Para ganar velocidad en el PC, un elemento de crucial importancia es aumentar la memoria RAM de la máquina. Sin embargo, cuando vamos a comprar la memoria de nuestro ordenador, nos encontramos con muchas marcas y modelos a disposición, por lo que nos encontramos perdidos.
Índice de contenidos
Cómo elegir la memoria RAM correctamente
¿Qué modelo elegir? ¿DDR2, DDR3 o DDR4? ¿Con qué velocidad? ¿Existe alguna diferencia entre un modelo y otro? Este post fue escrito justamente para explicar las características de cada uno de estos modelos, desde las antiguas memorias SDR-SDRAM (que se encuentran en uso aún hoy) hasta las nuevas DDR4.
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Antes de hacer una actualización en el micro añadiendo más memoria, necesitas saber qué son las memorias DDR, DDR2, DDR3 y DDR4. Estos son tipos de memoria SDRAM, que hacen el trabajo sincronizado, lo que significa que utilizan una señal de reloj para sincronizar sus transferencias.
¿Qué significa DDR?
DDR significa Double Data Rate o Doble Tasa de Transferencia, y memorias de esta categoría transfieren dos datos por pulso de reloj.
Debido a esta característica, estas memorias son etiquetadas con el doble del clock real máximo al que pueden trabajar. Por ejemplo, las memorias DDR2-800 trabajan a 400 MHz, las memorias DDR2-1066 y DDR3-1066 trabajan a 533 MHz, las DDR3-1333 trabajan a 666,6 MHz y así sucesivamente. Por eso no te sorprendas si programas como CPU-Z indican un nivel de frecuencia de la memoria por la mitad.
La memoria es, sin duda, uno de los componentes que tiene mayor influencia en el rendimiento general del equipo. Esta es responsable de almacenar los datos temporalmente, mientras que el procesador calcula y realiza las tareas ordenadas por el usuario.
Generalmente, las personas piensan que solo la cantidad de gigabytes que la memoria posee va a dejar al micro más rápido, pero poco saben ellos que el clock (también llamado frecuencia) y latencia en los que funciona la memoria no hace diferencia en el rendimiento del micro.
Para tratar de evitar algunos de los problemas de la constante pérdida de rendimiento de las máquinas actuales, una de las soluciones más importantes y económicas es la compra de más memoria RAM para el equipo.
Tipos de memoria
A continuación os dejamos las memorias desde las más antiguas hasta las más actuales. Así aprendemos un poco de arqueología de hardware.
Memoria SDR-SDRAM
Esta fue la primera memoria capaz de trabajar sincronizada con los ciclos de la placa base, sin tiempos de espera. Este tipo de memoria superaba a las antiguas memorias EDO (Extended Data Out) y FPM (Fast Page Mode) por su capacidad de dividir los módulos de memoria en varios bancos, alojando hasta ocho bancos en un módulo DIMM (Dual Inline Memory Module).
Como el propio nombre lo dice, son capaces de hacer solo una transferencia por ciclo, lo que en los días de hoy puede parecer poco, pero en la época en que eran estándar todos se sentían orgullosos de tener módulos con la denominación de «PC-100» instalados en la máquina.
Incluso presentes en algunos equipos todavía hoy en día, son muy difíciles de encontrar a la venta, pues ya no se fabrican.
DDR-SDRAM (Double Data Rate)
Las memorias DDR superan a las memorias SDR por su capacidad de realizar dos transferencias por ciclo, lo que no necesariamente dobla la velocidad efectiva (debido al tiempo de acceso inicial), pero casi llegan a hacerlo.
Esta característica es posible gracias a la inclusión de circuitos adicionales, responsables de leer/escribir los datos dos veces por ciclo. Con excepción de la modificación, las pistas tanto de los módulos de memoria como la tarjeta base permanecieron sin cambios, así como las demás características, lo que contribuyó al bajo precio y a la popularización de este modelo.
En los programas de análisis de hardware, como CPU-Z, la velocidad efectiva aparece con la mitad del valor real debido a la transferencia doble, entonces un modelo DDR-400 va a ser mostrado como 200 MHz.
