LG G8s ThinQ es la apuesta del fabricante coreano para estar de nuevo en gama alta de terminales Android. Y no lo hace simplemente con su diseño en cristal e IP68, sino por prestaciones. 6 GB de RAM y Snapdragon 855 es su tarjeta de bienvenida, implementando nada menos que 5 cámaras, dos de ellas delanteras para el nuevo sistema Air Motion que nos permite controlar determinadas funciones del dispositivo sin tocar la pantalla, además del desbloqueo Hand ID con su cámara Z.
¿Creéis que este terminal estará a la altura de sus competidores? Lo comprobaremos con este análisis en profundidad.
Agradecemos en primer lugar la confianza que LG deposita en notros al cedernos su terminal para este análisis
La presentación que ha utilizado LG para su flagship consiste en una caja de cartón rígido y macizo exactamente igual a la que tienen el 99% de los terminales disponibles. Es decir, una caja de calidad y en color gris grafito, muy ajustada a las dimensiones del LG G8s ThinQ y con apertura por deslizamiento, fórmula que nunca fracasa.
La abrimos, y encontramos todos los elementos apilados unos debajo de otros, por supuesto con el terminal como producto principal en primer lugar. Bajo este, tendremos la funda y aún más abajo el compartimento para el resto de accesorios. Todos ellos vienen metidos en pequeñas bolsas de plástico como debe ser.
De esta forma, el bundle nos viene con los siguientes elementos:
Pues vaya, por falta de cosas no va a ser, LG ha puesto empeño que darle al usuario todo lo necesario, incluyéndose unos auriculares in-hear un poco normalitos y con conector Jack.
Lo cierto es que el diseño del LG G8s ThinQ nos recuerda bastante a la anterior generación, el G7, siendo prácticamente igual con ligeras modificaciones. Como buen terminal de gama alta, se ha utilizado íntegramente cristal para su construcción, con una protección de Corning Gorilla Glass 5 para los acabados. El terminal solamente está disponible en Black Mirror, un acabado en gris grafito con prácticamente todo el cuerpo en forma de espejo.
De hecho, LG presume de la resistencia de su terminal gracias a haber superado múltiples pruebas de grado militar. Y no es todo, ya que presenta certificación IP68 con resistencia completa al polvo y la inmersión completa en el agua, siendo la máxima disponible.
Es un terminal bastante compacto, con unas medidas de 76,6 mm de ancho, 155,3 mm de alto y 8 mm de grosor cámara incluida, pesando tan solo 181 g. Pues bien, es un dispositivo bastante delgadito, y su panel de cámaras traseras sobresale bastante poco del plano principal, lo cual es una buena noticia. El bajo peso a pesar de tener cristal se debe en parte a su batería que en este caso es de 3550 mAh, un poco más pequeña a lo que estamos acostumbrados en terminales de este coste.
Sus bordes son todos redondeados de tipo 2,5D para esta pantalla de 6,21 pulgadas. El fabricante ha mantenido un enorme notch en la parte superior, poco habitual ya (excepto IPhone 11) pero que tiene una buena razón para ello. Y es que aquí se instalan dos cámaras, el sensor IR, sensor de proximidad y también la salida del altavoz superior. Una zona bastante repleta de elementos que se completa con unos marcos no demasiado aprovechados y que arrojan una superficie útil del 80,9%.
La zona trasera es prácticamente un espejo de cristal, con su panel de cámaras colocado de forma horizontal junto al flash LED. Llama la atención el haber mantenido esta configuración algo más tradicional, aunque es una táctica de diferenciación respecto a la competencia, evitando las repetidas configuraciones verticales o las “vitrocerámicas” de los IPhone. Justo debajo, tenemos el sensor de huellas, muy bien ubicado y perfectamente accesible para el dedo índice de la mano.
Ahora vamos a ver todos los laterales del LG G8s ThinQ, porque tenemos unas cuantas cosas que decir al respecto.
