Cuando se trata de escoger un procesador para videojuegos la tarea no es sencilla porque hay muchos factores que influyen en el rendimiento final y los modelos más potentes en general no tienen por que ser los mejores para los juegos. Los procesadores Intel Skylake-X son los más potentes del mundo pero en los videojuegos no han sido capaces de hacerse con la corona.
Tradicionalmente los procesadores con mayor potencia por núcleo han sido los mejores para los videojuegos ya que estos no son capaces de aprovechar todos los recursos disponibles en un chip. Con la llegada de Intel X299 y AMD Ryzen se ha introducido un nuevo factor muy importante en la ecuación, la latencia de la comunicación interna entre núcleos.
Los chicos de Techspot han puesto cara a cara al Core i7 7700K (4 núcleos) y el Core i9 7800X (6 núcleos) junto a una GeForce GTX 1080 Ti en un importante número de juegos. Los resultados son claros y el pequeño Core i7 7700K es notablemente más rápido en todos los juegos que el Core i9 7800X que pertenece a una gama superior. Skylake y Kaby Lake son en esencia la misma arquitectura por lo que hacer una comparativa en igualdad de frecuencias arroja mucha luz sobre su comportamiento en los juegos, se puede ver como el Core i9 7800X a 4,7 GHz se ve superado por el Core i7 7700K.
Uno de los cambios más importantes que se han introducido con Skylake-X afecta a la comunicación entre núcleos del procesador, Intel ha pasado de su tradicional arquitectura en forma de anillo a una más avanzada arquitectura en forma de malla que ofrece un diseño más modular para añadir grandes cantidades de núcleos de forma más eficiente, lo malo de este diseño es que añade más latencia a la comunicación. Este cambio afecta de forma muy importante al rendimiento en los videojuegos, la propia Intel ha reconocido que los anteriores Broadwell-E ofrecen un mejor rendimiento en juegos que Skylake-X.
[irp]Nos hemos dado cuenta de que hay aplicaciones en las que los procesadores Broadwell-E son más rápidos que los Skylake-X. Esto es consecuencia de la nueva arquitectura en forma de malla de Skylake-X en comparación con la arquitectura en anillo de Broadwell-E.
La implementación de toda arquitectura nueva requiere de un importante trabajo de ingeniería para mejorar el rendimiento general de la plataforma y esto no es una excepción con Skylake-X.
Mientras que este cambio interno afecta a muchas aplicaciones, los nuevos procesadores Skylake-X ofrecen un excelente nivel de IPC y una mejora significativa en el rendimiento en general.
Fuente: overclock3d
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