Apple lanzó el nuevo equipo MacBook Pro 2018 con el nuevo procesador Intel Core i9, aumentando el número máximo de núcleos del sistema de cuatro a seis para ofrecer un rendimiento sensacional a los usuarios. Sin embargo, las primeras pruebas mostraron que el equipo tiene un serio problema de sobrecalentamiento, lo que provoca una fuerte bajada en el rendimiento del procesador.
Los usuarios de este nuevo MacBook Pro 2018 comenzaron a informar sobre un rendimiento reducido respecto a la versión de 2017 con un procesador de cuatro núcleos, algo debido a los problemas relacionados con el estrangulamiento térmico del nuevo procesador Core i9 de seis núcleos.
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Tras casi una semana de silencio, Apple ha lanzado una actualización de firmware que ofrecerá a los usuarios mayores niveles de rendimiento bajo altas cargas térmicas. Apple ha achacado el problema a un error en su sistema de gestión térmica, donde una clave digital faltante causa que las velocidades del reloj del procesador se reduzcan innecesariamente. La solución está disponible en macOS High Sierra 10.13.6, que ya está disponible para descargar.
Está por ver si el nuevo MacBook Pro funcionará más o menos rápido gracias a esta nueva actualización del sistema operativo. El ruido del ventilador podría verse afectado por esta actualización, si Apple ha agregado un nuevo perfil de velocidad del ventilador para el sistema. También surge la preocupación sobre si Apple permitirá que el procesador alcance mayores temperaturas de funcionamiento, algo que puede afectar de forma negativa a la vida útil del equipo.
[irp]Esperemos que el nuevo MacBook Pro de seis núcleos sea capaz de ofrecer su máximo rendimiento con esta nueva actualización de software.
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