Empezamos por la parte inferior, en la que encontramos la salida para el altavoz inferior, el puerto USB Type-C para datos y carga, y también un interesante Jack de 3,5 mm que se mantiene también en el flagship de LG. La parte superior no tiene nada especial, solamente el micrófono de cancelación de ruido.
En la parte lateral izquierda nos encontramos con los dos botones para subir y bajar el volumen y un tercer botón para el asistente de voz. Un botón no demasiado útil a menos que tuviera la capacidad de configurarse desde el propio sistema.
Y llegamos a la zona derecha, en donde tenemos inexplicablemente intercambiados los lugares de la bandeja para la doble SIM o Micro-SD y el botón de encendido/desbloqueo. Este botón está muy mal situado, a nuestra mano literalmente no se llega a él sin perder el contacto con el sensor de huellas. En mi caso he optado directamente por no usarlo, y encender la pantalla con el doble toque tradicional de LG. Diferenciarse de la competencia está bien, pero esta opción complica un poco la vida al usuario que quiera usar el móvil a una mano.
El diseño en general nos ha gustado bastante, por su elegancia y sobriedad, si utilizar colores llamativos el terminal se deja notar. La sensación en mano es bastante buena, aunque el cristal resbala un poco y se ensucia con solo mirarlo, aunque esto pasa con todos. Se incluye una carcasa de silicona transparente bastante gruesa, lo cual es positivo, aunque nos dure un par de meses a lo sumo.
La pantalla del LG G8s ThinQ sí que está al nivel de los mejores, tanto en calidad de imagen como brillo y resolución. LG ha utilizado un panel de 6,21 pulgadas con tecnología G-OLED FullVision fabricada por ellos mismos. La resolución que tenemos es FHD+ a 2248 x 1080p, que nos da una densidad de 402 ppp y un curioso formato de imagen de 18.7:9.
En ella destaca un potente brillo que se sitúa en unos 600 nits al máximo, con un contraste de 1.000:1 y soportando HDR10. Además, se asegura un espacio de color bastante amplio, con el 100% en NTSC y tiene protección Gorilla Glass 5. La experiencia no nos ha dejado dudas de la calidad del panel, digno de un gama alta como ya hemos comentado y una excelente calidad en los colores y en la resolución.
Si no estamos totalmente satisfechos con su configuración, en el apartado de “pantalla” podremos modificar algunos parámetros de la misma. Un recurso que sigue usando LG es el de la función Alway-On Display, mostrando la hora mientras permanece bloqueado siempre que no utilicemos la opción de ahorro de batería. De igual forma, tenemos multi touch capacitivo de 10 puntos y el desbloqueo/bloqueo con dos toques.
Lo único que nos recuerda a la generación anterior es ese enorme notch, entendemos que todo el frontal está saturado de sensores, pero un quizás se podrían haber optimizado un poco más los marcos en este sentido. Un 80,9% de superficie útil se queda algo pequeña frente a la competencia. Especialmente si nos referimos a terminales como el Mi 8 T Pro o el OnePlus 7 Pro que son un “todo pantalla” gracias a la cámara retráctil. Al menos tienen el consuelo de que el todo poderoso IPhone 11 presenta marcos y notch insultantemente grandes.
También en el sistema de sonido el LG G8s ThinQ tiene bastante que decir, con no uno, sino dos altavoces en los extremos superior e inferior y tecnología DTX-X 3D Surround haciendo uso de Meridian para la entrega de sonido. Este sistema que integra nos ofrece una muy buena calidad de audio, aprovechando el doble altavoz para reproducir en perfecto estéreo y a un volumen medio-alto sin distorsión. De hecho, la sensibilidad del altavoz inferior es de unos 103 dB
LG ha instalado también un DAC dedicado para el Jack de 3,5 mm que ofrece hasta 7.1 canales de audio, algo que no suele verse en este tipo de dispositivos. La situación del altavoz superior está algo movida hacia la derecha, no siendo demasiado cómo a la hora de realizar llamadas, aunque la salida de sonido se realizará sin mayores problemas.
