Hemos cambiado de chip y en vez de probar material de gama media o alta, os queremos traer el análisis de una tarjeta gráfica de entrada enfocada a multimedia. Concretamente la Nvidia GT 1030 con 2 GB de memoria RAM con una gran variedad de ensambladores y refrigeración. ¿Será capaz de correr juegos la Gigabyte GeForce GT 1030 Silent 2GB GDDR5 LP? ¿Merece la pena los apenas 82 euros que vale?
No te preocupes, leyendo nuestra review resolverás todas tus dudas 🙂
En la portada de la Nvidia GT 1030 nos encontramos con el clásico ojo de Gigabyte y una frase «Silent Low Profile 2G» que nos indica que se trata de una tarjeta gráfica pasiva y que contiene 2 GB de memoria VRAM.
Mientras que en la parte trasera nos indican todas las características técnicas del producto de forma más detalladas, sus conexiones traseras y la utilización de los componentes Ultra Durable 2.
Una vez abrimos el producto nos encontramos con el siguiente bundle:
La tarjeta gráfica Nvidia GT 1030 utiliza la nueva arquitectura gráfica Nvidia Pascal, concretamente se trata de la GP108 que se fabrica en 16 nm FinFET y una de las tarjetas más eficientes al tener un TDP de apenas 35W.
Las dimensiones de la tarjeta gráfica son muy compactas con 174.91 x 68.9 x 35.91 mm y un peso de apenas 246 gramos. Todo ello en un formato de Single Slot Low Profile que podremos instalar en cualquier gabinete del mercado. Aunque este modelo concreto ocupa casi 1,5-2 slots… igualmente no debemos tener ningún tipo de problema de instalar en cualquier caja del mercado.
Estos 1.8 billones transistores se reparten dentro del chip en un total de 6 unidades Streaming Multiprocessors, éstas a su vez contienen la gran cantidad de 384 núcleos CUDA con la última arquitectura de Nvidia. También encontramos nada menos que 24 unidades de texturizado (TMUs) y 16 unidades de rastrerizado (ROPs).
La Streaming Multiprocessors corre unas frecuencias en su GPU de 1252 MHz en modo base que asciende hasta 1.506 MHz bajo el modo Turbo Boost para ofrecer un rendimiento superior. Aunque depende del modelo nos encontraremos mejores frecuencias, en nuestro caso al ser un disipador pasivo viene con unas velocidades algo más contenida.
Una de sus principales novedades es la incorporación de memoria GDDR5… Normalmente en modelos de generaciones anteriores solían montar GDDR3 para ahorrar coste, pero la verdad… ya era bastante obsoleta. Es muy interesante que la tarjeta cuenta con un total de 4 GB de memoria GDDR5 a unas frecuencias muy relajadas de 6008 MHz, un bus de 64-bit y un excelente TDP de apenas 35W.
La gran diferencia entre este modelo y el resto de la competencia es que no incorpora ventilador. Y es que, evidentemente, nos permite jugar a juegos con una calidad baja… está enfocada al centro multimedia. ¿Qué mejor que minimizar el ruido sin los clásicos ventiladores diminutos y ruidosos?
Gigabyte lo ha hecho muy bien con un altura máxima del disipador de 3,5 cm, casi 17 cm de superficie y un grosor considerable. ¿Y si le quiero instalar un ventilador? Mírate otro modelo, porque en el PCB no incorpora ningún cabezal para instalar un ventilador 😉
En la parte trasera no encontramos ningún backplate. Tampoco nos hace falta para la gama de tarjeta gráfica que se trata, aunque hay que recalcar que Gigabyte ha usado componentes Ultra Durable 2 y una fase de alimentación para dar energía a la Nvidia GT 1030.
Al tener un TDP bajísimo (recordad, 35W) y un consumo muy contenido no necesita alimentación desde la fuente de alimentación y recoge toda la potencia desde el slot PCI Express. Todo un detalle para equipos pre-montado por fabricantes, equipos que el consumo está super contenido y van al máximo «low cost».
