Hoy tenemos con nosotros el Smartphone Gaming Red Magic 3S, el terminal más hardcore de Nubia para los entusiastas del gaming mobile con unas prestaciones que sin duda te sorprenderán. Además de un potente hardware, el fabricante de las ha ingeniado para meter un sistema de ventilador sobre la CPU que marcará las diferencias en la estabilidad de FPS con juegos muy potentes.
No es todo, porque tenemos un doble gatillo táctil en el lateral, que para juegos compatibles como PUBG, nos vendrán de perlas para ampliar la versatilidad y mejorar el control. Nosotros hemos probado la versión más potente con Snapdragon 855+, 12 GB de RAM y 256 GB UFS 3.0 de almacenamiento. ¿Será cierto que está al nivel del ROG Phone 2 de Asus?
El Red Magic 3S nos ha llegado en una caja de cartón rígido típica como todas las usadas para smartphone, aunque en este caso es cuadrada y de poca altura. Es una opción no demasiado habitual actualmente, ya que predominan las cajas súper ajustadas a las medidas del terminal.
En todo caso, el sistema de apertura es igual, por deslizamiento, y en el interior nos encontramos con un molde que divide el bundle en dos apartados, uno para el terminal y el otro para el resto de accesorios. El móvil viene solo con un plástico protector, mientras que los accesorios están dentro de pequeñas cajitas.
Así que en total tenemos los siguientes elementos:
Llama la atención que no trae ningún tipo de funda para el móvil. De hecho, la documentación viene en una caja de cartón con el tamaño idóneo y grosor para meter la hipotética funda. Pero bueno, tampoco es el fin del mundo, así podremos lucirlo como se merece.
Si algo destaca a simple vista, es el agresivo diseño que tienen el Red Magic 3S. Diríamos que incluso llama más la atención que terminales gaming como el ROG Phone II e incluso el Black Shark 2, cuyas terminaciones son similares. Y es que para este móvil se ha utilizado una cubierta de aluminio que ocupa toda la zona trasera y laterales, con las correspondientes separaciones de goma en la zona superior e inferior para eliminar el efecto jaula a la cobertura.
El terminal es grande, muy grande, con una pantalla de 6,65 pulgadas que además no tiene notch, ni tampoco los bordes son las más ajustados que hemos visto. Por esto, las medidas ascienden a 78,5 mm de anchura, 171,7 mm de altura y 9,76 mm de grosor, sumando un peso de 215 gramos sin funda alguna. Aun así, sigue manteniendo el formato 19,5:9 en lugar de subir a los 21:9 que sería una gran opción para gaming. La pantalla no especifica certificación Gorilla Glass, aunque tiene protección contra rayones.
La parte de la pantalla registra unos bordes curvados 2.5D bastante prominentes, junto a dos largas aberturas en las zonas superior e inferior para dejar salir el contundente sistema de sonido de doble altavoz con tecnología DTS-X 3D. En ausencia del notch tenemos solamente una cámara selfie de 16 MP escorada hacia la izquierda, algo que no favorece la estética.
Respecto a los acabados en general, son muy buenos, destacando la calidad de la carcasa de aluminio que en el modelo que probamos viene con un llamativo degradado en azul y rojo brillante. También está disponible en colores rojo, negro y un gris muy elegante llamado silver storm. Cuenta con certificación IP55, es decir, protección contra el polvo y chorros de agua, pero nada de inmersión en este terminal.
Antes de comenzar a ver los laterales, merece mucho la pena pararnos en ver la zona trasera del Red Magic 3S con más detalle. Ésta no es completamente plana, sino que su zona central está ligeramente más salida, de ahí el grosor que registra. En esta zona central, tenemos una banda de iluminación RGB que se activará mientras estamos jugando y que podremos personalizar desde una aplicación que viene instalada por defecto. De igual forma tenemos el logotipo inferior que también se ilumina y unos detalles en las esquinas meramente decorativos. Esta zona tiene una ligera rugosidad que nos permite agarrar el móvil muy cómodamente y con mucha seguridad al no ser resbaladiza.
Lo que más nos interesa de cara a la usabilidad está en la parte superior. Comenzamos por un sensor de huella dactilar con un diseño cuanto menos original mediante un hexágono. Justo encima tenemos lo que viene siendo la toma de aire del ventilador de la CPU protegido por una rejilla anti polvo. A pesar de la certificación IP55, yo no tiraría agua en este lugar… Y finalmente nos encontramos con un único sensor como cámara principal de 48 MP junto a un flash LED bastante normalito.
