Ya tenemos con nosotros la nueva fuente de alimentación Corsair RM850. Una nueva remesa de PSU anunciadas y presentadas en Computex 2019 que tuvimos la oportunidad de ver funcionar allí y que su llegada no se ha hecho esperar. Con tres versiones de 650, 750 y 850W, estas fuentes con certificación 80 Plus Gold, son completamente modulares y viene dispuestas a hacer las delicias de los usuarios que no se pueden permitir las topes gamas de la marca. Además, implementa la tecnología Modo Zero RPM para la gestión del ventilador de 135 mm y 10 años de garantía.
Como siempre, ante de comenzar queremos dar las gracias a Corsair por cedernos su producto para realizar este análisis.
Comenzamos por el Unboxing de esta fuente de alimentación Corsair RM850, la primera en potencia después de la versión de 750W y 650W que también tiene Corsair a la venta.
La presentación no ha variado ni un ápice respecto a las otras versiones de fuentes Corsair. Así que encontramos una caja de cartón rígido y de buen grosor con un tamaño bastante ajustado a las dimensiones de la fuente, y luciendo los colores que distinguen a la marca, negro y amarillo por supuesto.
En la cara principal de la caja, tenemos una foto de gran tamaño de la fuente, así como marca, modelo, garantía de 10 años y la certificación 80 Plus que tiene. Y si giramos la caja hacia el otro lado, pues tendremos información acerca de la ficha técnica de la fuente, e información muy importante en forma de gráficas de su eficiencia a diferentes cargas, momento de activación del ventilador y la tabla de potencias. Muy interesante todo esto y que iremos descubriendo poco a poco.
Y sin más espera, comenzamos por abrir la caja en donde nos encontramos dos departamentos bien diferenciados. Por un lado, la fuente de alimentación encajada en dos moldes de espuma de polietileno de gran densidad, y por otro lado, una segunda cajita de cartón en done se encuentran todo los cables que se incluyen en el bundle.
Es así como tendremos lo siguientes elementos:
Nada fuera de lo normal ni nada que objetar, todo muy bien ordenado y al alcance del usuario. Más adelante veremos todos los cables que tenemos disponibles.
Pues con todo fuera y completamente revuelto para ser utilizado, vamos a fijarnos en el diseño exterior de la fuente y algunos elementos de interés.
Y en lo primero que nos debemos fijar de Corsair RM850 es que la etiqueta y la tabla de prestaciones para los distintos voltajes ha sido removida de las zonas laterales. Unas zonas en las que tan solo vemos el modelo de la fuente de alimentación, en este caso “RM850” en gran tamaño.
Hubiera sido un detalle interesante el incluir las pegatinas que tiene la serie AX de Corsair para estas fuentes, aunque tampoco nos vamos a quejar. El diseño es bastante elegante completamente en negro y la serigrafía en blanco.
Como hemos anunciado, en la parte que consideramos superior en la mayoría de chasis según la colocación, tenemos la correspondiente pegatina con la tabla de potencia en los distintos raíles de voltaje. Fijémonos en que, según ésta, en el raíl de +12V tenemos un máximo de 849,6W de entrega de potencia.
Recordemos que esta fuente de certificación 80 Plus Gold, por lo que ofrecerá un rendimiento de entre el 88 y el 92%. De hecho, en la gráfica de eficiencia realizada por Cybenetics y que más tarde veremos, se han obtenido eficiencias cercanas al 94% a una carga de entre 100W y 300W.
Seguimos con la parte trasera que da al exterior del chasis. Corsair RM850 tan solo ofrece una rejilla completa metálica y en forma de panal de abeja que sirve para sacar todo el aire caliente que introduce el ventilador por la parte inferior.
Además de esto, tenemos el típico conector de tres patas para la conexión a la red de nuestra casa en 100 a 240V, con neutro, fase y tierra, como debe ser. Además, tenemos también el típico interruptor que se encargará de cortar el suministro de corriente hacia la fuente o permitirlo.
