Si manejas un Sistema Operativo Windows, Mac u otro, te habrás topado alguna vez con los archivos .dat. Si quieres saber qué son y cómo tratar con ellos, aquí te vamos a dar una breve explicación. Nunca te viene mal aprender algo más y lo cierto es que te podrá ser realmente útil en alguna que otra instalación y/o proyecto que hagas.
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Lo cierto es que no podemos darte una respuesta clara al respecto, ya que suelen guardar datos de tipo genérico. Casos contrarios vemos cuando leemos .pdf (documento), .xls (hoja de cálculo) o .docx (archivo de texto editable de Microsoft Office).
El uso más común de los archivos .dat es el de dar soporte a los programas que los han creado, ya que almacenan datos para su posterior uso.
Normalmente, la información contenida suele estar en texto plano o en binario (normalmente no legible), aunque en algunos casos son datos íntegros como vídeo. Por ello, es más que evidente que no están pensados para ser editados y/o usados por los usuarios, sino que son un tipo de datos temporales.
Estos archivos existen tanto en equipos con Windows OS como en equipos MacOS, así que casi nadie está a salvo. En distribuciones Linux, por contraparte, es más raro ver estos archivos, ya que no suelen usar estos estándares.
Algo importante a tener en cuenta es que estos ficheros pueden ser usados con fines maliciosos.
Tanto como dato individuales como con ayuda de otros programas, hay algunos tipos de malware que usan datos de este tipo para sobrepasar la seguridad de algunos ordenadores.
Te recomendamos siempre que puedas conocer las fuentes de los archivos que quieres destripar, ya que puede que sea un deporte de riesgo. Aquí te dejamos con otro artículo donde hablan específicamente de malwares que usan archivos .dat, cómo funcionan y cómo tratarlos.
A continuación te hablaremos de cómo abrir archivos .dat y cosas importantes a saber sobre ellos.
Como te hemos indicado previamente, los archivos .dat normalmente almacenan datos genéricos, así que por suerte o por desgracia podemos acceder a ellos fácilmente.
Tanto en Windows como en MacOS podemos abrir un .dat simplemente usando un editor de texto.
El más típico que tenemos la mayoría de usuarios es bloc de notas, pero te recomendamos usar algunos programas más avanzados y completos como Notepad++. No obstante, no es el único método, ya que en ocasiones podremos abrir satisfactoriamente diferentes ficheros con aplicaciones para pdf’, por ejemplo.
En algunos casos más concretos, si el archivo contiene información base de un archivo de vídeo, podremos abrirlo con algún reproductor de vídeo como VCDGear.
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Sin embargo, en la mayoría de casos, (en Windows) verás un icono de un folio en blanco indicándote que no hay ningún programa programado para abrirlos.
Para solucionar esto, solamente tienes que intentar abrirlo, momento en el que te indicará diversos programas recomendados para terminar la acción. Podrás determinar si quieres abrir siempre los archivos .dat con el programa elegido o si lo haces solo esta vez.
Muchos de los textos que verás serán algo difíciles de leer y en muchos casos totalmente ilegibles. No obstante, puede que seas capaz de identificar el contenido de algunos archivos gracias a las palabras que contiene.
Por ejemplo, el siguiente texto podríamos deducir que este fichero ejecuta aplicaciones, asigna valores y demás, aunque no sepamos a cuál.
En MacOS el proceso es ligeramente distinto, pero tendrás que realizar lo mismo, es decir, abrir el archivo con un editor de texto común.
En el caso de Linux, puedes usar el comando ‘file .dat’, para saber qué tipo de datos contiene el fichero. Una vez determinado, usa cualquier programa que sea capaz de editar esa clase de datos como por ejemplo:
Tenemos una caso concreto de archivos .dat donde son usados con relativa normalidad.
En el caso de algunos servicios de correos electrónicos los correos son transformados de forma automática en formato .dat si se cumplen algunas condiciones. Por ejemplo, si el emisor usa Microsoft Outlook y el receptor no, a menudo recibiremos un fichero .dat que nos impedirá ver el contenido completo.
La solución más fácil es que el contacto te reenvíe el mensaje con otro formato (HTML) o desde otro servicio de mensajería.
Como te hemos mencionado varias veces en el artículo, no es recomendable abrir archivos .dat, más que nada porque no están pensado para ello. No obstante, si necesitas hacerlo por cualquier cosa, es bastante sencillo.
Te recomendamos ser precavido/a y no por el tema de malware, sino porque editar cualquier fichero de este tipo puede ser fatal para el programa que lo use. Si alguna aplicación usa cierto set de instrucciones para su funcionamiento y nosotros editamos estos valores, pues el resultado es claro.
Aunque existan un número infinito de otras extensiones, la .dat es una de las más usadas para datos genéricos. Antes quizás tenías un problema o una excusa para no explorar más tu sistema, pero ahora ya tienes una solución sencilla y ya preinstalada en tu PC.
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Respecto al artículo, esperamos que lo hayas entendido sin problemasy que hayas aprendido algo nuevo. Si tienes cualquier recomendación personal, no dudes en añadirla aquí abajo.
Pero ahora coméntanos tú: ¿alguna vez has necesitado abrir un archivo .dat? ¿Crees que habría alguna otra forma de organizar los ficheros? Comparte tus ideas en la caja de comentarios.
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