¿Está al nivel de los terminales gaming? Pues ciertamente no, el Razer Phone o Asus Rog Phone 2 son intocables aquí, ya que en graves y volumen máximo no es precisamente un portento. Pero sí que se aprecia una notable mejora respecto a las configuraciones de un solo altavoz, buen trabajo de LG.
En este LG G8s ThinQ no tenemos dos, sino tres sistemas de autenticación biométrica que podremos utilizar de forma simultánea sin estorbarse cada uno de ellos.
El sistema que se estrena en este terminal, y que además es una de sus grandes novedades para este 2019 es el Hand ID. Se trata hacer un desbloqueo del teléfono mediante un escáner de las venas de nuestra mano. Esto se consigue gracias a la nueva Cámara Z con un sensor ToF o “Time of Flight” con focal 1.4, ubicado en el notch que registra todo detalle de nuestro mano y además admite control por gestos gracias a su capacidad de registrar en 3D con ayuda de un sensor IR.
Este sistema es una de las grandes apuestas de LG y la valoramos, ya que la velocidad del desbloqueo es muy similar a la detección de rostro. La única contra es que la tasa de éxito no es tan alta como los otros sistemas, ya que la colocación de la mano debe hacerse a una muy determinada distancia del sensor y no siempre acertamos en este aspecto. Además, con una luz directa y la sombra en la mano, también le cuesta bastante.
Los otros dos sistemas sí que están perfectamente implementados, el primero mediante un sensor de huella trasero perfectamente ubicado y muy rápido. Y el segundo la detección de rostro con una función propia de la marca que hace un escaneo 3D de nuestra cara. Este desbloque también es bastante rápido, aunque no TOP, y sí que detecta la cara en casi cualquier circunstancia, ya que permite añadir variantes de nuestro aspecto como el uso de gafas y otros accesorios. Esto es sumamente útil y muy acertado para superar la barrera de las gafas de sol de espejo, además lo hace con la pantalla apagada.
En este apartado tenemos más o menos lo que cabía esperar en un terminal que sin duda pertenece a la gama alta como es el LG G8s ThinQ. El conjunto es movido por el procesador Qualcomm Snapdragon 855 junto a una GPU Adreno 940, siendo la configuración más potente con permiso del 855+ y del impresionante Apple A13. Esta CPU de 64 bits tiene 8 núcleos, 1 Kryo 485 a 2,84 GHz, 3 Kryo 485 a 2,4 GHz y 4 Kryo 485 a 1,8 GHz, con proceso de fabricación de 7 nm como es normal.
Junto a él se ha instalado un total de 6 GB de memoria RAM LPDDR4X a 2133 MHz, una configuración quizás que llame la atención porque no tenemos una versión disponible con 8 GB, más normales en esta gama de precios. Respecto a la memoria interna, la única versión disponible cuenta con 128 GB de tipo UFS 2.1. Es la tecnología estándar en los terminales, aunque los flagship de la competencia ya están utilizando la tecnología 3.0, que dobla su rendimiento. Para lo que no tengan suficiente con 128 GB, tenemos capacidad de ampliación de memoria con Micro-SD de hasta 2 TB en la bandeja de la Dual SIM.
A continuación, os dejamos con la puntuación obtenida en AnTuTu Benchmark, el software de benchmark por excelencia en los terminales Android e iOS. De igual forma os dejaremos los resultados obtenidos en el benchmark de 3DMark orientado a juegos y de GeekBench 5 que evalúa el rendimiento de la CPU en mono-core y multi-core
La experiencia de rendimiento es la muy similar cualquier teléfono con este tipo de especificaciones, aunque quizás el almacenamiento y los 6 GB hagan bajar un poco las marcas. Una bestia en la fluidez y el uso diario y lo mismo ocurre con los juegos, ahí están los resultados para verificarlo. En este sentido no tenemos absolutamente ninguna queja, ya que el sistema está perfectamente implementado, así como su capa de personalización, muy fluida y que consumo muy pocos recursos.
