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Intel Optane H10 Review en Español (Análisis completo)

En este artículo analizamos la memoria SSD Intel Optane H10, la nueva generación lanzada por el gigante azul este 2019 catalogada como revolucionaria. ¿Por qué? Pues este SSD cuenta con una doble memoria, una de 256 GB y otra Optane de 16 GB más rápida que además se puede utilizar como caché para acelerar éste u otras unidades compatibles. El resultado será mejores tiempos de repuesta y mayor velocidad de nuestro equipo.

En esta review veremos las características y el rendimiento de esta unidad SSD en nuestro banco de pruebas. Pero antes, debemos agradecer a Intel la confianza en nosotros para cedernos su producto para este análisis.

Intel Optane H10 características técnicas

Intel Optane H10 características

Unboxing

Damos comienzo a la review de esta memoria Intel Optane H10 con su presentación, la cual es tan simple como un paquete en forma de molde de plástico trasparente en donde viene perfectamente acomodado el M.2 junto a sus distintos códigos de referencia e identificación.

Además de la unidad, no tenemos absolutamente nada mas en el bundle, y lo cierto es que no sabríamos decir si esta es la versión final o no. Porque al menos un cartón o cajita se echa en falta para guardar este plástico duro.

Diseño exterior

El Intel Optane H10 se trataría de una unidad SSD normal y corriente si no fuera por incluir un segundo chip de memoria que puede usarse como caché de aceleración o como memoria. Todo esto lo vemos tranquilamente a lo largo de la review, pero es una nueva generación de memorias con las que el fabricante, además de apostar por la velocidad, también mejora la inteligencia del SSD en la gestión del contenido que abrimos. Esto lo hace a priori un buen SSD para instalar el sistema operativo y programas de alta carga que usemos frecuentemente.

Intel Optane H10 Review

Además, este SSD no solo está orientado a equipos de escritorio, también a equipos portátiles, miniPC o AIO en donde necesitamos configuraciones especialmente delgadas de SSD para espacios pequeños. Eso sí, para poder utilizar la memoria Intel Optane de mayor velocidad y sus funciones, el sistema y equipo de deberá ser compatible con la tecnología.

El aspecto exterior del Intel Optane H10 es tremendamente simple, ya que no viene con ningún tipo de disipador para instalarlo sobre el mismo. Tan solo tenemos la PCB, por supuesto azul, con solamente una cara llena de chips. Sobre ellos una pegatina nos informa de la capacidad del SSD entre otras cosas. En el reverso de la PCB tan solo tenemos todos los logotipos de las tecnologías que el producto implementa.

Intel Optane H10 Review

Las medidas del SSD son simplemente las estándar del formato 2280, es decir, 22 mm de ancho, 80 mm de largo y tan solo 3,5 mm de grosor al solo tener una cara ocupada por chips de memoria. Imaginamos que la versión de 1 TB contará con chips en la zona de atrás también.

En principio no vamos a necesitar retirar la pegatina superior para aplicar un disipador, ya que éste proporciona una resistencia mínima a la conductividad térmica. Y además, si queremos preservar la garantía mejor dejarla. Lo que sí debemos recomendar es colocarlo en una placa que tenga disipadores integrados. Luego veremos que esta unidad se calienta mucho en comparación con la competencia.

Hardware y componentes

Ahora nos dedicaremos a hablar de las prestaciones teóricas del Intel Optane H10, así como toda la tecnología que implementa y lo que lo diferencia de otros productos del mercado.

Intel Optane H10 Review

Y empezamos en primer lugar por la tecnología de las memorias instaladas, las cuales son de tipo NAND 3D QLC. Esta tecnología es una variante de la memoria TLC, con una capacidad por celda de 4 bits. Eso sí, son más lentas y menos duraderas que las TLC, y por supuesto mucho menos que las MLC o SLC. En este caso tenemos un total de 256 GB en la memoria principal, pero también estarán disponible modelo de 512 GB y 1 TB.