Incluso con aliento para ejecutar los sistemas operativos más actuales, las memorias DDR salieron de escena para que llegue la generación DDR2. Todavía es posible encontrar modelos a la venta en tiendas especializadas, pero a un precio muy elevado.
DDR2 (Double Data Rate 2)
La tasa de transferencia de datos por ciclo de reloj se duplicó de nuevo, y las memorias DDR2 son capaces de realizar cuatro transferencias por ciclo, pero manteniendo prácticamente el mismo tiempo de acceso inicial, lo que ofrece excelentes resultados en aplicaciones que necesitan de una gran cantidad de lectura secuencial, pero para aquellos que requerían solo algunos accesos aleatorios sacaban poco provecho de esa velocidad en relación a las memorias DDR.
En el uso diario de un equipo utilizamos varios tipos de aplicaciones con necesidades de memoria muy distintas, lo que hace que sea difícil de observar grandes diferencias de rendimiento en tareas cotidianas. En realidad, varios usuarios que han adquirido las placas base con socket DDR2 quedaron decepcionados en la época, pues en varias tareas una memoria DDR2-533 toma más tiempo para responder que una DDR-400.
Los módulos DDR2 aún se encuentran a la venta, y son capaces de ejecutar los sistemas operativos modernos sin cuellos de botella y con bastante fluidez.
Este modelo soporta la función ‘Dual Channel’, la cual permite que dos módulos idénticos instalados en la máquina obtengan una ganancia de rendimiento de hasta el 25%.
DDR3 (Double Data Rate 3)
El modelo DDR2-1066 fue el último en ser reconocido oficialmente por JEDEC (Joint Electron Device Enginnering Council), entidad certificadora de las memorias, y ya operaba a frecuencias muy altas (266 MHz multiplicado por 4).
A partir de ese punto, como ocurre con los procesadores, aumentar la velocidad de reloj de base aumentaba exponencialmente el consumo de energía y la generación de calor, así que la solución más efectiva fue doblar de nuevo la cantidad de transferencias por ciclo.
Este simple cambio en los circuitos de transferencia hace posible la creación de memorias de funcionamiento a 2133 MHz (266 MHz multiplicado por 8), lo que es una velocidad impresionante incluso para los estándares actuales.
Estos nuevos módulos trajeron también un sistema de calibración de la señal, lo que reduce la latencia sin comprometer el rendimiento.
La unión de una velocidad de transferencia mayor y un tiempo de acceso menor aún abastece tanto al mercado de los ordenadores domésticos como a los de alto rendimiento en los días de hoy, y la gran cantidad de chipsets y plataformas compatibles contribuyó a una caída drástica en los precios.
DDR4 (Double Data Rate 4)
Este nuevo tipo de memoria trae recursos interesantes, como una tensión más baja (por lo tanto un menor consumo de energía), las velocidades iniciales de 2133 MHz y llegando hasta 4266 MHz, además de un tiempo de acceso menor.
Samsung fue la primera de las grandes empresas en impulsar el nuevo estándar, mediante la validación de un ejemplar de 40 nm en 2009 y trayendo a la luz pública los primeros ejemplares en 2011, fabricados con una tecnología de 30 nm. Ahora mismo es el buque insignia de la memoria RAM, aunque con grandes esperanzas de ver un mayor rendimiento con DDR5 y DDR6 los próximos años.
La importancia de la RAM
RAM son las siglas de ‘Random Access Memory’ (Memoria de Acceso Aleatorio), ya que ella actúa como una especie de búffer entre el disco duro y la CPU. Los discos duros funcionan bien cuando trabajan con grandes bloques de datos, pero son extremadamente lentos para saltar de sector en sector o cambiar entre la escritura y la lectura. Si una CPU tuviera que procesar los datos directamente en el disco duro, habría un cuello de botella impresionante.
Es por eso que necesitamos de la RAM. Tener más memoria RAM significa que la frecuencia con la que tendrás que mantener tu ordenador leyendo o buscando datos en el disco duro será menor.
