Se ralentiza el crecimiento del iPhone

De acuerdo con los datos compartidos recientemente por Consumer Intelligence Research Partners (CIRP), la base de usuarios de iPhone en Estados Unidos ha experimentado un crecimiento más lento durante el primer trimestre natural (segundo trimestre fiscal) de 2019, algo que ya pronosticaron los analistas a comienzos del mes de diciembre.

La desaceleración del iPhone

A día 30 de marzo de 2019, la base de usuarios de iPhone en Estados Unidos ha alcanzado los 193 millones de unidades, en comparación con las 189 millones de unidades constatadas a finales del pasado mes de diciembre. Esto supone un crecimiento de tan sólo el dos por ciento respecto al trimestre anterior.

Si echamos la vista atrás, a finales del primer trimestre natural de 2018 la base de usuarios de iPhone se situaba en 173 millones de unidades, lo que supone un crecimiento interanual del doce por ciento, cifra que no está nada mal, pero que no llega a alcanzar las tasas de crecimiento de años anteriores.

Hace un año, la base de usuarios de iPhone en Estados Unidos creció un cuatro por ciento trimestral y un 19 por ciento en comparación con el año anterior. Todo ello pone de manifiesto que el crecimiento del iPhone está experimentando una desaceleración.

«La base instalada de iPhones en los Estados Unidos continúa estancándose», dijo Josh Lowitz, socio y cofundador de CIRP. «En relación con los trimestres más recientes, y especialmente con los últimos dos o tres años, la desaceleración de las ventas de unidades y los periodos de propiedad más largos significan que el crecimiento en la cantidad de iPhones en EE. UU. se ha aplanado considerablemente. Por supuesto, un 12% de crecimiento en un año, después de los años de mayor crecimiento siguen siendo buenos. Sin embargo, los inversores se acostumbraron a un crecimiento trimestral del 5% o más, y un crecimiento anual de casi el 20%. Esta tendencia continua incita a los inversionistas a preguntarse si las ventas de iPhone fuera de EE. UU. «mayor presión sobre la determinación de Apple de vender otros productos y servicios a la base instalada de propietarios de iPhone».

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Esta desaceleración llevó a Apple a reducir su estimación de ingresos por primera vez en muchos años. De hecho, Apple ha experimentado una caída de ingresos durante el segundo trimestre fiscal desde los 61.100 millones en 2018 hasta los 58.000 millones de dólares del trimestre que ha finalizado en marzo.