MSI VR One Review en Español (Análisis completo)

El MSI VR One es un potente ordenador con forma de mochila que nos permitirá jugar con nuestras gafas de realidad virtual de una forma muy holgada gracias al gran rendimiento de su hardware. Seguro que lo habrás visto en algunos eventos y la experiencia es increíble. ¡No te pierdas nuestra review! 

Una vez más agradecemos a MSI la confianza depositada por la cesión del producto para su análisis:

MSI VR One: características

Unboxing y análisis

El MSI VR One viene dentro de una gran caja de cartón en la que encontramos el esquema de colores habitual de la serie Gaming de MSI, un fondo negro y varios detalles en rojo.

En la zona trasera tenemos todas las características técnicas principales del producto.

Una vez que abrimos la caja nos encontramos con el equipo MSI VR One perfectamente protegido por densas piezas de espuma que se encargan de asegurarlo y evitar que se mueva antes de legar a las manos del usuario final. Tenemos entre manos un producto muy peculiar y premium, MSI nos demuestra que es uno de los más grandes con un embalaje impecable y al que no le podemos poner ninguna pega.

En ambos lados del equipo encontramos todos los accesorios y la documentación, todo ello dentro de dos cajas de cartón bien acomodadas.

MSI también ha incluido en el bundle un cable para conectar el VR One a nuestras gafas de realidad virtual, incluye conectores HDMI, USB 3.0 y de alimentación para tenerlo todo en un único cable.

Un equipo tan potente como este consume mucha energía, MSI nos proporciona dos baterías de iones de litio con un amperaje de 6365 mAh cada una de ellas, estas baterías funcionan con una tensión de 14.4V y son capaces de proporcionar 91.66 Wh. Estas baterías se conectan al MSI VR One para su recarga, el fabricante nos adjunta un transformador de 230W que conectaremos al equipo para recargar sus baterías y tenerlas siempre listas para nuestras partidas más exigentes.

Ya os hemos mencionado más arriba que este MSI VR One es un equipo muy potente, para cumplir de sobra con las exigencias de la realidad virtual se ha optado por incluir los mejores componentes de Intel y Nvidia en su interior. Encontramos un avanzado procesador Intel Core i7-6820HK que está formado por cuatro núcleos y ocho hilos de procesamiento a unas frecuencias base y turbo de 2.7 GHz y 3.7 GHz respectivamente, este chip se acompaña de los poderosos gráficos Nvidia GeForce GTX 1070 con la eficiente arquitectura gráfica Pascal.

MSI ha buscado una excelente eficiencia energética, algo más importante que nunca en un equipo como este que está destinado a funcionar con sus baterías y alejado de los enchufes. 16 GB de memoria DDR4 2400 en configuración dual chanel completan las principales características.

En cuanto al almacenamiento encontramos una unidad SSD M.2 NVMe con una capacidad de 512 GB, el equipo dispone de una segunda ranura libre por lo que podremos tener instalados dos de estos veloces discos duros de última generación. Seguimos con una excelente conectividad inalámbrica con WiFi Killer 1535 802.11-ac y Bluetooth 4.1 para poder hacer uso de un gran número de periféricos.

Seguimos con el sistema operativo Windows 10 y numerosos puertos de conexión en forma de 4 x USB 3.0, 1 x USB 3.1 Type-C / Thunderbolt, 2 x Jack 3.5 mm (auriculares y micrófono), HDMI 2.0 y Mini-DisplayPort 1.2.

El MSI VR One se construye con unas dimensiones de 409 x 292 x 54 mm (alto, ancho, grueso) y un peso de 3.6 Kg, no estamos ante un sistema especialmente ligero por lo que habrá que tenerlo en cuenta a la hora de cargar con él durante largas sesiones. A ello le tenemos que sumar el calor que se generará durante su funcionamiento y que en verano puede ser algo muy a tener en cuenta.

La parte superior presenta la estética habitual con el dragón en color rojo.

En la parte inferior tenemos el espacio para introducir las dos baterías. En la parte superior el conector de alimentación para cargar las baterías. Este puerto también nos permite alimentar las gafas de realidad virtual con el cable adjuntado.

Y en la parte inferior tenemos todos los puertos de conexión que ya hemos mencionado antes.

Evidentemente el calor generado puede ser un gran enemigo en un equipo como este, vemos como MSI ha pensado en ello y ha colocado una cámara de aire entre el equipo y nuestra espalda para evitar que todo el calor generado por el hardware nos achicharre, habrá que ver si es suficiente, especialmente para aquellos usuarios que disfruten de veranos muy cálidos.