Por último os enseñamos las conexiones traseras compuestas por:
| BANCO DE PRUEBAS | |
| Procesador: | AMD Ryzen 3 1200 |
| Placa Base: | Gigabyte 370X Gaming 5 |
| Memoria: | 16 GB G.Skill FlareX @ 3200 MHz. |
| Disipador | Disipador stock |
| Disco Duro | Kingston KC400. |
| Tarjeta Gráfica | Nvidia GT 1030 |
| Fuente de Alimentación | Corsair RM1000 |
Todas las pruebas han sido pasadas con los filtros al mínimo porque la tarjeta gráfica es de gama baja y queríamos tener la mejor experiencia. La resolución usada es la más común entre los usuarios: Full HD a 1920 x 1080 píxeles junto al sistema operativo Windows 10 Pro 64 bit y los últimos drivers disponibles desde la web de Nvidia.
En primer lugar, la mejor calidad de imagen posible. El valor más importante para nosotros es la media de FPS (Fotogramas por segundo), a mayor número de FPS más fluido irá el juego. Para diferenciar un poco la calidad, os dejamos una tabla para valorar la calidad en FPS, pero también contaremos con los Fps mínimos en las pruebas que fueron así posibles:
| FRAMES POR SEGUNDOS | |
| Frames por Segundos. (FPS) | Jugabilidad |
| Menos de 30 FPS | Limitada |
| 30 – 40 FPS | Jugable |
| 40 – 60 FPS | Buena |
| Mayor de 60 FPS | Bastante Buena o Excelente |
Hemos pasado los siguientes juegos, eliminando filtros en su configuración y con una resolución 1920 x 1080 en todo momento.
Las temperaturas de la Nvidia GT 1030 han sido realmente buenas, con bastante menos ruido y temperaturas que el modelo de referencia. En reposo hemos obtenido 23ºC y a máximo rendimiento llega hasta los 67 ºC, aunque si el juego es muy exigente podemos verla incluso en 78 ºC.
Otra de las grandes ventajas de esta gama es el reducido consumo que tenemos en el equipo. Hasta hace muy poco era impensable tener una gráfica de alta gama y obtener 49 W en reposo y 88 W jugando con un procesador AMD Ryzen 3 1200 en velocidades de stock.
La Nvidia GT1030 se posiciona en una gran opción para aquellos usuarios que buscan sacarle más partido a su antiguo PC o necesitan reproducir contenido 4K a 60 FPS sin ningún tipo de problema en su PC o Media Center.
Aunque en nuestras pruebas nos hemos basado en 4 de los juegos más usados este año. Como se puede apreciar en las gráficas, los juegos más exigentes (BF1 y Doom) son jugables tanto con detalles bajo o medios y eliminando filtros, por lo que es una tarjeta gráfica muy capaz con juegos menos exigentes como Rocket League, LoL o el mismo Overwatch. Una solución barata y que compite de tú a tú contra la AMD Radeon RX 550 que ya analizamos unos meses.
Os recomendamos la lectura de nuestra guía de las mejores tarjetas gráficas del mercado.
Otro de sus puntos a favor de la Nvidia GT 1030 es que hay versiones que no incorpora ningún ventilador y son 100% pasivas. Esto implica que no genere ningún ruido y que su temperaturas sean algo más alto, pero aliviando el ruido de pequeños ventiladores. Actualmente existe una gran variedad de modelos en el mercado, donde sus precios ronda entre los 79 euros hasta los 84 euros.
Otro dato a tener en cuenta que solo nos solicita una fuente de alimentación de 300W para todo el sistema y no necesita alimentación extra. ¡Una pasada el consumo que nos ha ofrecido en nuestro banco de pruebas!
Entonces… ¿Merece la pena su adquisición? Si buscas algo light y mejorar la tarjeta integrada de tu procesador es una gran opción. Pero si subes un poquito tu presupuesto tienes la Nvidia GTX 1050 de 4GB o la AMD RX 460 / 560 de 4GB. ¿Qué te ha parecido el rendimiento de la Nvidia GT 1030?
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| + IDEAL PARA CENTROS MULTIMEDIA. | |
| + SE PUEDE JUGAR CON ELLA EN CALIDAD BAJA.
| |
| + BAJA SONORIDAD Y BUENAS TEMPERATURAS (SEGÚN MODELO). | |
| + PRECIO ATRACTIVO |
Y tras evaluar detenidamente tanto las pruebas como el producto, Profesional Review le otorga la medalla de plata y producto recomendado:
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