Precisamente en la parte considerada inferior, encontramos un ventilador con 135 mm de diámetro protegido por una rejilla que se encargará de introducir el aire hacia los componentes electrónicos.
Sin más veamos en detalle la gestión de cableado de Corsair RM850.
Corsair RM850 se trata claramente de una fuente de alimentación completamente modular, que además ofrece una gran cantidad de conexiones en su panel trasero. En este modelo en concreto tenemos los siguientes:
Fila superior:
Fila inferior:
Todo queda bastante clarito en ambas filas, especialmente cuando veamos todos los cables que se incluyen. Al tratarse de una fuente de alimentación de 850W, el fabricante la ha dotado de capacidad suficiente como para instalarla en equipos con placas bases de hasta 2 conectores EPS para CPU. E incluso añadiendo GPU potentes, porque como veremos a continuación, los cables PCIe tienen doble conexión en ellos, no es lo mejor, pero es una forma de aumentar la conectividad.
Y ¿para qué esperar más? Veamos todos los cables que trae el bundle de esta fuente Corsair RM850 en su versión de 2019:
Este es el recuento total de cables, si os habéis dado cuenta, tan solo se quedaría libre uno de los conectores SATA de 6 pines. ¿Qué seremos capaces con esta configuración de fábrica de 850W?
Pues veamos, podremos instalar un equipo con placa base de doble conexión EPS para CPU y además podremos hacer un SLI con dos GPU GTX o RTX, o también un CrossFire con triple GPU, hipotéticamente hablando. En cualquier caso, tendríamos que mirar siempre la suma total de potencias de los distintos componentes para ver si estos 850W son suficientes. En cualquier caso, para una placa base potente y una GPU tope gama, vamos a tener poder de sobra con esta Corsair RM850.
Como hemos visto en las imágenes, estos cables no cuentan con mallado metálico, así que son una versión diferente que los que se incluyen en las fuentes de gama alta del fabricante, hablamos de la serie AX o las RMX. Corsair pone a disposición de los usuarios una página con las tablas de compatibilidad con los cables universales para reemplazo de los que fábrica.
Debemos considerar también que estos cables tienen la ventaja de no tener condensadores en sus extremos y de ser planos, lo que facilita el montaje por ser un poco más flexibles que los de los incorporan. Aunque un mallado metálico nos hubiera venido muy bien para mejorar la estética y aumentar la durabilidad de los mismos, precisamente por este motivo, tan solo contamos con este mallado en el conector ATX y además incluye condensadores para mejorar el rizado de la tensión.
Algo que también será interesante, es saber la longitud total de estos cables, ya que los chasis son cada vez más amplios y a veces, en determinadas configuraciones personalizadas, los usuarios tienen problemas para que estos cables lleguen a todos los componentes adecuadamente.
| Formato | ATX | EPS | PCIe | SATA | MOLEX |
| Longitud (mm) | 615 | 665 | 750 | 810 | 780 |
Podemos aseguraos de que no vais a tener ningún tipo de problemas en la instalación de componentes en los chasis de formato media torre e incluyo torre completa. La gran cantidad de cables SATA que tenemos con hasta 12 y los 3 PCIe, nos van a asegurar una cobertura excelente en todo el chasis. Nuestra única preocupación será la de asegurarnos que no se vean.
Antes de comenzar el análisis, conviene explicar de forma superficial cómo abrir esta fuente Corsair RM850. Básicamente nos situaremos en la cara en donde se ubica el ventilador y desenroscaremos los cuatro tornillos más pequeños con cabeza allen. Tened en cuenta que uno de ellos tiene la pegatina de la garantía, así que, de forma inevitable, si hacemos esto la perderemos.
A continuación, retiraremos la chapa metálica y desconectaremos el ventilador de su conector de dos pines para separar este elemento. Este ventilador consiste en una configuración de 135 mm de diámetro con 7 aletas construido por Hong Hua con rodamiento de tipo Rifle. En este caso, no contamos con compatibilidad en Corsair Link, que nos permitía monitorizar las RPM del ventilador.
