña gráfica que monta.
Gracias a la segunda versión de este software, la detección y algoritmos fueron optimizados, por lo que conseguimos exprimir aún más potencia.
No obstante, Intel menciona que es posible que en tareas concretas no se consigan las frecuencias esperadas, puesto que depende mucho de:
- El tipo de carga de trabajo
- La cantidad de núcleos activos
- El consumo de corriente estimada
- El consumo energético estimado
- La temperatura e integridad del procesador
En el caso de que se cumplan ciertas condiciones, podremos detectar cómo el componente aumenta drásticamente en potencia. De hecho, es de recalcar que esta tecnología permite a la CPU superar su TDP, así que no te asustes si ves que gasta un 50% o más de vatios.
Eso sí, todo este proceso se realiza siempre bajo los estándares de seguridad más altos.
Si en cualquier momento el procesador supera su límite de potencia, temperatura o corriente, este se desactiva automáticamente para evitar daños internos.
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Aquí es donde entraría la comunidad de overclockers, donde usuarios amateurs y expertos tratan de superar los límites recomendados por las empresas. Con más o menos éxito y mejores o peores técnicas, los usuarios intentan alcanzar frecuencias cada vez más altas, algo que lejos de ser un simple hobby ayuda a evolucionar a la industria.
Apartados técnicos
Hay diversas cosas que seguramente te interesen a la hora de hablar de Intel Turbo Boost 2.0.
Por ejemplo, este software o herramienta no ha de ser instalada, sino que viene de fábrica con los procesadores. Sin embargo, solamente la tendrás si tienes una CPU de la línea Intel Core i5, Core i7 o Core X, por lo que la gama de entrada pierde casi en su totalidad este soporte.
Por suerte, no importa sobre qué plataforma nos encontremos, puesto que es una tecnología aplicada sobre el hardware. Estés en una distribución de Linux o en una partición con MacOS, Intel Turbo Boost 2.0 estará activo.
Asimismo, es de destacar que podemos desactivar Intel Turbo Boost en una opción dentro de la BIOS. No obstante, no te recomendamos hacer esto a no ser que quieras hacer alguna actividad concreta como underclocking y con conocimiento sobre el tema.
En el apartado negativo de las cosas, es de destacar que esta tecnología apenas es configurable. No podremos ni ajustarlo por núcleo, ni establecer un máximo determinado, ni otras características que podrían ser más interesantes.
Por último, si quieres saber si el programa funciona con normalidad, puedes visitar este artículo hecho por la misma Intel donde recomiendan distintos softwares de apoyo. Por otro lado, si quieres ver al programa en acción, puedes descargate el monitor de tecnología Intel Turbo Boost.
Pese a tener el mismo nombre, esta aplicación no es el software que te hemos explicado. Este programa solo nos permite ver las frecuencias conseguidas y la mejora producida por el software, es decir, es un programa de monitoreo.
Últimas palabras sobre Intel Turbo Boost 2.0
Esta clase de tecnologías son las que enriquecen la jungla binaria en la que estamos. Nos permiten alcanzar un mayor rendimiento, está activada de serie y mejoran la experiencia de usuario.
Además, como detalle, existe ya un Intel Turbo Boost Max Technology 3.0, pero tal como dice Intel, no es una versión nueva y mejorada. Más bien es como una tecnología complementaria que mejora aún más el funcionamiento de su predecesor.
Al final del día, estos pequeños cambios repercuten al funcionamiento global del componente y de tu equipo, pero también cabe destacar que AMD también tiene algo parecido. Por ello, creemos que pese a ser algo bueno, Intel necesitaría poner una apuesta mayor en la parrilla.
Lo más cercano a esto que podemos encontrar son los próximos procesadores Intel de 10ª Generación.
Las gráficas integradas Iris Plus (solo en algunos procesadores) parece que rendirán bastante mejor que las Intel HD Graphics actuales. Esta clase de mejoras hacen que una empresa destaque sobre su competencia y es lo que estimula en última instancia el mercado de la tecnología.
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Por nuestro lado, creemos que eso es todo lo relevante a contar sobre este estándar de Intel. Si tienes cualquier duda, te recomendamos acceder directamente a la página oficial de Intel. Allí te podrán solventar cualquier problema o intriga que tengas con esta tecnología.
Esperamos que hayas aprendido algo nuevo hoy y que no te haya costado entender nada. Pero ahora escríbenos tú: ¿Qué tecnología crees que deberían estar incluidas en las CPUs? ¿Quién crees que lo hace mejor entre Intel y AMD? Comparte tus ideas en la caja de comentarios.
