La presencia de los SSD va en aumento de forma notable en los últimos años. Han ido ganando terreno como el método de almacenamiento principal en el mercado de los ordenadores.
Los SSD presentan muchas ventajas para los usuarios, aunque también hay un par de aspectos que hay que tener en cuenta. Generalmente su precio es más elevado. Y tienen ciclos de escritura limitados. Por tanto, tienen una vida útil limitada.
Tenemos un artículo actualizado con la vida útil de los SSD más modernos.
Que un SSD tenga un ciclo de escritura limitado quiere decir que la cantidad de información que se puede escribir tiene un límite. La cantidad de información depende generalmente del fabricante, aunque siempre está indicada. Un SSD medio tiene generalmente 75 TBW. Por lo que considerando que la escritura media puede ser de unos 14 GB, podéis saber que su vida útil será de casi 15 años.
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¿Qué pasa cuando se alcanza el límite? Si se alcanza el máximo de escritura permitida en el SSD, ya no vas a poder escribir más. Pasa a convertirse en una unidad de lectura. Por tanto, sólo podremos copiar la información presente en el mismo. Es como si ahora se convirtiera en un CD, por explicarlo de alguna manera.
Si bien un SSD tiene un ciclo de escritura limitado, para un consumidor normal no es algo que se alcance con facilidad. Para empresas es algo que ocurre con mucha más facilidad, y se ven obligados a apostar por unidades con mayor capacidad de escritura. Por tanto, puedes instalar muchos GB de juegos, que no vas a tener mayores problemas. ¿Tenéis una SSD? ¿De cuánta capacidad? ¿Crees que 15 años son pocos? O piensas como nosotros que es más que suficiente para cambiar por uno nuevo!
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