Pero la gran diferencia con otros SSD es que Intel ha instalado una segunda memoria algo más rápida en el producto llamada Optane, de ahí su nombre claro. En esta versión será de 16 GB, mientras que en las otras dos versiones será de 32 GB. La función principal de esta memoria es la de funcionar como una caché de aceleración para la memoria principal o para otro SSD compatible. De hecho, si activamos estos 16 GB como caché, el rendimiento subirá a casi el doble que con un funcionamiento normal. Pero también tenemos una segunda función como memoria normal y corriente, un poco más rápida que las 256 GB, pero opino que es desperdiciarla, porque 16GB no llegan a ningún lado.

El encargado de gestionar todo esto será un controlador Intel RST (Rapid Storage Technology). Tiene la capacidad de reconocer y recordar el contenido que nosotros con más frecuencia abrimos, para así acelerarlo para próximas aperturas. Las latencias que el fabricante especifica son de 8 µs en lectura y 30 µs en escritura. De igual forma, esta versión de 256 GB nos proporciona una velocidad en lectura secuencial de 1450 MB/s y 230K IOPS (cantidad de operaciones E/S por segundo) en lectura aleatoria, mientras que en escritura secuencial tendremos 650 MB/s y 150K IOPS en aleatoria. Para la versión de 1 TB los valores ascienden a 2300/1300 MB/s en lectura y escritura secuencial.

Como otros SSD del mercado cuenta con protección contra la pérdida de datos y encriptación por hardware en todas las trasferencias, aunque no se especifica la tecnología usada. Soporta el comando de supervisión SMART y la tecnología Intel Rapid Start que sirve para arrancar el equipo más rápido después de un proceso de hibernación.

Otros datos bastante importantes que nos da el fabricante son por ejemplo la vida útil, que se sitúa en 75 TBW (terabytes escritos) para el SSD de 256 GB, 150 TBW para el de 512 GB y de 300 TBW para el de 1 TB. Lo cierto es que son cifras inferiores a las que tenemos con memorias NAND TLC y es uno de los inconvenientes de esta tecnología. De igual forma, el tiempo medio entre fallos también disminuye a 1.6 millones de horas, mientas que las TLC están en 2 millones o más. Por último, la garantía estará limitada en todos los SSD a 5 años.

Software y función Optane

Tratándose este SSD, será muy importante conocer cómo funciona el Intel Optane H10 en sus distintos modos. Para ello debemos irnos primeramente a la página del fabricante en donde poder descargar los distintos drivers y programas para la gestión.

Cabe decir que la placa base debe ser compatible con Intel Optane para que esto sea posible, esto siempre estará disponible en las especificaciones de la placa. Si no es compatible, la unidad simplemente aparecerá como un SSD más, con sus 256 GB de almacenamiento. Y si lo es, entonces no tendremos uno, sino dos discos duros disponibles.

Intel SSD Toolbox

Intel Optane H10 software

La primera herramienta que podemos descargar es el Intel SSD Toolbox, que a efectos prácticos, es como los demás programas que tienen los fabricantes para sus unidades de almacenamiento.

Pero claro, siendo Intel, el programa tiene un diseño bastante más cuidado y serio que el resto, pudiendo monitorizar éste y otros discos que tengamos instalados. Se añaden funciones como la de un examen de diagnóstico de la unidad, una función de borrado seguro y como no, actualizaciones del firmware o el optimizador del sistema.

No es fundamental, pero recomendamos instalarlo, al menos para tener el SSD controlado.

Drivers y activar Intel Optane

La función más interesante es la de poder configurar el Intel Optane H10 como caché de aceleración de datos, y es lo que haremos ahora mismo.

Para hacer esto, tendremos que descargar el controlador desde el enlace anterior. De esta forma se nos abrirá un asistente en el que seleccionar la memoria Optane y el SSD que queremos acelerar, en nuestro caso será este mismo. Tras unos cuantos, de reinicios, el disco duro que aparecía en el explorador de 16 GB se quitará, y se nos indicará que la aceleración está activa.