Una memoria más rápida significa que la CPU va a conseguir coger lo que necesita con mayor velocidad. Pero, claro, esto aún no responde cuánta RAM se va a necesitar, o las circunstancias en las que una RAM más rápida ayuda más.
¿Cuánta memoria RAM se necesita?
Lo que haces con tu ordenador es lo que determina si vale la pena o no tener una mayor cantidad de RAM. De todos modos, os recomendamos visitar nuestro tutorial sobrecuánta RAM necesito para responder con más precisión esta pregunta.
2 GB de RAM: el mínimo de los mínimos
Las tareas diarias básicas, como navegar por internet, editar documentos e incluso ver algunos vídeos en HD pueden ser realizadas por un sistema con solo 2 GB de RAM, siempre que no trates de hacer todo al mismo tiempo.
Las cosas van a funcionar, pero un poco más de RAM daría un salto tan grande en el rendimiento que, a los precios actuales, saltar a 4 GB es una inversión súper válida. A no ser en las netbooks, difícilmente se pueda encontrar actualmente en el mercado una máquina que solo venga con 2 GB.
4 GB: el punto de inicio correcto
Cuando se trata del equilibrio entre costo y rendimiento, 4 GB comienza a ser aceptable, al menos por el momento. En las tareas diarias comunes, muy rara vez llegarás siquiera a usar todo esto. A no ser que tengas el hábito de dejar decenas de pestañas llenas de contenido en flash abiertas en Chrome.
Los sistemas avanzados para juegos funcionan bien con 4 GB de memoria. También se puede usar sin problemas Photoshop o editores de vídeo pesados. A no ser que te dediques a la edición profesional de imágenes en alta resolución o al modelado en 3D a escala industrial, 4 GB es más que aceptable. Aunque siempre recomiendo tener un mínimo de 8GB en tu ordenador
8 GB: recomendado para trabajar
A no ser que estés usando tu equipo de alguna manera muy específica con la que realmente utilices todos los 8 GB de RAM, puedes deshabilitar el pagefile (paginación de memoria) completamente. Esto te dará un aumento sutil en el rendimiento, mejorará la seguridad del sistema y forzará menos el disco duro.
Sin embargo, si sueles trabajar todo el día con el ordenador y necesitas dejar abiertos gran cantidad de programas, esta cantidad de RAM te ayudará en tus tareas.
Consejos para elegir la memoria RAM correcta
Todos estos puntos son indispensables para elegir una memoria adecuada para tu equipo, los que tendrás que tener en cuenta al momento de comprarla.
Conocer el tipo de RAM
Al agregar más memoria en el equipo, el usuario debe estar atento a algunos factores importantes. El primero de ellos es el conocimiento del modelo de RAM que utiliza la placa base, pues se debe comprar un módulo de memoria que siga la misma especificación que la placa base.
De lo contrario, es muy probable que el nuevo módulo o la placa base no funcionen. Por ejemplo, una memoria DDR3 no funcionará en una máquina que solo soporta DDR2.
Existen programas específicos para descubrir cuál es el hardware instalado en tu máquina. Por ejemplo, para Windows, la aplicación PC Wizard realiza esta tarea. En Linux, estas informaciones pueden ser obtenidas a través del comando: «$ sudo lshw».
No mezclar marcas diferentes
También no se recomienda mezclar memorias de marcas y frecuencias diferentes, siendo que una placa base con módulos distintos puede funcionar de manera irregular, disminuyendo el rendimiento del sistema. Por lo tanto, solo trata de combinar módulos de un mismo modelo y fabricante en tu máquina.
En el caso de los usuarios que utilizan su PC para jugar, antes de reemplazar la memoria, una evaluación completa de la máquina es necesaria para determinar si agregar RAM realmente va a surtir el efecto esperado. En la mayoría de los casos, los jugadores están obligados a comprar un PC nuevo para ejecutar los juegos más nuevos del mercado.