El sistema operativo que se incluye de fábrica en el LG G8s ThinQ es Android 9.0 Pie junto a la capa de personalización LG UX. Esta capa personalmente la conozco bien desde la época del LG G3, y lo cierto es que en estética poco se ha actualizado, aunque sí en funciones. Es una capa bastante intrusiva, no en el sentido de tener aplicaciones, pero sí de modificar muchísimo la interfaz principal, la pantalla de inicio y las opciones de configuración.
No obstante, es una capa muy liviana, bastante rápida y bien adaptada, por lo que no vamos a tener problemas en el sentido del rendimiento general del dispositivo. En este caso el sistema de notificaciones está perfectamente implementado a pesar de ese enorme notch, no como ocurre en la capa de Xiaomi. Eso sí, solamente queda hueco para mostrar una sola notificación. El menú de opciones es bastante intuitivo y tiene su propio buscador, por lo que no será complicado acceder a lo que queremos.
Y otra de las principales novedades con las que se presentó este terminal LG G8s ThinQ es con el sistema Air Motion. Es una aplicación integrada en el sistema que nos permite realizar un control mediante gestos de nuestra mano sin ni siquiera tocar la pantalla, aunque no al nivel de “Minority Report”.
Para ello el terminal hará uso nuevamente de la cámara Z ToF y del sensor IR que integra en el notch, detectando la forma 3D de nuestra mano e identificando nuestra posición y gestos para transformarlos en funciones útiles. El sistema nos irá orientando perfectamente durante la configuración, por ejemplo, la forma en la que debemos colocar la mano y lo más molesto, la distancia a la cual identificará los gestos.
Y es que el rango de uso sí que estará un poco limitado a los 15-20 cm, con el tiempo nos acostumbraremos, pero debemos adaptar la posición de la mano a la orientación de la pantalla e inevitablemente mirar ésta y calcular nosotros la distancia adecuada. El proceso consistirá en colocar la mano frente a la pantalla lo mejor que podamos y tras ser detectada hacer el gesto que proceda. Las funciones serán las siguientes:
Cierto es que cuando nos detecta la mano del tirón es más rápido que por ejemplo Google Assistant, pero al final tendremos que tocar la pantalla para desbloquearla si pretendemos usar la función. Por ahora no tiene demasiadas opciones y el control todavía debe hacerse algo exagerado y poco natural, por lo que esperamos que en sucesivas iteraciones esto mejore, porque tiene un gran margen de maniobras y muchas posibilidades.
El siguiente apartado y siempre de los más importantes en un terminal de este precio el de las cámaras. El LG G8s ThinQ cuenta con un sistema de triple sensor trasero para ofrecer máxima versatilidad y un sensor delantero para selfie.
En la zona trasera tenemos tres sensores:
Con este pack de sensores tendremos la máxima versatilidad disponible, y compatibles con HDR, aunque es cierto que el zoom 2x se puede quedar corto frente a la competencia. Por otro lado, la calidad de las fotos es magnífica, con un gran detalle no solo en el modo automático, sino también en el modo retrato y modo gran angular por ser sensores con una gran cantidad de megapíxeles, especialmente nos sorprende la gran calidad del teleobjetivo.
Disponemos de Inteligencia Artificial para realizar las fotos y un muy completo panel de personalización en la aplicación propia de LG, que luego veremos con un poco más de detalle. De igual forma, el modo retrato nos permite seleccionar el grado de desenfoque que queremos en la imagen, aunque el propio sensor ajusta automáticamente este nivel en función de la distancia que haya entre el objeto principal y el fondo, algo que se realiza midiendo la distancia mediante infrarrojos.