Tras analizar el aspecto exterior tan peculiar, vamos a centrarnos en los laterales, los cuales vienen con muchas novedades orientadas a gaming, con algunas que os sorprenderán.
La zona superior e inferior del Red Magic 3S serán las más normales y genéricas con respecto a otros terminales. Por la zona inferior nos encontramos con el conector USB Type-C para datos y carga. Además, tenemos una abertura para sonido y el correspondiente micrófono. También se dejan ver los tornillos que sujetan esta carcasa metálica al terminal.
La zona superior solamente deja ver el puerto Jack de 3,5 mm para auriculares, el cual no podría faltar en un Smartphone gaming como éste. El micrófono de cancelación de ruido no está en esta zona, sino en la parte trasera en una esquinita muy discreto.
Continuamos con la parte lateral derecha, en donde tenemos una de las grandes novedades en forma de gatillos táctiles a cada lado. Ojo, no tienen recorrido alguno, sino que su accionamiento es puramente táctil. Ésta ha sido una gran decisión por parte de Nubia, ya que en juegos compatibles como PUBG o Asphalt, podremos configurarlos desde el propio juego para que cumplan una determinada función, dándonos muchísima mejor manejabilidad al estilo PSP en sus tiempos o Nintendo switch.
Las novedades no paran aquí, porque si teníamos una entrada de aire, no podía falta la salida, que está justamente en este lateral en forma de rejilla. Os sorprenderá la cantidad de aire que se expulsa cuando el ventilador está en funcionamiento, aunque se debe decir que el sistema no es muy silencioso. Tan solo se activará en programas de benchmark o juegos, el resto del tiempo estará totalmente parado.
Por lo demás, pues tenemos los correspondientes botones de volumen y el botón de desbloqueo perfectamente ubicado para acceder a él sin mover la mano, de la posición de agarre. Muy buena distribución en general y correcto diseño.
Continuamos con la zona izquierda del Red Magic 3s, en la que se ha instalado un conector avanzado de 7 contactos para elementos de ampliación. Concretamente este elemento consiste en una base que debemos adquirir de forma independiente que nos aporta una salida para auriculares, puerto de carga para el terminal y también un puerto ethernet para conexión cableada. En ella, podemos conectar una pantalla externa a través de su USB-C, por lo que es una magnífica opción para gamers entusiastas.
En la zona superior se dispone de un botón o switch que nos permite activar la aplicación para juegos integrada. Es una función que prácticamente todos los smartphones gaming tienen, y en este no podría ser la excepción. Junto a él, se ha instalada la correspondiente bandeja extraíble para la doble SIM, que en este caso no admite ampliación de almacenamiento por MicroSD.
Ahora toca centrarnos en las características de la pantalla, y en esta ocasión tampoco decepciona el Red Magic 3S. Tenemos un panel con tecnología AMOLED de 6,65 pulgadas y una resolución FHD de 2340 x 1080p y por tanto, una densidad de píxeles no demasiado alta con 388 ppp, eso sí, manteniendo un formato de imagen 19.5:9. Por claro, es un móvil gaming, así que su frecuencia de refresco se eleva hasta los 90 Hz, justamente lo que podíamos pedir, y lo cierto es que esta pantalla es muy similar a la que instala el OnePlus 7 Pro.
Este panel nos ofrece un ratio de contraste de 100.000:1 con un brillo máximo de 430 nits, cobertura del 100% NTSC y soporte HDR10 como cabía esperar. Además, la frecuencia de refresco de la entrada táctil ha sido aumentada hasta los 240 Hz, con una latencia de 41,7 ms aproximadamente. Estos parámetros cobran relevancia en un smartphone de este tipo, ya que se trata de ganar velocidad de respuesta bajo cualquier circunstancia, y esta pantalla nos la da de sobra.
Le ratio de aprovechamiento del frontal queda relegado a un plano secundario con sólo el 80% al no tener notch, aunque pensamos que no es una prioridad en un terminal puramente enfocado en gaming. Al ser una pantalla bastante grande, la sensación que nos da de uso es muy buena, con una perfecta representación de colores y un brillo bastante digno, aunque no excepcional. Quizás un aumento a 600 nits le hubiera sentado de fábula, pero la increíble fluidez que nos da merece la pena experimentarla. Esperamos que pronto todos los terminales, al menos de gama alta, estandaricen estos 90 Hz en sus pantallas, porque sin duda es el presente y futuro.