Considerar velocidad y latencia
La latencia es el tiempo que el controlador de memoria debe esperar a que entre la solicitud de un dato y su efectiva entrega. Ella también es conocida como la Latencia CAS (Column Address Strobe) o timing.
Este número se expresa en pulsos de reloj. Por ejemplo, una memoria CL3 significa que el controlador de memoria necesita esperar tres pulsos de reloj hasta que el dato sea suministrado después de su solicitud. Con una memoria CL5, el controlador de memoria tendrá que esperar más: cinco pulsos de reloj. Por lo tanto, siempre se deben buscar módulos de memoria con la menor latencia posible.
Ya sabemos cuánta memoria se necesita para un ordenador, ahora solo falta saber qué tan rápido tiene que ser. Así, para tener los mejores resultados, debe ser tan rápida como la tarjeta base lo permita.
Los módulos de memoria también son valorados en los «timings», que son por lo general una secuencia de números, como 9-9-9-24. El más útil de estos números es el primero, conocido como ‘Latencia CAS’. Este es el número de ciclos de reloj que la RAM toma para acceder a una columna de datos (cuanto más pequeño, mejor) y, en conjunto con la velocidad de la RAM, puede ser utilizada para calcular el tiempo de respuesta. La fórmula es:
[php]1000 * CAS———————
(Velocidade da RAM ÷ 2)
[/php]Esta cuenta te dará el tiempo de respuesta en nanosegundos. Así, por ejemplo, un módulo de memoria DDR3-1866 HyperX de Kingston tiene una latencia CAS 11, mientras que la memoria G.Skill DDR3-1600 tiene una latencia de tan solo 6.
En este caso, la RAM menos rápida es la G.Skill, ya que responde en solo 7,5 ns, mientras que la HyperX, que tiene una velocidad mucho más alta descontando la latencia, toma 11,7 ns.
Esto significa que la memoria de G.Skill será más rápida en lo que respecta al acceso aleatorio, pero que la mayor velocidad de reloj de la memoria HyperX ofrece más ancho de banda, lo que la convierte en la mejor para operaciones en lote.
Normalmente hablando, querrás elegir la velocidad de reloj primero, y luego fijarte en la latencia CAS como criterio de desempate. Ten en cuenta que tiempos más reducidos significan precios más altos. Por ejemplo, la diferencia entre una CAS de 7 contra una de 8 es casi insignificante.
Las memorias DDR3 tienen latencias mayores que las memorias DDR2, y las DDR2 tienen latencias mayores que las memorias DDR. Esto significa que las memorias DDR3 tardan más pulsos de reloj para comenzar a transferir datos que las memorias DDR2.
Conocer el voltaje que soporta la placa base
Los voltajes de memoria son muy importantes en lo que respecta a la compatibilidad. El estándar para una memoria DDR3 es de 1.5 V, pero muchos módulos Dimm orientados a rendimiento requieren voltajes mayores para llegar a clocks mayores y latencias menores. Esto puede causar problemas debido a que no todas las placas base pueden reconocer la tensión correcta para estas memorias y van a suplir el 1,5 V estándar.
Si eso no es suficiente para mantener la memoria estable, el sistema no se va a incializar ni siquiera para que llegues a la BIOS y aumentes manualmente la tensión. Asegúrate de conocer las capacidades de la placa base antes de comprar módulos de memoria RAM con necesidades especiales de voltaje.
Limitaciones del sistema operativo
Los sistemas operativos de 32 bits tienen una limitación importante: solo pueden soportar hasta 4 GB de memoria. Puedes pensar que todo está bien, ya que 4 GB es actualmente la cantidad ideal de memoria RAM en la mayoría de los casos, pero la limitación es de memoria total, no solo de RAM.
[irp posts=»67201″]Algunos pedazos de la memoria RAM están reservados para periféricos PCI y ACPI, y la memoria de vídeo también se incluye en esta suma. Con las tarjetas gráficas que llevan un tiempo… por ejemplo las que calzan hasta 2 GB de memoria de vídeo, puede suceder que tengas 4 GB de RAM instalados en tu sistema, pero con menos de 2 GB en uso real. Por lo tanto, es recomendable que utilices una versión de 64 bits de tu sistema operativo.
