Tras analizar hace unos días a la AMD Radeon RX VEGA 56 llega el momento de presentaros a su hermana mayor: la AMD Radeon RX VEGA 64 se viste de gala para liderar el mercado de tarjetas gráficas AMD con sus 8GB HBM2. ¿Merecerá la pena la adquisición de esta tarjeta gráfica?
¡Te lo explicamos con nuestro análisis exhaustivo! ¡Calienta unas palomitas y coge tu refresco favorito ( Bien fresquito por estas fechas 😉 ), qué comenzamos!
Agradecemos la confianza a AMD España por la cesión del producto para su análisis. ¡Allá vamos!
AMD nos presenta su tarjeta gráfica en una caja de color negro y con detalles en rojo. Un diseño elegante y que rápidamente se ensucia (como se puede apreciar), ya que antes de llegar a nosotros ha pasado por otras manos 😉
Mientras que en la zona trasera nos avisa que necesitaremos una fuente de alimentación de 750W con dos conectores PCI Express de 8 pines.
Una vez abrimos la caja nos encontramos con el siguiente bundle:
La tarjeta gráfica AMD Radeon RX VEGA 64 viene diseñada con la nueva arquitectura de tarjetas gráficas VEGA 10 que se fabrica en una litografía de 14 nm FinFET y su DIE tiene un tamaño de 486 mm2. Mientras que lo complementan un total de 256 unidades de texturizado (TMUs) y 64 unidades de rastrerizado (ROPs).
La versión RX VEGA 64 viene con el chip completo y sin ninguna limitación de fábrica. Su frecuencia del reloj base trabaja a una velocidad de 1247 MHz mientras que a modo turbo sube hasta los 1546 MHz. Una mejora bastante palpable comparando con las frecuencias que trae de serie su hermana menor.
La AMD Radeon RX VEGA 64 viene equipada con un par de stacks de memoria HBM2 con una interfaz de 2048 bits y una frecuencia de 484 GB/s. Las mejoras en rendimiento de memoria en sí respecto a HBM y GDDR5X son bastantes amplías, pero ¿Serán suficientes los 8GB HBM2 vs los 11 GDDR5X de la GTX 1080 / 1080 Ti?
La tarjeta gráfica cuenta con unas dimensiones de 280 x 127 x 40 mm y un peso de superior a los 1090 gramos. Un tamaño perfecto para instalar en cualquier gabinete de gama media/alta del mercado.
Respecto a su refrigeración cuenta con un disipador blower idéntico al de la AMD Radeon RX 480 que tuvimos en su día. Como ya hemos expresado creemos que para una ocasión especial, se podría haber optado por un disipador de mayor calidad, que aunque apenas se escucha en reposo… tanto plástico no ayuda a refrigerar.
Adicionalmente cuenta con un selector para cargar una de las dos BIOS que trae de serie. Esto es bastante útil, si te gusta trastear con BIOS modificadas o en el caso de que se te corrompa una de ella, podrás cargar la segunda de backup.
Para los más curiosos os dejamos unas vistas del backplate trasero.
Como se puede apreciar en las imágenes, la tarjeta gráfica ocupa sólo 2 slots en su instalación en nuestro ordenador. Por lo que no tendremos ningún problema en instalarlo en cualquier chasis del mercado.
Para su alimentación cuenta con dos conexiones de alimentación de 8 pines cada una de ella. AMD recomienda la utilización de una fuente de alimentación de 750W de calidad. Por este motivo os recomiendo que leáis nuestra guía de las mejores fuentes de alimentación del momento.
Por último, comentaros que cuentea únicamente con señales digitales DisplayPort y HDMI 2.0B, concretamente:
| BANCO DE PRUEBAS | |
| Procesador: | Intel Core i9-7900X |
| Placa Base: | Asus TUF X299 Mark 1 |
| Memoria: | 32 GB DDR4 Corsair Dominator SE |
| Disipador | Corsair H100i V2 |
| Disco Duro | SSD Samsung 850 EVO. |
| Tarjeta Gráfica | AMD RX VEGA 64 8GB HBM2 |
| Fuente de Alimentación | Corsair AX860i |
Para benchmarks usaremos los siguientes títulos:
Todas las pruebas han sido pasadas con los filtros al máximo excepto que indiquemos lo contrario. Para tener un rendimiento adecuado hemos realizado tres tipos de pruebas: la primera es la más común a Full HD 1920 x 1080, la segunda resolución que está dando el salto a los gamers 2K ó 1440P (2560 x 1440P) y a los más entusiastas con 4K (3840 x 2160). El sistema operativo que hemos utilizado ha sido Windows 10 Pro 64 bit y los últimos drivers disponibles desde el website de AMD.
En primer lugar, la mejor calidad de imagen posible. El valor más importante para nosotros es la media de FPS (Fotogramas por segundo), a mayor número de FPS más fluido irá el juego. Para diferenciar un poco la calidad, os dejamos una tabla para valorar la calidad en FPS, pero también contaremos con los Fps mínimos en las pruebas que fueron así posibles:
| FRAMES POR SEGUNDOS | |
| Frames por Segundos. (FPS) | Jugabilidad |
| Menos de 30 FPS | Limitada |
| 30 ~ 40 FPS | Jugable |
| 40 ~ 60 FPS | Buena |
| Mayor de 60 FPS | Bastante Buena o Excelente |
En esta ocasión, lo hemos reducido a tres pruebas, ya que consideramos que son más que suficientes como pruebas de rendimiento sintéticas.
