AMD y Bethesda tienen un acuerdo estratégico para promocionar su serie de procesadores y tarjetas gráficas en juegos como Fallout 4, DOOM, Dishonored 2 o Wolfenstein 2: The New Colossus, y precisamente este es el primer juego que realmente se ve beneficiado con este acuerdo, ofreciendo una ventaja de rendimiento con las tarjetas gráficas de AMD por sobre las de NVIDIA.
El videojuego recientemente se actualizo con un parche que solucionaba algunos problemas de estabilidad, sobre todo con la serie 10 de tarjetas gráficas de NVIDIA, que al aplicar V-Sync hacia que se reiniciara el ordenador (si, asi como lo oyen) entre otros problemas.
Resulta que este parche también trajo consigo algunos beneficios ‘ocultos’, como una mejora en el rendimiento con las tarjetas gráficas de la serie RX VEGA, que aumentan en más de 20% en este videojuego. Esto amplia la ventaja que ofrece la RX VEGA 64 por sobre la GTX 1080 en Wolfesntein 2: The New Colossus, como se puede apreciar en el gráfico, con parche y sin parche.
Como se ve, las mejoras de rendimiento en las tarjetas NVIDIA es prácticamente nula. No sabemos si esto se debe a que VEGA tiene un mayor margen de optimización que las gráficas NVIDIA, o si Bethesda está dando alguna especie de ventaja adicional a AMD por su acuerdo estratégico.
Con los últimos parches también hemos visto que la arquitectura Polaris (RX 500 & RX 400) también recibió una mejora del 10%, mientras que las gráficas basadas en Pascal apenas un 3%.
De todas maneras, Wolfenstein 2 desarrollado en base a ID Tech 6 no es el juego mejor optimizado que hemos visto, cayendo demasiados los FPS en según qué niveles, muy distinto a lo que fue DOOM en 2016.
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