Pero lo más interesante, es que esta nueva actualización de las fuentes de serie RM cuentan con la tecnología Zero RPM, que básicamente se trata de mantener el ventilador apagado mientras que se supere una demanda de potencia de al menos 340W, y así lo ha demostrado en nuestras pruebas.
Esta nueva serie de fuentes RM de Corsair ha sido ensamblada por CWT y lo cierto es que vienen con importantes actualizaciones en cuanto a eficiencia y el filtrado de corriente para aumentar la calidad de la misma. Tenemos implementado un controlador CM6901 construido por Champion, necesario para cumplir los estándares de Microsoft y de Intel en cuanto a eficiencia energética a baja carga. Y no tenemos uno, sino dos conversores DC-DC, para los raíles secundarios de +5V y de +3,3V provenientes del principal de +12V.
En esta fuente Corsair RM850, no contamos con una gestión en múltiples raíles de 12V, ya que este aspecto se ha dejado exclusivamente para fuentes de máximas prestaciones. Así que la tabla de potencias se simplifica bastante, como podemos ver en la imagen anterior. De hecho, la eficiencia energética alcanza el 94% a 230V en un estado de carga de entre el 20% y el 50%, que precisamente es el rango en donde nos vamos a mover la mayoría del tiempo, unos 200W a 400W.
Comenzamos por la primera etapa de filtrado en donde no podría faltar la presencia de NTC acompañado de un relé (dispositivo que emite un “clic” cuando apagamos y encendemos) que absorberá los picos de tensión en la entrada de la alimentación cuando conectemos el cable o pulsemos el interruptor. Junto a estos y en la placa principal, se encuentra un MOV que se encarga de reducir las sobretensiones que se produzcan durante el uso de la fuente.
Así mismo, vemos claramente los dos condensadores electrolíticos primarios fabricados en aluminio por el ensamblador taiwanés Elite que especifican 390 µF ambos a 400V y soportando temperaturas de 105°C. De igual forma Elite se ha encargado introducir también el resto de condensadores secundarios de esta fuente de alimentación.
En una vista general se puede ver como toda la zona de rectificación de tensión y etapa de potencia está cubierta por un disipador de aluminio de grandes dimensiones. Debemos tener en cuenta que el puente de diodos que convierte la tensión alterna en continua, y los MOSFETS encargados de la etapa de potencia junto a los transformadores son los elementos que mayores temperaturas pueden llegar a tener. También hay una placa secundaria con MOSFETs SR para los dos railes de 3.3V y 5V que no tienen este tipo de disipador, y vamos a observar luego que serán los que mayor temperatura generan.
Las protecciones que esta fuente Corsair RM850 incluyen sobre-tensiones (OVP), infra-tensiones (UVP), picos de potencia (OPP), picos de intensidad (OCP), control de sobre-temperaturas (OTP) y por supuesto frente a cortocircuitos (SCP).
Tal y como el amigo Breixo está haciendo en sus últimas reviews de fuentes de alimentación, vamos a elaborar las gráficas correspondientes a los datos que Cybenetics ha obtenido sobre esta fuente Corsair RM850.
Para entender mejor estas pruebas, vamos a dejar una completa explicación en las siguientes pestañas tal y como se irá haciendo en todas las fuentes que, como esta, incluyan certificación de Cybenetics.
Se trata de una información que incluiremos en todas nuestras review con datos de Cybenetics así que, si ya conoces cómo funciona la estructura de pruebas, puedes seguir leyendo. Si no, te recomendamos echar un vistazo a todas las pestañas para saber de qué va cada prueba. 😉
Vamos con un pequeño glosario de algunos términos que podrían resultar algo confusos:
Raíl: las fuentes para PC que siguen el estándar ATX (como esta) no tienen una única salida, sino varias, que se distribuyen en “raíles“. Cada uno de esos raíles saca un voltaje concreto, y puede suministrar una corriente máxima concreta. Os mostramos los raíles de esta Thor en la imagen de abajo. El más importante es el de 12V.
