Navegar por internet ya forma parte de nuestro día a día. Lo hacemos con total normalidad, en cualquier momento, en cualquier lugar y desde una variedad de dispositivos. Es algo ya casi natural, salvando todas las distancias. Sin embargo, para que podáis leer este post, es necesario que todas una serie de tecnologías funcionen de la manera adecuada. Si no es así, entonces se producen fallos, siendo el Error 404 uno de los más habituales. Hoy te desvelamos qué es, que consecuencias tiene y cómo resolver este error con el que, seguro, te has topado en más de una ocasión.
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Algo tan cotidiano como hacer una consulta en Google, leer este post o navegar por Internet en general, requiere de una triple conexión entre el servidor donde se encuentra alojado el contenido que queremos visitar, un cliente y el navegador web. Dado que estás leyendo este artículo en Profesional Review, podemos deducir que esa conexión ha funcionado sin problema alguno. Es decir, todo va bien si en nuestro navegador vemos la información a la que queríamos acceder. Sin embargo, a lo largo de ese proceso de conexión se pueden producir diferentes fallos que han sido catalogados con una serie de códigos, siendo el Error 404 el fallo más habitual.
El Error 404 es un código de estado enviado desde el servidor hasta el navegador para informarnos de que la página solicitada no existe o no ha podido ser encontrada en el servidor.
De ello se deduce que la conexión con el servidor SÍ funciona correctamente, en tanto que ha devuelto el error del que estamos hablando. Por lo tanto, no debemos asociar el Error 404 con un problema de comunicación,en este caso, con el servidor web.
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Tal y como ya habrás imaginado, el Error 404 no ha sido así denominado de manera casual ni aleatoria, sino que sus tres cifras tienen un significado individual determinado que, en conjunto, nos permite conocer de qué se trata.
En este sentido, el 4 hace referencia a que la página web o el recurso que andábamos buscando ya no existe o, al menos, no ha podido ser encontrado; el 0 hace referencia a un error de sintaxis; y, finalmente, el 4 se refiere al problema concreto experimentado y que es diferente al resto de problemas, de ahí que también exista el Error 402, el Error 401, el Error 403, etcétera.
Si cuentas con un blog o una página web que devuelve a los usuarios el Error 404, debes saber que las consecuencias no son positivas, por lo que deberás solucionarlo lo antes posible.
En primer lugar, los usuarios podrán dejar de confiar en tu página web, es decir, podrías sufrir una pérdida de credibilidad ya que cuando desean acceder a información importante para ellos, les resulta imposible.
Pero además, esto también afecta de forma negativa a tu posicionamiento web; a Google no le gustan nada este tipo de fallos y te hará caer en los resultados de búsqueda, lo que se traduce en pérdida de visibilidad, de credibilidad, de clics, de relevancia, de ingresos…
En consecuencia, queda claro que el Error 404 es un fallo al que debemos poner solución de inmediato con el fin de que no aparezca a nuestros usuarios cuando navegan a través de nuestra web o cuando desean acceder a alguno de nuestros contenidos.
Así, para detectar este error, podemos utilizar herramientas gratuitas como:
La solución del Error 404 no es compleja, y viene relacionado con el motivo que lo ha ocasionado. En este sentido, lo más habitual es que se deba a que la página web ya indexada en los buscadores ha sido eliminada. Se trata de un fallo leve ante el que tenemos dos soluciones. La ideal es sustituir el contenido de esa página por otro contenido y hacer un redireccionamiento, pero también podemos esperar a que Google (y otros buscadores) pasen de nuevo por la página, se percaten de que ya no existe, y dejen de mostrarla.
Hay ocasiones en las que el Error 404 se muestra al pulsar un link externo a una web que ya ha sido eliminada. La solución es sencilla: sustituye ese enlace por otro o, si no es posible, simplemente elimínalo.
Otro causa de aparición de este frecuente error es un enlace mal escrito. Si se trata de un link interno, basta con reeditar el enlace y corregirlo, pero si se trata de una web externa que trata de enlazar a la nuestra, entonces deberemos añadir la URL mal escrita a la configuración de nuestro WordPress, así como hacer un redireccionamiento 301 al sitio correcto.
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Al igual que en el caso anterior, si has cambiado el nombre a una página y olvidaste redireccionar hacia la nueva, basta con hacer esa redirección 301 que ya hemos citado.
[irp]Y ahora que ya sabes mucho más sobre las causas que originan el Error 404, cómo detectarlo y también cómo solucionarlo de manera sencilla y efectiva, acuérdate de nosotros y no te olvides de avisarnos en el caso de que te topes con alguno de ellos en Profesional Review.
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