Hemos decidido dar el salto a comprobar varios juegos de manera manual. ¿El motivo? Muy sencillo, queremos dar una visión mucho más realista y abarcar pruebas con juegos acordes a la actualidad. Ya que realizamos un esfuerzo, que sea en consonancia al nivel de la página web y al de nuestros lectores.
Nota: Recuerda que el overclock o manipulación, conlleva un riesgo, nosotros y cualquier fabricante no nos hacemos responsables de un uso indebido, utiliza la cabeza y hazlo siempre bajo tu responsabilidad.
La aplicación AMD Radeon ha mejorado durante estos años muchísimo. Además de ser muy estable nos ofrece configuración y optimización en cada uno de los juegos, modificar cualquier opción e incluso grabar en directo lo que está mostrando en una venta o escritorio.
Hemos optado por hacer un overclock manual, ya que esta vez el perfil «Turbo» no ha mostrado ninguna mejora, es más, desmejoraba según el escenario. Hemos hecho todo el overclock manual, ajustando una nueva curva al ventilador y hemos subido a 1800 MHz en el core y las memorias hasta los 1010 MHz. Se podría haber apurado un poco más, pero las temperaturas no eran buenas y comenzaba hacer throttling cuando queríamos levantar aun más la frecuencia. Estamos seguro que con un buen disipador o un buen bloque se puede sacar mucho provecho a esta tarjeta gráfica.
Podéis ver las grandes diferencia que ofrece respecto a su versión de stock, aunque el consumo se desmadra…
Las temperaturas de la AMD Radeon RX VEGA 64 han sido predecibles en algunos escenarios por venir con unas velocidades muy altas. En reposo hemos obtenido 44ºC y que sube hasta los 82ºC a máxima potencia. Cuando aplicamos overclock cambie al panorama ya que en reposo tenemos temperaturas parecidas: 43 ºC pero a máxima potencia alcanza los 91 ºC, que podemos medio arreglar con un ajuste liviano de la curva del ventilador dejándolo en 81ºC.
El consumo es de todo el equipo al completo*
El consumo es el apartado a mejorar claramente en futuras revisiones. Obtenemos 81 W en reposo y 397 W a máxima potencia con velocidades de stock (picos de 465 W). Que suben drásticamente cuando aplicamos un overclock de 1800 MHz en el núcleo y 1030 MHz en las memorias, dejando un consumo de 119W en reposo y 530W a máxima potencia (Picos de 565,9W).
La AMD Radeon RX VEGA 64 nos parece una gran tarjeta gráfica ya que tiene todo lo que se le puede pedir a un buque insignia: potencia, nuevas tecnologías (se agradece), memorias HBM2 de altas prestaciones y un software que te permite overclockear fácilmente la tarjeta gráfica.
En nuestras pruebas hemos conseguido grandes resultados tanto en Full HD, 2K y 4K. Cuando hemos subido el núcleo gráfica a 1800 MHz y las memorias a 1010 MHz hemos tenido una ganancia bastante interesante, pero las temperaturas y sobretodo el consumo se desmadraban. Estamos seguro que cuando afinen los drivers veremos una mejora muy interesante 😉
La grandes pegas que ofrece esta tarjeta gráfica es que el consumo es muy alto y el modelo de referencia es silencioso pero se caliente bastante. Si obviamos estos datos nos parece una opción interesante para aquellos que quieren una buena tarjeta gráfica y que le dure unos años a gran nivel.
Te recomendamos la lectura de las mejores tarjetas gráficas del mercado
Su precio en tienda depende mucho del modelo a elegir. En España encontramos este mismo modelo por 615 euros, mientras que el modelo «Liquid Cooling» que se diferencia por llevar un kit de refrigeración todo en auno (AIO) se eleva hasta los 719 euros. Nos parece unos precios «algo altos» y que esperemos que sobre la marcha se va ajustando más a su rival más directo (Nvidia GTX 1080).
Nuestro consejo es que esperéis a que salgan los modelos personalizados (Custom), según tenemos entendido en cosa de unas semanas lo tendremos disponibles en tiendas online. Actualmente nos parece una compra más lógica comprar la AMD Radeon RX VEGA 56 que con un poco de overclock ya alcanza el mismo rendimiento que la AMD RX VEGA 64 de stock.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| + MEJORAS IMPORTANTES A NIVEL DE TECNOLOGÍAS. | – CONSUMO MUY ELEVADO |
| + MUY BUEN RENDIMIENTO. | – TEMPERATURAS |
| + SILENCIOSA. | – PRECIO ALGO DE ALTO SALIDA |
| + CAPACIDAD DE OVERCLOCKING. |
Y tras evaluar detenidamente tanto las pruebas como el producto, Profesional Review le otorga la medalla de oro:
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