Crossload: cuando se testea una fuente de alimentación, lo más común es que las cargas que se hagan a cada raíl sean proporcionales a su “peso” en la tabla de distribución de potencia de la fuente. Sin embargo, se sabe que las cargas reales de los equipos no son así, sino que suelen ser muy desbalanceadas. Por ello, existen dos test llamados “crossload” en los que se carga a un solo grupo de raíles.
Por una parte, tenemos el CL1 que deja sin carga al raíl de 12V y le da el 100% a 5V y 3.3V. Por otra, el CL2 que carga al 100% el raíl de 12V dejando al resto sin carga. Este tipo de pruebas, de situaciones límite, pone verderamente de manifiesto si la fuente tiene una buena regulación de voltajes o no.
La importancia de esta prueba radica en lo estables que se mantengan todos los voltajes durante las pruebas. Idealmente, nos gusta ver una desviación máxima del 2 o 3% para el raíl de 12V, y del 5% para el resto de raíles.
Lo que no importa tanto es ‘de qué voltaje se parte’, si bien es un mito bastante extendido, no debe importarnos que se ronden los 11.8V o los 12.3V por ejemplo. Lo que sí exigimos es que se mantengan dentro de los límites del estándar ATX que rige las normas de correcto funcionamiento de una PSU. Las líneas rojas rayadas indican dónde están esos límites.
De forma vulgar se puede definir como los “residuos” de corriente alterna que quedan tras la transformación y rectificación de la CA del hogar en CC de bajos voltajes.
Se trata de variaciones de algunos milivoltios (mV) que, si son muy elevadas (pudiendo decir que hay una salida de energía “sucia”) pueden repercutir en el comportamiento de los componentes del equipo y en algunos casos estropear componentes fundamentales.
El estándar ATX define límites de hasta 120mV en el raíl de 12V, y hasta 50mV en los otros raíles que mostramos. Nosotros (y la comunidad de especialistas de PSU en general) consideramos que el límite en 12V es bastante elevado, por lo que damos un “límite recomendado” de justo la mitad, 60mV. En todo caso veréis cómo la mayoría de fuentes que testeamos dan valores excelentes.
Esto es precisamente lo que prueba 80 Plus. A pesar de la concepción que tiene mucha gente, 80 Plus solo mide la eficiencia de la fuente y no hace ningún testeo de calidad, protecciones, etc. Cybenetics testea eficiencia y sonoridad, aunque incluye de forma altruista los resultados de otras muchas pruebas como las que os mostramos en la review.
Otro error de concepto muy grave en torno a la eficiencia es creer que esto determina qué porcentaje de su potencia «prometida» puede entregar la fuente. Lo cierto es que las fuentes de potencia «real» anuncian lo que pueden dar en la SALIDA. Es decir, que si una fuente de 650W tiene un 80% de eficiencia a este nivel de carga, significa que si los componentes demandan 650W, esta consumirá 650/0.8 = 812.5W de la pared.
Último aspecto relevante: la eficiencia varía según estemos conectando la fuente a una red eléctrica de 230V (Europa y casi todo el mundo), o a 115V (principalmente EEUU). En este último caso es menor. Nosotros publicamos los datos de Cybenetics para 230V (si los tienen), y puesto que la aplastante mayoría de fuentes se certifican para 115V, es normal que a 230V no se lleguen a alcanzar los requisitos del 80 Plus anunciado por cada fuente.
Para esta prueba, Cybenetics testea las PSU en una cámara anecoica extremadamente sofisticada con equipamiento que vale decenas de miles de euros.
Se trata de una sala aislada del ruido exterior casi en su totalidad, basta con decir que tiene una puerta reforzada de 300kg para ilustrar el gran aislamiento con el que cuenta.
