Sharkoon Drakonia II es un nuevo ratón gaming que llega al mercado para demostrar que no hace falta gastar mucho dinero para obtener un producto de altas prestaciones, y capaz de satisfacer las necesidades de los más jugones. Esta segunda revisión de uno de los ratones más exitosos incluye un sensor óptico Pixart 3360 de 15.000 DPI y la mejor precisión, junto a 12 botones personalizables.
Aprovecharemos la ocasión para realizar una comparativa en uso con su antecesor, el Sharkoon Drakonia I.
En primer lugar, agradecemos a Sharkoon la confianza depositada en nosotros al cedernos el producto para su análisis.
Este ratón Sharkoon Drakonia II apuesta por una presentación sencilla, pero que está a la altura de lo que ofrecen las mejores marcas del sector en la mayoría de sus modelos. La caja está impresa en los colores corporativos de la compañía, y destaca las características más importantes de este ratón, que iremos viendo a lo largo de este análisis.
Dentro de la caja encontramos el Drakonia II, una bolsa de transporte, un CD con el software de configuración y un juego adicional de patas para el ratón.
El Sharkoon Drakonia II es un ratón gaming diseñado para trabajar con la mano derecha, y para adaptarse a la perfección a los agarres de tipo palma, sin olvidarse del tipo garra y de punta, en donde también da buenos resultados. Esto hace que sea un ratón bastante grande con unas medidas de 127 x 83 x 42 mm y un peso de 134 gramos. No es ni el más pequeño ni el más ligero del mercado, pero su diseño es muy cómodo en la mano.
Las escamas de dragón cubren la parte superior del ratón en su totalidad, lo que le da un aspecto bastante agresivo y muy gaming. Además, está disponible en don colores, el que vemos en éste análisis y otro en gris. Sharkoon ha colocado agarres de rugosos, pero no de goma, a cada lado para evitar que la mano y los dedos se deslicen mientras juegas, algo que es muy acertado.
El acabado es íntegramente en plástico liso y rugoso en los alterales, con la zona de escamas totalmente lisa y brillante para dar un toque espectacular.
No podía faltar un sistema de iluminación LED RGB, el cual incluye tanto la rueda como el logo de la marca en la parte trasera. Gracias al software podremos ajustarlo en 16,8 millones de colores.
En la parte superior del Sharkoon Drakonia II encontramos los dos botones estándar para click izquierdo y derecho, junto con una rueda de desplazamiento, que cuando se presiona, es un botón. Los dos últimos botones son para cambiar la configuración de DPI, que se desplazará entre 6 configuraciones diferentes de baja a alta. Además, tenemos un tercer botón configurable para opciones de función y macros.
Los dos botones principales usan mecanismos OMRON certificados para 10 millones de pulsaciones, este es un ratón hecho para durar, sin duda.
Encontramos nada menos que seis botones en el lado izquierdo del ratón, dos de los cuales están preprogramados para ir «atrás» y «avanzar» en el navegador. Todos ellos tienen un tacto bueno y diferenciado, pero son más duros de lo que me gustaría, y nos ofrecerán multitud de posibilidades tanto a la hora de jugar como usando programas de edición de fotos y vídeo y mucho más. En este sentido es un ratón muy adecuado para juegos RPG y Rol.
En ambas partes tenemos dos aletas inferiores para apoyar los dedos en cada extremo de la mano, su configuración es más estética que el Drakonia I y están mejor situadas.
La parte inferior del ratón es bastante normal, el fabricante ha colocado cuatro pies de teflón para deslizarse sobre una superficie con facilidad, y la caja central es donde se aloja el sistema de ajuste de peso, el cual viene con cinco pesos extraíbles de 5,6 gramos cada uno. En el centro de la parte inferior está el sensor, en este caso es un modelo PixArt PMW 3360, que es capaz de trabajar con una sensibilidad de hasta 15.000 DPI, con una velocidad de muestreo de 250 IPS y una aceleración de 50G. Las características de este sensor se completan con un ultrapolling de 1000 Hz y una distancia de levantamiento de 2 mm. El sensor viene configurado de fábrica en 600/2.400/4.800/7.200/10.000/15.000, aunque esto se puede personalizar desde el software.
Tenemos mejoras muy sustanciales en este Sharkoon Drakonia II respecto del Sharkoon Drakonia I, por ejemplo, la introducción de un sensor óptico en lugar de láser, y la posibilidad de ajuste en peso del equipo. Muy buen trabajo de Sharkoon aquí.
Claramente se trata de un ratón para su uso con la mano derecha, con una ligera caída hacia la derecha para mejorar la pulsación del botón derecho y sus dos grandes aletas para apoyar el dedo pulgar y meñique, algo que da mucha comodidad en los tres tipos de agarre, al menos en mi caso personal.
Sharkoon Drakonia II se conecta al PC mediante un cable USB trenzado, con un diseño bastante atractivo y que se ve muy robusto.
Aquí dejamos algunas imágenes del ratón con su iluminación LED RGB activada. Cuenta con multitud de modo de animación, los cuales serán configurables mediante el software, que luego veremos.
Como ya adelantamos, en esta experiencia de uso vamos a ver las diferencias entre la versión anterior y esta, así determinaremos la evolución de esta serie gaming de Sharkoon.
Comenzaremos con el aspecto externo para identificar algunas diferencias. Lo primero que llama la atención es la configuración de las aletas, la marca ha optado en el nuevo modelo por dos elementos laterales más largas, aunque de menor extensión y ha suprimido el botón inferior. Gracias a esto el apoyo de los dedos es más correcto y completo, y no vamos a pulsar accidentalmente ese botón, además a aleta derecha cobra utilizad en la versión II, mientras que en la I prácticamente no servía para nada.
Obviando el apartado estético, la distribución de botones superior es más accesible y completa en este nuevo Drakonia, con botones independientes en lugar del switch anterior.
La nueva versión incluye además 6 botones laterales para añadir funcionalidad en juegos RPG (o cualquiera), estos botones tienen buena accesibilidad, sin ser excelente debido a que son muchos, y un poco duros, hasta el punto de necesitar sujetar el ratón por la derecha para pulsarlo. La rueda del Drakonia II también está más escondida, así que hay que tener cuidado al usarla para no pulsar accidentalmente los botones principales.
Podemos decir en general, que los switch del nuevo modelo son mejores, con mejor tacto y un clic algo más denso para que no se pulsen accidentalmente, así que en mi opinión es un salto hacia adelante.
Describiendo un poco la sensación del agarre del Sharkoon Drakonia II, podemos decir que, a pesar de su tamaño es un ratón muy versátil, y esto se debe a las dos aletas laterales.
Para manos grandes el agarre de tipo palma es muy bueno, aunque las aletas nos obligan a tener los tres dedos principales encima del ratón para asegurar comodidad y buen desplazamiento. Pero el agarre de punta y en garra también se hace posible gracias a estas aletas, apoyando ahí nuestros dedos pulgar y meñique. La experiencia en juegos RPG y Shooter ha sido de primera, aunque la disponibilidad de 12 botones es más últil para los primeros.
La superficie inferior ha disminuido y se ha añadido la personalización en peso, que nos permite elegir el que mejor nos venga. Esto hace un equipo más ligero y manejable en general.
Por parte del Sharkoon Drakonia I, destacamos su rápido clic con botones muy tiernos, que a muchos les gustaré y a otros no. En este caso la aleta derecha no permite el apoyo del meñique, así que su agarre ideal es el de palma, con buen manejo con el de punta y con alguna que otra dificultad para el agarre de tipo garra. Notamos un ratón menos versátil y mucho más pesado en los movimientos, con sus 150 gramos de peso.
Otra cosa muy importante a tener en cuenta es que esta versión tiene un sensor láser Avago ADNS-9500, y ya sabemos que la adaptabilidad no es su punto fuerte para un ratón gaming.
En mi caso al menos, veo una evolución sustancial en este nuevo Sharkoon Drakonia II, mejor agarre, más rápido, sensor óptico, y clics menos sensibles. Una cosa que sí echamos en falta son los laterales de goma, que sí tiene el Drakonia I, y una rueda algo más prominente para su mejor uso. En base a esto, cada cual que adapte esta opinión y descripción hacia sus preferencias de agarre y tacto.
Es hora de probar este sensor óptico y ver si sus prestaciones son las esperadas. Repasaremos en nuestras pruebas, la aceleración, skipping, tracking y el desempeño en superficies.
El software es fácil de instalar y de usar. Hay tres pestañas principales para la configuración y cinco perfiles personalizables, junto con un perfil predeterminado de fábrica. La pestaña de control principal es para personalizar lo que hace cada botón. Cada número te muestra qué botón estás cambiando. Para cambiar un botón, haga clic en el texto del botón actual, y aparecerá un menú con muchas opciones que van desde hacer clic hasta los botones de medios y copiar / pegar. Si no te gusta ninguna de estas opciones, puede vincular una clave específica, como la tecla «R» para recargar o asignar una macro.
Justo al lado de la configuración de botones tenemos distintos parámetros para el comportamiento de ratón: aceleración del puntero, velocidad del scroll y del doble clic. En este caso no tenemos opción para la asistencia al movimiento, por lo que las prestaciones son las que da el sensor, sin ayuda de software.
En la pestaña siguiente, encontraremos la configuración de DPI para los seis perfiles que se pueden cargar. La pestaña de control de color es para cambiar el color del sistema de iluminación, qué tan intensa es la iluminación y qué tan rápido cambia. Cuando haya terminado de elegir todos sus ajustes, puedes guardar su configuración en uno de los cinco perfiles, y finalmente aplicar los cambios con las opciones de la zona inferior.
Para nosotros este Sharkoon Drakonia II es una evolución necesaria del antiguo Drakonia, con un aspecto renovado y si cabe, aún más agresivo que el anterior, y con un apartado de iluminación espectacular y que encaja con la estética del equipo.
Este ratón es muy recomendable para su uso en juegos RGP y Rol, en donde la cantidad de controles es grande y necesitamos un agarre cómodo y versátil. La postura ideal es la de un agarre de tipo palma y garra, pero gracias a las aletas externas también es cómodo en el agarre de tipo punta.
El sensor óptico Pixart PMW 3360 también era muy necesario tras la experiencia con el láser, y que conforma un ratón gaming muy asequible y de buenísimas prestaciones, sin nada de aceleración y sin necesidad de asistencia por software.
Aprovecha para visitar nuestra guía de los mejores ratones del mercado
Contamos además con 12 botones programables de forma sencilla mediante su software, fácil de usar y muy completo. El tacto de estos botones se mejora respecto a la versión anterior con un ligero aumento en su dureza y un panel lateral para añadir funciones extras en nuestros juegos. Bajo nuestra experiencia, estos botones son algo duros y la rueda está demasiado escondida entre los botones, pero con tras varias horas de uso, la experiencia mejora.
Este Sharkoon Drakonia II lo tenemos disponible en el mercado por un precio de 40 euros, una cifra bastante comedida para un equipo de grandes prestaciones, y un diseño único. Destacamos un acabado de calidad, con buenos plásticos y la posibilidad de configurar su peso. Por nuestra parte, un producto muy recomendable para jugadores RPG
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| + DISEÑO AGRESIVO Y ACABADOS DE CALIDAD | – BOTONES LATERALES ALGO DUROS |
| + PESO PERSONALIZABLE | – RUEDA MUY ESCONDIDA |
| + PRECIO | |
| + 12 BOTONES PROGRAMABLES | |
| + CAPACIDAD PARA LOS TRES AGARRES | |
| + IDEAL PARA RPG Y MANOS GRANDES |
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