Respecto a los sistemas de seguridad tenemos lo mínimo que podíamos pedir en el Red Magic 3S, es decir, reconocimiento facial y sensor de huella dactilar.
Extendiéndonos en el reconocimiento facial, tenemos uno propio de la marca en lugar del genérico de Android y éste funciona increíblemente rápido. El desbloqueo por este sistema es prácticamente instantáneo tras pulsar el botón de desbloqueo de la pantalla. Tan solo nos ha faltado una opción para aplicar el reconocimiento en distintas condiciones, por ejemplo, usando gafas, y otros complementos. El sistema de desbloqueo nos obliga siempre a pulsar el botón lateral, y no tenemos activación de la pantalla mediante el sensor de movimiento, como por ejemplo tienen los Realme u otros terminales.
En cuanto al sensor de huella, pese a su extraña forma, está perfectamente ubicado y funciona igual de rápido que el método anterior. Además, admite prácticamente cualquier posición del dedo mientras lo hayamos configurado con bastantes posiciones. En este caso tenemos el sistema propio de Android sin modificaciones del fabricante.
Un apartado sin duda sensacional y del cual no tenemos ningún tipo de queja salvo los pequeños detalles comentados.
Conocemos ya el sistema de audio que implementa el Red Magic 3S, por ser el mismo o parecido que el del LG G8 ThinQ, es decir el DTS-X 3D. Lo que sí cambia, y mucho es la disposición de los altavoces y las largas aberturas que tenemos a ambos laterales que nos permite tener una gran experiencia acústica. Esto se consigue gracias a dos altavoces funcionando en estéreo con capacidad para una salida 7.1, al menos eso es lo que indica el fabricante.
En cuanto al volumen máximo, pues no es demasiado alto, al menos no tanto como por ejemplo los Xiaomi o el Razer Phone, y en esto sí que se parece bastante al LG. Pero las grandes aberturas nos dejan escuchar un perfecto estero y sin ningún tipo de distorsión e incluso una buena presencia de graves para aprovecharlos en las explosiones y jugos de shutter.
Junto a éste, tenemos un completo sistema de vibración 4D que a efectos prácticos podría parecerse al sistema háptico del OnePlus. Se trata de varios motores repartidos por el terminar que nos proporcionarán una sensación de vibración por zonas en función de los eventos del juego, que se compenetrará perfectamente con el sistema de sonido para darnos la mejor sensación gaming. Y la verdad es que todo este pack de detalles se nota a la hora de jugar e independientemente de nuestra habilidad pura, tener un terminal orientado a gaming se nota mucho.
Y llegamos al apartado que todo gamer debe conocer, y es el de las especificaciones. Este Red Magic 3S no defrauda en ningún momento, especialmente el modelo de nuestro análisis que es endemoniadamente potente.
Este terminal tiene como núcleo central el potente procesador Qualcomm Snapdragon 855+ junto a una GPU Adreno 940. Esta CPU 855+ de 64 bits tiene 8 núcleos, 1 Kryo 485 a 2,96 GHz, 3 Kryo 485 a 2,4 GHz y 4 Kryo 485 a 1,8 GHz, con proceso de fabricación de 7 nm como es normal.
Pero claro, ya habréis caído en el detalle o la ventaja que nos da el fabricante implementado un sistema de refrigeración activa mediante ventilador que ciertamente va a marcar la diferencia. Y es que las temperaturas son muy buenas a pleno rendimiento. El precio a pagar es un ligero ruido cuando el sistema está funcionando, pero nada que el sonido del dispositivo pueda enmascarar.
Junto a este procesador tenemos disponibles distintas versiones de memoria RAM, todas ellas de tipo LPDDR4X trabajando a 2133 MHz. En nuestro caso tenemos la versión más potente con nada menos que 12 GB, pero también hay una versión más discreta de 8 GB. Con el almacenamiento pasa algo similar, ya que tenemos dos versiones asociadas a cada RAM, con 128 y 256 GB, siendo la de nuestro modelo la más potente. El sistema de almacenamiento usa la tecnología UFS 3.0, siendo el doble más rápida la 2.1 y la que tienen la mayoría de flagships del mercado. Finalmente indicar que no dispone de ampliación de almacenamiento mediante tarjetas SD, por lo que recomendamos adquirir la versión de 256 GB si pensamos instalar muchos juegos.