Dentro de ella, un sonómetro de extrema precisión capaz de medir por debajo de los 6dbA (la mayoría tiene como mínimo 30-40dBa, muchísimo más) determina la sonoridad de la fuente de alimentación en los distintos escenarios de carga. También se mide la velocidad que alcanza el ventilador en rpm.
Este test mide, básicamente, cuánto tiempo la fuente es capaz de aguantar encendida una vez se desconecta de la corriente mientras está a máxima carga. Serán unos milisegundos cruciales para permitir un apagado más seguro.
El estándar ATX define 16/17ms (según test) como mínimo, aunque en la práctica esto será más (no siempre estaremos cargando la PSU al 100% por lo que será mayor), y no suele haber problemas con valores inferiores.
Y por supuesto, os dejamos con el informe completo de pruebas publicado por Cybenetics:
Link al informe completo de Cybenetics para la RM850 Web oficial de CybeneticsLas desviaciones máximas calculadas están perfectamente ajustadas a lo que se espera de una fuente de alimentación como esta. Si bien es cierto que en el raíl de 12 V llegamos casi al 1%, siguen tratándose de valores prácticamente despreciables.
En cuanto al rizado, entra perfectamente dentro de los límites que se han establecido, aunque sí vemos que es ligeramente mayor cuando sometemos la fuente a mayor carga. Recordad que solamente tenemos condensadores en el conector ATX, aunque es cierto que las mejoras que estos condensadores llevarán a cabo, no serán demasiado importantes.
En cualquier caso, estamos ante una fuente no de gama Premium, y son valores perfectamente entendibles, y realmente buenos para lo que tenemos entre manos.
Al ver esta gráfica casi podríamos estar hablando de una fuente con certificación Titanium, porque vemos registros muy cercanos al 94% de eficiencia. Corsair se distingue por ser precisamente un fabricante que dota de muchísima calidad a sus fuentes, y tan solo vemos unos registros inferiores al 90% a mínima carga y en una carga que supera el 100%.
De igual forma, es entendible que una fuente de 80 Plus Gold presente un consumo algo más elevado en la entrada mientras más le exijamos, entre dentro del porcentaje de eficiencia obtenido.
Recordad que ésta Corsair RM850 cuenta con modo Zero RPM, y por ello el ventilador se activa al llegar a los 340W de carga de la fuente. Esto es precisamente lo que vemos en esta gráfica, y lo cierto es que es un ventilador bastante potente capaz de llegar hasta las 1753 rpm.
Motivo de ello es encontrarnos con un ruido cercano a los 40 dB, entendamos, no es demasiado, pero sí audible en situaciones de estrés máximas, por lo que Cybenetics le da una certificación de sonoridad LAMBDA A-, quedándose unos pasos por detrás de los mejores registros.
| Hold-up time Corsair RM850 (testeado a 230V) | 20.05 ms |
|---|---|
| Datos extraídos de Cybenetics | |
Los registros de Hold-Up time si sitúan relativamente cercanos a lo que establece Intel, con esos 16/17 ms de tiempo de apagado. Por lo que seguimos en la dinámica de tener unos grandes resultados de esta Corsair RM850.
Reiteramos nuestro agradecimiento a Cybenetics por permitir el uso de estos datos de sus pruebas y os invitamos a saber más sobre ellos aquí.
También hemos llevado a cabo una pequeña prueba de rendimiento con la fuente Corsair RM850 en nuestro banco de pruebas.
| BANCO DE PRUEBAS | |
| Procesador: | |
| Placa Base: | MSI MEG Z390 ACE |
| Memoria: | |
| Disipador | Corsair H100i Platinum SE |
| SSD | |
| Tarjeta Gráfica | |
| Fuente de Alimentación | Corsair RM850 |
Para ello hemos capturado la potencia demandada sin carga, con Prime 95, y con prime 95 + Furmark con el procesador Intel Core i9-9900K a una frecuencia de 5,0 GHz. Estos son los resultados:
Y vemos unos resultados tremendamente similares entre estas dos fuentes usadas en el mismo banco de pruebas y en las mismas condiciones. Incluso la RM850 presenta unos registros un poquito mejores que la Be Quiet! Lo cual es muy positivo sabiendo que esta última tienen certificación 80 Plus Platino.
