Sensor Pixart: todo lo que necesitas saber

¿Qué es un sensor pixart? En este artículo os enseñaremos todo lo que necesitáis saber sobre este importe componente de un ratón. Aunque antes de comenzar tenemos que saber:

Uno de los periféricos de ordenador que más cambios ha sufrido a lo largo de su existencia ha sido el ratón de escritorio, desde que comenzara a popularizarse su uso en la década de los ochenta estos acompañantes han ido cambiado su morfología, su funcionamiento y su marketing hasta la actualidad, encontrándose por el camino con uno de los principales motores de la enorme oferta que encontramos hoy día: el videojuego competitivo.

La proliferación y estandarización del ratón «para gaming” surge con la necesidad de optimizar el estilo de juego de los competidores. Como ya sucediera con el teclado, los usuarios comenzaron a demandar ratones de escritorio que eliminaran trabas durante las sesiones de juego, pero para realizar movimientos rápidos y precisos, los ratones con mecanismo de bola que tan populares fueron hasta ese momento eran insuficientes.

La respuesta a las necesidades de estos jugadores llego de la mano de Microsoft con su Intelli-mouse y su sensor óptico. Cuando otras marcas, como Logitech, comenzaron a competir por hacerse un hueco nuestros escritorios, comenzaron a demandarse sensores más precisos y rápidos. Dio así comienzo la carrera por ofrecer los mejores sensores del mercado, una carrera que en 2012 ganó una compañía Taiwanesa llamada Pixart Imaging.

Por qué es tan importante la calidad de los sensores en un ratón de escritorio

Fuera de la morfología del ratón, existe un consenso que dicta que la pieza fundamental en estos periféricos es el sensor. El sensor es el encargado de leer cada movimiento realizado sobre el ratón, por lo que la precisión y rapidez a la que se muestra en pantalla el desplazamiento del periférico no sólo está condicionada por la pericia del propio jugador, si no por las limitaciones del sensor encargado de leer dicho movimiento.

Actualmente, casi todos los sensores del mercado son ópticos y se apoyan en las imperfecciones registradas sobre las superficies para detectar nuestros movimientos. La capacidad de registrar este desplazamiento está limitada por el CPI (Counts Per Inch) y la resolución a la que ejecutemos nuestros juegos, mientras que la velocidad a la que esta información se transmite a nuestro PC viene determinada por la tasa de sondeo.

Ambos factores, así como la aceleración o la velocidad de lectura, entre otros, contribuyen a mejorar la precisión con la que se muestran nuestros movimientos y todos ellos dependen del sensor, ahí radica su importancia.

Un vistazo al líder mundial en sensores CMOS

Dada la importancia de los sensores, podemos entender la necesidad de los fabricantes del periférico con nombre de roedor de diferenciarse con respecto al resto de competidores. Comenzó así una lucha por ofrecer el mejor sensor posible, una disputa que también se vivió entre los fabricantes de dichos sensores. A finales de la década de los 2000 esta lucha se concentraba entre Avago (Actual Broadcom), que en 2006 concentraba la mayoría de la cuota de mercado gracias al mercado occidental, y Pixart Imaging, que operaba desde 1998 en el mercado asiático.

Ambas compañías se encontraban envueltas en una serie de litigios por las patentes de los sensores ópticos usados en los ratones de escritorio, una trifulca legal que se extendió varios años y acabó con la victoria legal de la compañía taiwanesa. Un triunfo que engarzó a la empresa asiática con la amplia mayoría de patentes sobre CMOS y que desplazó fuera del mercado al resto de fabricantes. Desde ese momento, los principales sensores del mercado eran de Pixart.

La necesidad de diferenciarse de las compañías de periféricos

Con un único fabricante, el mercado de los ratones para jugar comenzó a inundarse de los mismos sensores. Modelos como el PMW 3310, que daban un buen rendimiento, se convirtieron en mínimo admisible en ratones de competición y la saturación comenzaba a hacerse fehaciente después del lanzamiento del PMW 3360, aún hoy el modelo de referencia.

Ante esta situación, comenzó a popularizarse el co-desarrollo de nuevos sensores, así como la modificación de los existentes, para diferenciarse de la competencia. Algunos de los sensores más populares hoy día son de este tipo, entre los que destacan:

La mayoría de estos sensores de alta gama provienen de modificaciones del ya nombrado PMW 3360, que desplazó totalmente al resto de sensores de la compañía. Por esa razón es habitual hoy día encontrarse sensores inferiores en modelos asequibles, siendo muchos de ellos grandes sensores ópticos. Destacamos el PMW 3310 y el PMW 3330, ambos usados en ratones de gama alta hasta el posterior lanzamiento del PMW 3360.

¿Son entonces todos los sensores actuales de Pixart?

La respuesta más rápida es un rotundo sí. Salvando algunos sensores de gama baja provenientes de pequeñas compañías, todos los grandes fabricantes de periféricos operan con sensores Pixart o fabrican junto a ellos sus propios modelos, incluyendo sensores co-desarrollados como el TrueMove 3 (SteelSeries) o el Hero 16K (Logitech), aunque este último sólo es fabricado por la compañía asiática. También es así los antiguos Avago, de los que aún podemos encontrar algunos modelos.

A pesar de las implicaciones que un monopolio de estas características conlleva, el punto positivo es que los sensores de la compañía taiwanesa son de muy buena calidad, por lo que actualmente prácticamente todos los ratones para jugar suelen tener un buen sensor que los respalde. De entre todos los modelos disponibles de la compañía, sin modificar, destacamos los siguientes:

Te recomendamos la lectura de los mejores ratones del mercado

Todos estos sensores pueden encontrarse en ratones de escritorio en el mercado, constituyendo algunos de los mejores sensores ópticos del panorama actual junto con los modificados ya mostrados. Ya seas un jugador casual o competitivo, te recomendamos tenerlos en cuenta la próxima vez que vayas a adquirir un nuevo roedor para tu escritorio.