A continuación, os dejamos con la puntuación obtenida en AnTuTu Benchmark en su nueva versión 8, el software de benchmark por excelencia en los terminales Android y iOS. De igual forma os dejaremos los resultados obtenidos en el benchmark de 3DMark orientado a juegos y de GeekBench 5 que evalúa el rendimiento de la CPU en mono-core y multi-core.
Se trata sin duda de uno de los terminales mejor optimizados con esta configuración de hardware. Tan solo debemos apreciar la gran distancia que le saca al resto de terminales analizados por nosotros en 3DMark o a la enorme puntuación de AnTuTu. El inconveniente que hemos tenido es que al haberse actualizado el software de benchmark, ahora no podemos compararlo con anteriores dispositivos analizados por nosotros, como por ejemplo el Black Shark 2.
Una vez más, debemos estas notables mejoras no solo a la implementación del sistema operativo, sino a la refrigeración por aire instalada que permite tener mejores temperaturas en la CPU y GPU del terminal. La ventaja, es que este rendimiento no se alcanza en momento puntuales, sino que es sostenido durante mucho más tiempo tal y como hemos podido comprobar durante los días que hemos utilizado el terminal.
Evidentemente tenemos Android 9.0 Pie corriendo sobre el Red Magic 3S junto a la capa de personalización RedMagic 2.0 que no podemos evitar decir que es demasiado intrusiva en la configuración de aspecto y distribución de opciones de configuración. No dudamos que esté mal implementada, al contrario, las puntuaciones demuestran lo liviana que es al no contar apenas con aplicaciones propias del fabricante, al solo efecto de la ayuda y la aplicación de la iluminación. Pero el aspecto es bastante anticuado y básico, con un fondo blanco e iconos bastante poco actuales para los tiempos que corren.
La interacción sí es correcta, muy fluida y simple, y esos 90 Hz le sientan genial al dispositivo. Tenemos a una gestión similar a la del resto de terminales, aunque hemos notado que la traducción en español no está bien llevada a cabo, aún quedan muchas opciones en inglés y algunos elementos algo desordenados. Una certificación con Android One hubiera sido lo mejor sin lugar a dudas.
En cuanto a aplicaciones propias, pues destacamos el modo Game Space del que ahora hablaremos, la aplicación para controlar la iluminación y poco más. Podemos modificar algunos parámetros de la pantalla, así como los sistemas de autenticación. El modo de visualización del consumo de batería es algo tosco y no aporta muchos detalles del uso, solo las horas de pantalla. Es interesante el contar con un modo de grabación de la pantalla, tal y como hace Oxygen OS, que será muy útil para los creadores de contenido.
No podría faltar en un móvil gaming como este Red Magic 3S el modo juego, que en este caso se llama Game Space 2.0. Lo podremos activar en cualquier momento con el botón colocado en el lateral izquierdo.
Dentro de este modo, podemos visualizar todos los juegos que tenemos instalados mediante un carrusel de aplicaciones con una imagen en grande del mismo. O bien podemos optar por una presentación clásica con bloques si la elegimos con el botón superior. Con dos opciones en la parte inferior izquierda, podemos activar o desactivar la iluminación y el ventilador de la CPU.
Tampoco falta el panel de instalación para el gadget Red Magic Handle, el bloque de notificaciones y llamadas y el apartado Personal Center. Desde él, es posible configurar más opciones de la refrigeración, del modo grabación de pantalla y de la tira LED. Este modo de grabación nos permite grabar en calidad SD y HD, aunque no especifica la resolución concreta. Finalmente tenemos un menú de opciones flotante que aparecerá si arrastramos el dedo desde el bode derecho. En él, tenemos un resumen de todas las opciones anteriores y la posibilidad de activar un D-Pad en pantalla.
Es un modo necesario y muy completo que podemos actuar dentro del propio juego, por ejemplo, para configurar los gatillos táctiles de la parte superior del terminal. Uno de los más completos que hemos probado, con una implementación perfecta y muy intuitiva. Lástima que no esté en español, lo cual será un pequeño inconveniente para muchos.
Llegamos al apartado de las cámaras, uno que en este Red Magic 3S no va a tener demasiado protagonismo ni que tampoco va a satisfacer a usuarios entusiastas de la fotografía. Ya sabemos para lo que es este móvil, y no precisamente para hacer fotos.