Equipo de pruebas y benchmarks

Dicho lo anterior, es turno para pasar a ver el rendimiento de este Intel Optane H10, del cual podremos sacar unas cuantas conclusiones.

BANCO DE PRUEBAS

Procesador:

Intel i9-9900K

Placa Base:

Asus Z390 ROG Maximus XI Formula

Memoria:

16 GB DDR4 G.Skill

Disipador

Corsair H100i Platinum SE

Disco Duro

Intel Optane H10

Tarjeta Gráfica

Asus GTX 1660 Ti OC

Fuente de Alimentación

Cooler Master V850 Gold

Veamos entonces cómo se va a comportar esta unidad con y sin la caché de datos Intel Optane activada. Recordemos que los registros que aporta el fabricante son de 1450/650 MB/s lectura/escritura, bastante discretos a estas alturas. Los programas de benchmark que hemos utilizado son los siguientes:

  • Crystal Disk Mark
  • AS SSD Benchmark
  • ATTO Disk Benchmark
  • Anvil´s Storage

Todos estos programas están en su última versión disponible. Recordad no abusar de estas pruebas en vuestras unidades, ya que el tiempo de vida se reduce.

Benchmark de las dos memorias por separado

Intel Optane H10 Benchmark Intel Optane H10 Benchmark

La primera captura corresponde a los 256 GB de almacenamiento principal. Y los resultados son bastante malos, no llegando en ningún momento a esos 1450 MB/s de referencia. Aún sin caché Optane, son valores que ni siquiera rozan los 1000 MB/s, cuando el fabricante tiene dignos SSD como los Intel 760p con un rendimiento bastante más bueno.

En el segundo caso estamos ante la memoria Optane, la cual mejora el rendimiento en lectura secuencial hasta casi 1000 MB/s, pero la lectura es tremendamente lenta, mucho más que un disco duro SATA.

Benchmark con memoria Optane activada

Intel Optane H10 Benchmark Intel Optane H10 Benchmark Intel Optane H10 Benchmark Intel Optane H10 Benchmark Intel Optane H10 Benchmark Intel Optane H10 Benchmark

Volvemos a realizar los test de rendimiento, ahora sí que usamos todos los programas y vemos una comparativa entre ellos. Y el primero como siempre es CristalDisk, el cual suele ser el que mejores resultados da. En este caso sí que estamos ante los resultados que el fabricante promete, superando los 1500 MB/s en lectura secuencia y los 650 MB/s en escritura. Fijémonos en que los resultados siguientes son bastante aceptables, e incluso muy buenos para el último apartado, en donde casi todos los SSD tienen bastantes problemas.

Ahora pasamos a ver los resultados de ATTO Disk, el cual ha obtenido su máximo de escritura en los bloques de 128 KB y de lectura en los de 512 KB. Aquí se demuestra de forma clara que este SSD está muy orientado a trabajar con bloques de datos pequeños, ya que en escritura de bloques mayores tiene serios problemas. Respecto a los IOPS, estamos en apenas 110K para lectura y escritura, que es bastante menos de lo que promete Intel.

Los resultados de AS SSD prácticamente son los mismos que se mostraron con la memoria Optane desactivada, por lo que suponemos que la compatibilidad con esta tecnología no es la mejor en este software. Tampoco los IOPS llegan a los valores esperados.

Finalmente llegamos a Anvil´s en el que vemos seguramente los peores resultados de este SSD. Y es que tenemos valores de tan solo 506 MB/s en lectura y 448 MB/s en escritura. Tampoco tenemos resultados demasiado optimizas en las latencias, ya que son bastante altas en lectura y escritura, superiores siempre a los 70 µs.

Temperaturas

Las temperaturas en estado de reposo son las siguientes:

Intel Optane H10 Temperaturas reposo

No son malas temperaturas para la memoria principal y para no tener ningún disipador instalado sobre ella, aunque el chip Optane está de forma constante cerca de los 50⁰C, que sí son temperaturas a considerar.