El modo noche lo tenemos en una opción independiente, con capacidad de ajuste de la exposición como suele hacer la competencia. Lo cierto es que en las pruebas que hemos realizado en escenas nocturnas el desempeño ha sido más que solvente, aunque su punto débil lo hemos descubierto con las farolas de vapor de sodio (las amarillas) en donde nos da una imagen muy muy amarilla, más que en la realidad. En general el modo noche tiene luces y sombras, obteniendo muy buenas fotos en determinadas ocasiones y otras mejorables en condiciones más difíciles como la de esta review.
En las demás condiciones también hemos obtenido una excelente experiencia, si bien es cierto que no al nivel de los mejores Flagship de Samsung, Apple, Huawei o los Pixel. Nos llama la atención el poder usar un súper gran angular con un extra de profundidad estilo ojo de pez, aunque el resultado es algo curioso y artificial.
Respecto a la grabación de vídeo, lo bueno de este hardware es que nos permite capturar en 4K y 60 FPS, gracias a la GPU integrada. Tenemos una excelente estabilización óptica funcionando correctamente en todas las resoluciones y tasas de FPS, tanto en gran angular como en la lente principal. Lo curioso es que solamente graba a cámara lenta a una tasas de 240 FPS, y quizás una pequeña pega del sistema de enfocado es que se nota que siempre está intentando buscar un objeto de referencia, lo que da la sensación de que nunca está quieto.
Ahora os dejamos con algunas imágenes de estos sensores traseros.
El que realmente nos interesa de este LG G8s ThinQ para hacer las fotos no es la cámara Z, sino el sensor de 8 MP con apertura focal de 1.9 y estabilización. El desempeño en general es correcto, aunque se nota que el detalle en la imagen no es tan bueno como los sensores de 13 o 16 MP. Al igual que ocurre en los sensores traseros, en el modo retrato podemos seleccionar la difuminación en la profundidad.
La aplicación como decimos es muy completa, sobre todo en la gran cantidad de ajustes que podemos hacer en tiempo real ante de capturar la imagen. En la zona inferior tenemos los típicos modos de imagen, como el modo normal, retrato o un modo exclusivamente con inteligencia artificial. El resto de ello estarán dentro de “más” incluido el modo noche que para mí debería de estar en el menú principal.
La parte de arriba se deja para las opciones generales, equilibrio de color cambio a la parte delantera y el flash. Lo más llamativo lo tenemos en la zona de imagen, aquí tenemos disponibles en un toque los distintos modos de foto con sus respectivos sensores. Lo más interesante es que arrastrando hacia arriba el dedo, sacaremos una rueda de opciones de imagen en donde poder seleccionar concretamente el modo de foto que queramos, fusionando así los distintos sensores.
El tratamiento de las opciones y la fidelidad de colores con los que trabaja esta aplicación nos ha gustado mucho. El procesado no es muy acusado y tampoco la saturación del modo IA como suele ocurrir en los Xiaomi.
Por último, vamos a ver el apartado de la autonomía del LG G8s ThinQ. El terminal tiene una batería de 3550 mAh en la que se ha utilizado un sistema de carca rápida Quick Charge 3.0 de 18W y también carga inalámbrica. Es una potencia bastante aceptable que nos dará un ciclo completo de carga de aproximadamente 100 minutos.
En los días que hemos estado utilizando el terminal hemos experimentado una autonomía muy buena a pesar de no contar con esos 4000 mAh que tienen otros terminales. Hemos obtenido una autonomía de aproximadamente 8 horas de pantalla y 50 horas de uso total con el brillo a la mitad. En este ciclo, hemos realizados los correspondientes benchmark, las correspondientes fotos y el resto de pruebas de uso. Durante la noche, hemos activado el modo batería extendida para desactivar notificaciones y el reloj en pantalla.