Dual-Channel
Al darse cuenta de que los ordenadores estaban un poco lentos y que con solo aumentar la frecuencia no sería suficiente, la solución fue cambiar el controlador de memoria de las tarjetas base, o incluso, de los procesadores. Las memorias deben trabajar en parejas para poder utilizar la tecnología Dual Channel (doble canal), o sea, es necesario instalar dos módulos de memoria en la placa base.
Dual Channel es el recurso que permite al chipset o al procesador realizar una comunicación con dos canales de memoria simultáneamente. Las memorias trabajan simultáneamente y proporcionan el doble de la anchura de los datos del bus. El común de las memorias DDR es trabajar con la cantidad de 64 bits, pero con la característica Dual Channel, este valor se dobla y se encuentra en 128 bits.
Cantidad de slots
Estas son las entradas que están disponibles para módulos de memoria. Ten en cuenta esto para no comprar una cantidad por encima de lo que la placa base soporta. Existen varios programas que puedes encontrar en internet que van a apuntar a la compatibilidad de la tarjeta base y también la cantidad de ranuras que están disponibles.
La gran mayoría de las placas base cuentan con la tecnología Dual Channel, que permite que el sistema tenga un mejor rendimiento de trabajo en términos de paridad. O sea, dos módulos de 4 GB trabajarían mejor que solo uno de 8 GB.
La marca y el fabricante
La marca de la memoria es sinónimo de calidad y durabilidad, ya que cuanto más valioso sea el fabricante, mayor será la garantía de que el hardware adquirido funcionará con un mejor rendimiento. Básicamente, es posible dividirlas en dos grandes grupos: las marcas conocidas y genéricas.
Entre las principales empresas que fabrican memorias, podemos citar a G.Skill, Kingston y Corsair, ofreciendo cada una de ellas características propias. Normalmente, suelen tener una buena calidad, siendo recomendadas para equipos que necesitan bastante rendimiento, como las máquinas destinadas para juegos.
Las memorias RAM genéricas son más baratas en comparación con las originales, sin embargo, tienen origen dudoso, pudiendo comprometer el rendimiento general del PC. Por eso, los equipos destinados a la navegación, en la mayoría de los casos, ya son suficientes.
- Corsair: es la que tiene el precio más alto y más funcionalidades. Para algunos procesadores, como los fabricados por Intel, Corsair desarrolla módulos especializados para mejorar todavía más las tasas de transferencia. Esta marca es especialmente recomendada para los gamers, que necesitan el máximo rendimiento en sus máquinas.
- Samsung: memoria que tiene una buena relación calidad/precio, ya que también funciona de manera eficiente. Su principal uso es recomendado para equipos de trabajo que requieren de un buen hardware.
- Kingston: en su forma original, es una excelente memoria. Sin embargo, sufre del problema de «Powered By», lo que significa que Kingston vende su chipset (la parte del hardware) para las marcas genéricas. Esto hace que los usuarios compren módulos genéricos pensando que son de esta empresa. Por lo tanto, su uso está destinado para las máquinas más ligeras.
- Patriot: estas memorias están más orientadas para aquellos que buscan rendimiento, hay muchos modelos con una excelente performance.
- G.Skill: esta marca suele innovar bastante en cuestión de frecuencia, ya produjo memorias con más de 4400 MHZ, cuyos voltajes suelen ser de 1.2 v hasta los 1.65 v. Los precios no son bajos, pero como algunas otras marcas vale la pena por el rendimiento que sus memorias ofrecen.
Conclusión
Muchas veces cuando el ordenador está lento, esto puede ser solucionado con una actualización en la memoria RAM del dispositivo. Antes de hacer la compra de memoria RAM, debes prestar atención a ciertos detalles que pueden ser esenciales, como hemos visto en este artículo.
[irp posts=»90028″]En definitiva, es el perfil de cada usuario el que va a apuntar cuánta es la memoria necesaria para el equipo, ya sea para tareas básicas, para un uso profesional o para jugar.