En la captura térmica en superficie muestra que la tanto el chip de memoria principal como el Optane están a una temperatura de unos 60⁰C mientras estamos en reposo.

Hemos capturado las temperaturas mientras CristalDiskmark estresaba las dos memorias y hemos obtenido temperaturas cuanto menos alarmantes. Y es que tanto la memoria principal como la Optane han alcanzado los 65⁰C de forma gradual, lo que nos indica que este SSD debe de instalarse junto a un disipador, pero el tiempo de vida a estas temperaturas será menor.

Si realizamos una captura térmica mientras estresamos la memoria principal (temperatura de la derecha), y otra estresando la memoria Optane de 16 GB (temperatura de la izquierda) obtenemos temperaturas altísimas, superiores a los 80⁰C.

Palabras finales y conclusión acerca de Intel Optane H10

Si algo podemos sacar en claro de este Intel Optane H10 es que su punto fuerte está en ese controlador y la memoria Optane que puede funcionar como almacenamiento o como una caché de datos para acelerar el rendimiento del SSD. Algo que no nos ha gustado es que cuenta con memorias QLC, las de menor rendimiento y durabilidad, por debajo de las TLC estandarizadas.

Este rendimiento se traduce en valores bastante discretos, por no decir malos para esta unidad de 256 GB, aún con la función Optane activada. No obstante, los SSD de 512 GB y 1 TB alcanzan valores más interesantes superiores a los 2000 MB/s, aunque aún muy lejos de los Samsung, Kingston e incluso de su Intel 760p.

Os recomendamos nuestra guía de los mejores SSD del momento.

Entonces, podemos determinar que las ventajas de este SSD no están en su rendimiento puro, sino en su versatilidad y doble funcionalidad. Su controlador es capaz de acelerar de forma inteligente el acceso a los datos más usados, que nos vendrá muy bien para instalar sistemas operativos sobre él. En todo caso, las latencias que hemos obtenido son mas elevadas de lo que cabías esperar.

Y algo que también deja que desear son las temperaturas, con cifras que superan los 65⁰C en el interior de las memorias según sus sensores, y ojo, más de 80⁰C en superficie ayudándonos de nuestra cámara térmica Flir One Pro, la cual funciona perfectamente. Así que recomendamos encarecidamente usar este SSD con un disipador instalado, de lo contrario vamos a tener problemas.

Finalmente debemos hablar del precio de estas unidades, en el caso de la analizada, de 256 GB, está en 105 euros, mientras que la de 512 GB la encontramos por 150 euros y la de 1TB en 240 euros. Sinceramente, estos precios están muy por encima de lo aceptable para un SSD con estas prestaciones. De acuerdo, tenemos algo diferente como es la doble memoria QLC + Optane, pero a un nivel de implementación aún no demasiado competitivo.

VENTAJAS

INCONVENIENTES

+ BUEN RENDIMIENTO PARA ARCHIVOS INFERIORES A 1 MB

– BAJO RENDIMIENTO AÚN CON LA CACHÉ OPTANE ACTIVADA
+ LA TECNOLOGÍA INTEL OPTANE PROMETE, PERO AÚN LE QUEDA CAMINO POR DELANTE – MUY ALTAS TEMPERATURAS SIN DISIPADOR

+ FORMATO 2280 PARA SUS TRES VERSIONES, ORIENTADO A EQUIPOS PORTÁTILES

– MEMORIAS NAND QLC MÁS LENTAS Y MENOS DURADERAS

– PRECIO MUY ALTO PARA LO QUE OFRECE

El equipo de Profesional Review le otorga la medalla de bronce:

Intel Optane H10

COMPONENTES - 77%
RENDIMIENTO - 63%
PRECIO - 60%
GARANTIA - 75%

69%

José Antonio Castillo

Graduado en Ingeniería en Tecnologías Industriales. Amante de la informática, el gaming y casi cualquier deporte de motor.
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