Intel Optane que es y para que sirve

Os explicamos que es y para que sirve las nuevas memorias Intel Optane. Y es que en la búsqueda de ordenadores cada vez más rápidos, Intel presenta de forma constante nuevas actualizaciones de sus productos.

Una de las introducciones más dramáticas de la compañía últimamente ha sido su memoria Intel Optane, lanzada junto con la séptima generación de procesadores de la serie Core. Optane como tecnología e implementación es bastante confuso, incluso una vez que superas los requisitos básicos. Hemos elaborado este post con todo lo que necesitas saber sobre Intel Optane.

Qué es la memoria Intel Optane y cómo funciona

Optane es el término registrado de Intel para una nueva clase de módulos de memoria super-rápidos. El nombre se refiere específicamente a la memoria en sí, no a un formato individual, pero actualmente se comercializa principalmente en una tarjeta M.2, siendo compatible solo con placas base compatibles que pueden utilizar procesadores Intel de séptima y octava generación. La memoria destaca por lograr una latencia súper baja, tan rápida como 10 microsegundos.

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Intel Optane no es un tipo de memoria convencional de acceso aleatorio, o RAM, y no es una tecnología que se está utilizando para el almacenamiento convencional, al menos no a nivel del consumidor. Los módulos M.2 Optane de consumo llegaron inicialmente en capacidades de 16 GB y 32 GB, estos están diseñados para funcionar como un puente de memoria caché entre la RAM y el almacenamiento, lo que permite una transferencia de datos más rápida entre la memoria, el almacenamiento y el procesador.  Podemos imaginar Optane como sobrealimentador para un motor de gasolina convencional, no es un componente necesario para que el motor funcione, y no reemplaza ninguna pieza existente, solo hace que todo funcione más rápido.

Intel Optane es básicamente una versión de próxima generación de la tecnología de respuesta inteligente (SRT) de Intel, que podría usar SSD baratos y de baja capacidad para almacenar datos en caché para discos duros convencionales más lentos y de gran capacidad. La diferencia es que Optane usa memoria fabricada y vendida por Intel, junto con componentes especiales de hardware y software en placas base compatibles.

Si bien la marca Optane actualmente se limita a los módulos de memoria caché súper rápidos M.2 en el lado del consumidor, Intel ya está vendiendo unidades de almacenamiento Optane para centros de datos corporativos. Estos están más cerca de los discos SSD convencionales, llevando esa memoria rápida y cara directamente al componente de almacenamiento de los servidores de misión crítica. En este momento, la unidad de almacenamiento de Optane 905p de clase industrial monta 960 GB de almacenamiento directamente en una ranura PCI Express, y esas unidades se venden por más de mil dólares. Optane 800p puede ser el impulso a la implementación de esta tecnología a nivel doméstico, pues nos ofrece módulos de hasta 118 GB con los que poder mantener cacheadas un gran número de aplicación y acelerar en gran medida un disco duro mecánico.

La siguiente tabla resume las principales características de los diferentes modelos basados en Intel Optane:

Beneficios de Intel Optane

Un módulo de memoria Intel Optane a una placa madre 7th-core Core puede acelerar el rendimiento general en un 28%, con un 1400% de aumento en el acceso a datos para un diseño de disco duro, además de ofrecer dos veces la capacidad de respuesta de las tareas cotidianas.

Estas afirmaciones se basan en los benchmarks SYSmark 2014 SE y el PCMark Vantage HDD Suite, por lo que son bastante confiables. Dicho esto, el hardware real utilizado para probar esas cifras apenas es líder en la industria: Intel utilizó un procesador Core i5-7500 de rango medio, 8 GB de memoria DDR4-2400 y un disco duro convencional de 1TB con una velocidad de 7200 RPM. Ese es un sistema decente, pero sin el complemento de Optane casi todo lo que tenga un SSD instalado lo superará en cuanto a acceso de almacenamiento y receptividad.

Anandtech realizó una serie de pruebas comparativas más intensivas utilizando la misma prueba SYSmark 2014. Descubrieron que combinar un módulo de memoria Optane, con un disco duro giratorio convencional podría aumentar el rendimiento general del sistema y, en algunos casos, superar a un SSD, pero sigue siendo preferible usar una configuración simple de SSD frente a un disco duro más un módulo de memoria Optane, especialmente si puedes permitirte un SSD de 1TB o más denso.

Las pruebas dejan claro que un disco duro junto a Optane apenas supera la velocidad de un SSD convencional, el cual se volverá mucho más lento una vez que la capacidad de Optane se haya saturado y ya no pueda guardar más datos a modo de cache. Por el precio de un disco duro de 1 TB junto a un módulo Optane de 32 GB podemos comprar un SSD de 512 GB, capacidad más que suficiente para la mayoría de los usuarios.

¿ Merece la pena Intel Optane ?

Como los módulos de Optane son complementos de rendimiento bastante caros, aproximadamente 37 euros para la tarjeta de 16GB M.2 y 60 euros para la versión de 32GB, en el momento de escribir esto. La segunda generación de Optane, conocida como Intel 800p ofrece capacidades más amplias, pues ya es posible adquirir unidades de 128 GB y 256 GB por unos precios de 130 euros y 200 euros de forma aproximada. Esto sigue siendo un coste por GB mucho más alto que los SSD basados ​​en memoria NAND, este es el principal inconveniente de Optane y hará que su adopción sea bastante lenta. Actualmente podemos comprar un SSD SATA convencional de 1 TB por 200 euros o menos.

A todo ello hay que tener en cuenta algunas cosas como que necesitarás el último procesador de séptima u octava generación y una placa base compatible para aprovecharlo. En segundo lugar, aunque Intel está promocionando el rendimiento para más o menos cualquier situación y aplicación, las mejoras más dramáticas provienen de un sistema con un disco duro y no un almacenamiento SSD, el cual es cada vez más popular.

Necesitarás una placa madre compatible, pero esa placa base también necesita un chipset Intel que admita Optane y al menos una ranura de expansión M.2. Hay una lista de placas compatibles de ASUS, Asrock, Biostar, ECS, EVGA, Gigabyte, MSI y SuperMicro. Su tamaño varía desde mini-ITX hasta ATX, por lo que los creadores de sistemas tienen muchas opciones. En general Optane funciona con el chipset Z270 y todos los chipsets de la serie 300. Actualmente, el componente de software de Optane solo es compatible con Windows 10.

Palabras finales y conclusión acerca de Intel Optane que es y para que sirve

Nuestra conclusión es que Intel Optane no merece la pena para el usuario convencional, al menos con los bajos precios que manejan los SSD en la actualidad. Por mucho que usemos Optane, vamos a seguir teniendo las limitaciones de un disco duro convencional, el cual será tan lento como siempre una vez que la caché de Optane se haya saturado y no haya espacio para guardar más datos. Un SSD hará nuestro PC mucho más rápido en general, y tendrá un consumo de energía inferior al que tendría con Optane junto a un disco duro mecánico.