En cualquier caso, se ha instalado un muy buen sensor trasero como es el Sony IMX586 Exmor RS. Este es de 48 Mpx con apertura focal 1.7 y lente de tipo CMOS con 0,800 µm. Queda claro que si algo nos va a dar este único sensor es detalle en las fotografías, en eso no hay discusión, pero por lo demás va a tener un desempeño bastante discreto por cual de una muy mejorable aplicación de cámara.
Esta cámara no incluye modo retrato, por lo que el comienzo no es esperanzador. Así que el desenfoque en el fondo lo tendremos que buscar nosotros solitos con una pizca de suerte y habilidad. Sí que dispone de modo HDR automático o manual, al igual que modo profesional para retocar las características del disparo. No es una cámara demasiado ágil en general, salvo que tengamos unas condiciones de luz buenas. También contamos con dos elementos de enfoque que se pueden separar para adaptar mejor la imagen que deseamos. Donde más destaca este sensor es en tener un buen balance de blancos con buena iluminación una representación de colores muy fiel y el gran nivel de detalle.
La versatilidad es bastante escasa, solo con zoom digital y sin modo retrato ni gran angular. Sí tenemos modo noche, aunque éste más bien lo que hace es sobreexponer la iluminación para conseguir una imagen más clara. El tratamiento de la luz de noche no es la mejor y no mejora si lo que pretendemos es conseguir una imagen bien enfocada.
La aplicación propia cuenta con un Modo Familia con efectos curiosos para las fotos, como la posibilidad de hacer una multi exposición, imágenes clonada superponiendo fotos, cámara lenta o el popular modo time lapse, junto a otras varias que tampoco son demasiado útiles a mi modo de ver. Toda la aplicación está en perfecto inglés, así que se requieren ciertos conocimientos de idioma por parte del usuario. Dispone de un modo profesional para retocar parámetros detallados de la imagen.
Respecto a la grabación de vídeo, no es un sensor que esté estabilizado, por lo que nuestro pulso será el que determine la calidad en sí misma. Al dispone de Adreno 940, ofrece la posibilidad de grabar vídeo en 4K@60 FPS e incluso un modo experimental en 8K, algo que no ofrecen muchos terminales en el mercado. De igual forma, tenemos la capacidad de grabar en cámara lenta a 1920 fps, lo cual es una sobrada por parte de la marca en este aspecto.
En la zona delantera tenemos un sensor de 16 Mpx con apertura focal 2.0 y también sin estabilización. El desempeño de este sensor lo podemos considerar normal, con unos selfis bien detallados, aunque por supuesto sin la posibilidad del modo retrato.
Una vez más, no está a la altura de un flagship, además tiende a sobreexponer el color de las imágenes tomadas cuando la iluminación es baja. No hay mucho más que decir, es capaz de grabar a resolución 1080p y 60 FPS.
Como todo esto, el apartado de fotografía nos deja una sensación agridulce. Conocemos la potencia bruta de estos sensores, por lo que su mayor limitación está precisamente en el software que la cámara usa. Ya sabemos que los Pixel 3 hacen maravillas con un solo sensor de 12 Mpx, por lo que no es no es esa una limitación. Además, hemos probado GCam, la aplicación de Google, pero la compatibilidad es bastante baja, sin posibilidad de grabar vídeo o activar el modo noche.
Os dejamos con una serie de fotos de estos sensores
De nuevo, siendo un terminal gaming, Nubia ha puesto toda la carne en el asador con el Red Magic 3S para incorporar una batería de 5000 mAh. Esta, dispone de carga rápida de 27W, aunque el cargador disponible en la compra es de solo 18W. No está mal, pero como siempre, los fabricantes no dan todas sus cartas. Por otro lado, perdemos la capacidad de carga inalámbrica.
Pues bien, esta batería con este hardware en concreto nos ha dado una autonomía de algo más de dos días en la mayoría de pruebas.
En todo caso, la autonomía es espectacular, lo que demuestra que el hardware y el sistema son muy eficientes en el uso de ella. Todo dependerá en gran medida del juego usado, y del brillo de la pantalla. Además, si desactivamos el ventilador ganaremos un poco de autonomía extra.