También hemos aprovechado para realizar unas cuantas capturas con cámara térmica de esta fuente Corsair RM850 durante su uso a una carga de aproximadamente 360W para observar su distribución de calor y la respuesta de su ventilador.
Recordemos que esta fuente cuenta con un microcontrolador y un circuito de seguridad que se proyecta en la pequeña PCB en donde se conecta el ventilador. De esta forma es posible controlador el modo semi-pasivo de la fuente mucho mejor con mayor cantidad de parámetros, hablamos de la temperatura, la carga y el tiempo de uso. De esta forma también se evita la posibilidad de que el ventilador entre en estados de activación/desactivación cuando estamos al borde de esos 340W de potencia.
Tras unas horas de uso a la carga comentada, hemos realizado capturas tanto con la fuente tapada y su ventilador activado, como destapada y sin refrigeración alguna. En el primer caso hemos obtenido una temperatura en la salida de aire de unos 36,5 grados estando a una temperatura ambiente de unos 26 grados. Es una carga bastante pequeña debemos decir, así que la fuente no tendrá mayores dificultades.
Cuando retiramos la tapa, vemos que las mayores temperaturas se registran en la placa de MOSFETS situada justo detrás de los raíles de 3,3 y 5V. En este caso hemos tomado capturas bajo una demanda entorno a los 200W en la primera foto, y con más de 340W en la segunda foto, observando temperaturas cercanas a los 60°C. De igual forma, bajo los disipadores de aluminio también se encuentran el resto de etapas de potencia, aunque gracias a ellos las temperaturas se mantienen más controladas incluso sin ventilador forzada.
Si la anterior generación de fuentes Corsair RM eran buenas, esta nueva generación, al menos en este modelo Corsair RM850 simplemente es una maravilla. Sobre todo, si hablamos de eficiencia energética, se sitúa en unos valores cercanos al 94% de eficiencia con una certificación 80 Plus Gold. Aunque claro está, no se mantendrá bajo todas las situaciones de carga.
Lo cierto es que no es una de las fuentes más silenciosas que hemos probado. Su ventilador de 135 mm y 1700rpm máximas dejarán unos valores máximos de 40 dBA nada despreciables. Al menos la refrigeración será buenísima. Un aspecto muy interesante es la implementación de un microcontrolador digital para el modo Zero RPM que gestiona de forma inteligente el ventilador y lo mantiene apagado hasta los 340W de carga.
Te recomendamos la lectura de nuestra guía actualizada de las mejores fuentes de alimentación.
No nos olvidamos de los excelentes componentes internos, como los condensadores Elite de grandes prestaciones, el controlador CM6901 para aumentar la eficiencia, o el doble conversor DC-DC usado para los raíles de 3,3V y 5V de forma independiente. Son detalles de calidad que distintas las fuentes de Corsair frente a la competencia.
Y para finalizar debemos hablar de precios, porque esta fuente Corsair RM850 se puede encontrar en el mercado por un precio de unos 110 a 140 euros aproximadamente en función de los modelos, a saber, RM650, RM750 y RM850. Sin duda son precios realmente atractivos para lo que tenemos entre manos, y nadie podrá tener la excusa de que en su PC no va a poder meter una buena fuente.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| + DISEÑO 100% MODULAS Y CABLES PLANOS | – POR DECIR ALGUNA, ALGO RUIDOSA A MÁXIMA CARGA |
| + 80 PLUS GOLD HASTA 94% | |
| + GRAN CALIDAD DE SEÑAL EN TODOS LOS RAÍLES | |
| + COMPONENTES INTERNOS DE GRAN CALIDAD | |
| + 10 AÑOS DE GARANTÍA |
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