Si retiramos esta parte podemos acceder a los módulos de memoria RAM y las ranuras para los discos duros SSD.

Seguimos desarmando el equipo y vamos viendo más secretos escondidos, para retirar la carcasa trasera tendremos que quitar un total de 15 tornillos, con un poco de paciencia está chupado.

Vemos dos detalles que nos llaman mucho la atención, por un lado vemos que la GeForce GTX 1070 utilizada tiene formato MXM por lo que la podremos sustituir aunque no será fácil encontrar una y su precio será muy elevado. Por otra parte vemos su avanzado sistema de refrigeración Cooler Boost Titan en el que podemos ver siete heatpipes de cobre que hacen contacto con la CPU y la GPU para absorber el calor generado por estos chips. Los heatpipes se unen junto a dos ventiladores de turbina para expulsar el calor fuera del equipo. Llega el momento colocar las baterías y las correas al MSI VR One y ya podemos empezar a probarlo.

Pruebas de rendimiento

MSI Dragon Center nos permite personalizar, monitorizar, llevar el control desde tu smartphone con diversas aplicaciones. El primer contacto con ella ha sido bastante buena y hemos visto una buena evolución respecto a anteriores generaciones.

Nos encontramos con una mejora bastante palpable, ya que hemos subido del i7-6820HK con sus 659 puntos. Muy buen resultado, aquí si puede merecer la pena en un cambio en un futuro. Entre las pruebas hemos pasado 3DMARk Fire Strike normal, su versión Ultra a 4K y Unigine Heaven. Los resultados magníficos como siempre.

También hemos podido comprobar que las tasas de lectura y escritura del Crystal Disk Mark del SSD M2 NVMe que incorpora cumple con lo establecido por el fabricante: 3405 MB/s de lectura y 1664 MB/s de escritura.

Palabras finales y conclusión acerca de MSI VR One

La llegada de los sistemas de realidad virtual al PC gaming ha planteado en problema dado el número de cables que se precisan para conectar las gafas a nuestro ordenador, algo que afecta negativamente a la movilidad del jugador. MSI ha querido poner una solución a este problema y su apuesta fue un ordenador con forma de mochila para que el usuario lo lleve en la espalda mientras juega. Con este concepto los cables molestan mucho menos a la hora de moverse y además nos permite llevarnos todo el sistema a casa de nuestros amigos para echar unas partidas.

Sobre las temperaturas en ningún momento hemos visto pasar a todo el conjunto a más de 72ºC, es verdad, que el procesador se ha calentado bastante (cerca de 87ºC), pero gracias a una buena disipación no lo hemos notado cuando la llevábamos puesta.

Respecto a su autonomía hemos alcanzado la hora y 15 minutos de uso con nuestras gafas HTC Vive. Mientras si lo usamos como un equipo de sobremesa, llegamos hasta las 4 horas y media aproximadamente. Teniendo en cuenta que es un i7-6820HQ y una tarjeta gráfica GTX 1070 de 8GB. ¡Está genial!

Realmente encontramos dos mejoras bastante importantes. La primera es que la estructura de plástico hace su función y tiene un diseño ligero, pero creemos que con una estructura de aluminio anodizado puede ayudar a disipar mejor el calor y ya que tenemos un producto de más de 1700 euros (el más barato), ese toque identificativo de MSI debería de estar.

El segundo problema que le encontramos es que necesita de periféricos y un monitor o televisor conectado para su arranque. Y así lanzar Steam VR…  Creemos que sería interesante que creasen algun tipo de interfaz mínima (un modo VR Rápido) como una pantallita pequeña LCD, para arrancar STEAM y ya manejar el equipo al completo.

Te recomendamos la lectura de nuestra configuración PC Realidad Virtual.

El MSI VR One como concepto lo vemos interesante, pero creemos que es más práctico que MSI lance una mochila para sus portátiles GS63VR y GS73VR. Ya que por un precio similar, tenemos pantalla, teclado y el touchpad. Con la posibilidad el complemento de mochila y una batería externa para aumentar su duración.

Actualmente la encontramos en tiendas online y su precio oscila entre 1700 euros hasta los 2400 euros con tarjeta gráfica GTX 1060 y la GTX 1070. Una equipo muy interesante para los amantes de la realidad virtual.

El equipo de Profesional Review le otorgamos la medalla de oro: