Los smartphones o televisores pueden ser los productos más populares de Samsung, pero ciertamente no son los más rentables para la empresa. El gigante surcoreano ha anunciado sus estimaciones para el tercer trimestre del año, y los datos apuntan a que la empresa obtendrá el mayor beneficio operativo de toda su historia.
El negocio de memorias creció un 33% en ingresos, mientras que la división móvil disminuyó un 22%
Samsung alcanzará los 17,5 billones de won (15.800 millones de dólares), un 20% más que en el mismo período del año pasado. Según revelan, los ingresos también alcanzarán la cifra récord de 65 billones de won (57.300 millones de dólares), casi un 5% más que el año pasado.
La sorpresa de estos resultados radica precisamente en los productos que han sido los principales protagonistas de estos ingresos y beneficios. No fueron los smartphones, y de hecho en el segundo trimestre perdieron más cuota de mercado que cualquier otro fabricante con un Galaxy S9 y un Galaxy S9+ cuyas ventas no han sido tan buenas como se esperaba. Los televisores tampoco tuvieron tanto éxito.
En Samsung lo que brilla es la división de memoria
Este año la empresa se convirtió en el mayor fabricante de semiconductores en términos de ingresos, superando a Intel, y esa relevancia se ha mantenido y ha crecido. Sólo en el segundo trimestre, el negocio de memorias creció un 33% en ingresos, mientras que la división móvil disminuyó un 22% en ingresos. La tendencia ya había sido señalada por el gigante en el segundo trimestre del año, y se ha mantenido a lo largo de 2018.
Mientras que sus otras unidades de negocio siguen compensando su desempeño deficiente en el mercado de los ‘teléfonos inteligentes’, queda por ver si sus próximos dispositivos Galaxy podrán levantar el vuelo.
