Radeon ReLive muestra un funcionamiento excelente y a la altura de ShadowPlay

Los nuevos controladores gráficos AMD Radeon Software Crimson ReLive Edition han llegado cargados de importntes novedades para los usuarios de las GPUs Radeon, una de ellas es Radeon ReLive que constituye una excelente herramienta de grabación y streaming de nuestras partidas que busca rivalizar con Nvidia ShadowPlay.

Radeon ReLive: la nueva herramienta de grabación de AMD

Radeon ReLive es una herramienta muy completa que hará todas las funciones que los más gamers puedan esperar de ella: grabación de vídeo, streaming, replays instantáneos y capturas de pantalla.

Una vez in-game encontramos varios accesos en pantalla para ReLive con las opciones siguientes:

• Ajustes de ReLive.
• Repetición instantánea. Guarda los últimos minutos de nuestra partida. Se puede configurar el tiempo que durará la grabación así como el framerate, la resolución y el tipo de códec a usar.
• Grabación de vídeo. Te permitirá escoger múltiples detalles como el bitrate de vídeo y audio y la resolución de grabación. Estas opciones variarán en función de la tarjeta de vídeo que estés usando.

• Stream hacia Twitch, YouTube y otros servicios.
• Screenshot.

La grabación de vídeo funciona realmente bien, las pruuebas hechas con Overwatch, H1Z1 King of the Kill, Battlefield 1 y World of Warcraft muestran un rendimiento excelente que apenas causa pérdida en el rendimiento del sistema, la media s estima en un 3-4% en caso de usar una Radeon RX 480 junto a un procesador Intel Core i7 6700K. Con estas características no hay duda de que estamos ante un rival formidable para Nvidia ShadowPlay.

Radeon Chill

La nueva arquitectura AMD Polaris ha supuesto una importante mejora en eficiencia energética y generación de calor para el fabricante, pese a ello sigue habiendo una diferencia importante con Nvidia y sus tarjetas basadas en Pascal. La nueva tecnología Radeon Chill tiene la missión de recortar la brecha existente en eficiencia entre ambos fabricantes, se trata de una implementación más avanzada de Frame Rate Target Control.

Radeon Chill viene desactivado por defecto y debe ser el usuario el que la active para su funcionamiento, su misión consiste en reducir el uso de la GPU cuando sea posible para ahorrar en consumo de energía y reducir el calor generado. La aplicación rastrea el uso de teclado y el ratón y en cuanto detecta una inactividad más larga de lo normal, reduce el framerate en las escenas carentes de movimiento. Al recuperar el movimiento el framerate vuelve a a subir de una forma muy fluida y transparente al jugador.

AMD afirma que de esta forma se puede reducir el consumo de energía de la GPU en hasta un 31% y una reducción en la temperatura del núcleo gráfico de hasta 13ºC. Con ello también se logra que el ventilador funcione mucho más relajado para un mayor silencio. Es de esperar que los mayores resultados se obtengan en juegos con poco movimiento como los e-sport. El comportamiento de Radeon Chill es muy configurable y podremos ajustar los valores de framerate mínimo y máximo permitidos.