Respecto a la conectividad tenemos más o menos lo esperado, con la notable ausencia del NFC, que en un terminal de estas características de gama alta creemos que sería necesario. En todo caso, tenemos Dual SIM y Wi-Fi compatible con 802.11 a/b/g/n/ac. De igual forma, tenemos sensores de geolocalización compatibles con A-GPS, GPU, Beidou y GLONASS, algo ya estándar.
Pues llegamos al final de este análisis del Red Magic 3S, y por ahora es el terminal gaming más potente que hemos probado con permiso de los nuevos IPhone 11 con su CPU Apple A13. La capacidad del Snapdragon 855+ se ha llevado al máximo para dar resultados propios de su versión plus, y esto se debe en gran parte al sistema de refrigeración por ventilador que la marca ha implementado. Uno que realmente ha funcionado de verdad, a diferencia de otros basados en agua.
A esto le sumamos la impecable elección de dos versiones con 8 y 12 GB de RAM junto a 128 y 256 GB de almacenamiento de tipo UFS 3.0, el más rápido disponible en la actualidad. Todo ello hace que tengamos una verdadera bestia para juegos. Además, su batería de 5000 mAh ofrece una autonomía en gaming de casi 7 horas de pantalla jugando y más de 15 h para uso normal, lo cual es sensacional.
Algo que le sienta de maravilla son los 90 Hz de refresco a una sobresaliente pantalla AMOLED FHD. No tenemos una superficie demasiado bien aprovechada, ya que no hay notch, pero sinceramente queda en un marco secundario para este móvil. Las prestaciones puertas se complementan con sus apartados multimedia , siendo estos excelentes, con una pantalla de calidad y un sonido con doble altavoz en estéreo bastante contundente, aunque sin llegar al nivel de los Razer Phone por ejemplo.
Te recomendamos la lectura de nuestra guía de los mejores Smartphone Gaming
Algo que también nos ha encantado es la velocidad de sus sistemas de desbloqueo, prácticamente instantáneos tanto el reconocimiento facial como el sensor de huellas. Por otro lado, la implementación del software Game Space 2.0 sobre Android 9.0 es todo un acierto. Algo que personalmente no me ha gustado es su capa de personalización, bastante intrusiva en el aspecto y con un diseño bastante anticuado. La traducción al español se ha quedado a medias en muchas opciones, y las aplicaciones propias están todas en inglés.
En cuanto a diseño exterior, también le ponemos un sobresaliente por su originalidad y su agresividad. Una carcasa de aluminio con colores muy atrevidos y diferentes, que además incluso RGB como buen gaming. Pero lo más interesante es el sistema de doble gatillo táctil en la parte superior, que mejora mucho el manejo del terminal en juegos.
El apartado de las cámaras queda relegado a un segundo o tercer escalón. La versatilidad es baja con un solo sensor trasero, y la aplicación de la cámara limita bastante un sensor Sony de 48 Mpx que con una buena implementación haría maravillas. En todo caso, las imágenes detalladas y la grabación 4K@60 FPS e incluso 8K la tenemos disponible.
Finalizamos con el apartado de precio, y aquí también tenemos agradables sorpresas, porque nos ofrece una excelente relación calidad/precio. La versión más potente 12/256 GB, la cual hemos analizado, la podremos obtener por $599, mientras que la 8/128 GB está a $479. Teniendo en cuando el rendimiento es una cifra espectacular.
VENTAJAS | INCONVENIENTES |
+ EL TERMINAL CON SNAPDRAGON 855 MÁS POTENTE PROBADO | – POCA VERSATILIDAD EN LAS CÁMARAS Y NO AL NIVEL EXIGIDO |
+ HARDWARE TOPE GAMA CON 12 GB RAM Y 256 GB UFS 3.0 | – TERMINAL BASTANTE GRANDE Y PESADO |
+ MUY BUENA PANTALLA DE 90 HZ | – CAPA DE PERSONALIZACIÓN MEJORABLE |
+ GATILLOS TÁCTILES EN LATERALES | – CARGADOR DE SERIE A 18W Y NO HAY NFC NI CARGA INALÁMBRICA |
+ REFRIGERACIÓN POR AIRE DE LA CPU | |
+ DISEÑO ORIGINAL Y AGRESIVO | |
+ APLICACIÓN MODO JUEGO COMPLETA | |
+ CALIDAD/PRECIO | |
+ MUY BUENA AUTONOMÍA CON 5000 MAH |
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