La conectividad también es bastante extensa, incorporando NFC, Dual SIM y Wi-Fi compatible con 802.11 a/b/g/n/ac. De igual forma, tenemos sensores de geolocalización compatibles con A-GPS, GPU, Beidou y GLONASS. Tan solo nos ha faltado la Radio FM, ya que incluso tenemos Jack de 3,5 mm en la parte inferior.
Llegamos al final de este análisis de LG G8s ThinQ y el balance general es muy positivo. Es un terminal con excelentes acabados, alta protección IP68 digna de un gama alta y diseño elegante y sobrio. Aunque es un poco continuista, con el panel de cámaras horizontal y un notch y marcos con más protagonismo del que nos gustaría. Algo que no nos ha gustado es la ubicación del botón de desbloqueo, muy alto y poco accesible.
El rendimiento es tan bueno como esperábamos, con el Snapdragon 855 y 6 GB en su interior. Cierto es que las puntuaciones no son tan elevadas como por ejemplo los OnePlus, y esto se debe a tener un almacenamiento UFS 2.1 en lugar de 3.0. 128 GB son suficientes que podremos ampliar con Micro-SD hasta 2 TB, aunque una versión con 8 GB RAM y 256 GB ROM podría ser bienvenida.
Una de las grandes apuestas que diferencian este terminal es la integración de una cámara 3D con IR y ToF que permite desbloqueo con la palma de la mano o Hand ID, y el control básico por gestos del terminal, el llamado Air Motion, que a poco que practiquemos conseguiremos sacarle provecho. Tanto el sensor de huellas como el reconocimiento facial funcionan a la perfección y en todo tipo de situaciones.
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Tenemos por supuesto Android 9.0 Pie con la capa de personalización propia de LG. Esta capa es más intrusiva que las demás y quizás no tan bonita visualmente como por ejemplo Oxygen OS. Pero su implementación es perfecta y su fluidez más de lo mismo. Todo ello hace que la autonomía con 3550 mAh sea muy buena, con 8 horas de pantalla sin mayores problemas. Tenemos carga rápida discreta, de 18W y carga inalámbrica.
A esto le sumamos una muy buena aplicación de fotos, aunque cierto es que las cámaras todavía está un pasito por detrás de los mejores, hablamos de Samsung, IPhone, Pixel o Huaewi. No por ello son malas, al contrario, la experiencia que nos dan por su precio es de lo mejor que tenemos si tener que pagar más de 600 euros, máxima versatilidad con el triple sensor, fotos naturales y detalladas aunque el selfie es mejorable y el modo noche en según qué ocasiones.
Finalizamos siempre con su disponibilidad y precio, y este terminal solamente está disponible en una versión Black Mirror que salió al mercado por 699 euros. Actualmente lo podemos encontrar por un precio de entre 468 y 600 euros dependiendo del lugar en donde lo compremos. Mucho más económico que otros flagships, aunque los terminales chinos son una fuerte competencia para él.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| + DISEÑO EN CRISTAL ELEGANTE Y DISCRETO | – BOTÓN DE DESBLOQUEO MUY ALTO Y POCO ACCESIBLE A UNA MANO |
| + HAND ID Y AIR MOTION COMO GRAN APUESTA DE DIFERENCIACIÓN | – ALMACENAMIENTO UFS 2.1 |
| + PROTECCIÓN IP68 | – CALIDAD DE SELFIE UN POCO JUSTO AL IGUAL QUE LAS FOTOS NOCTURNAS |
| + SNAPDRAGON 855 + 6 GB DE RAM | – CAPA DE PERSONALIZACIÓN ALGO ANTICUADA |
| + AUTONOMÍA MUY BUENA +8 HORAS DE PANTALLA | |
| + SONIDO DE GRAN CALIDAD CON DOBLE ALTAVOZ | |
| + RECONOCIMIENTO FACIAL Y DE ROSTRO PRECISAS Y RÁPIDAS | |
| + CÁMARAS DE BUENA CALIDAD Y VERSATILIDAD CON EXCELENTE APLICACIÓN |
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