Los usuarios de Android sabemos que uno de los grandes problemas de la plataforma es la falta de actualizaciones en la mayoría de los casos y la lentitud en muchos de los que sí son actualizados. Ello es especialmente grave en el caso de terminales adquiridos por las operadoras ya que son estas las que se encargan de personalizar y distribuir las actualizaciones, algo que sucederá incluso en el caso de los nuevos Google Pixel.
Los Google Pixel son muy caros por lo que muchos usuarios habían pensado en obtenerlos por medio de una operadora para así rebajar sustancialmente su precio. Verizon es una de las operadoras más importantes de Estados Unidos y ha llegado a un acuerdo con Google para tener exclusividad temporal de los Google Pixel, Verizon venderá los Pixel con el bootloader bloqueado y se encargará de aprobar y personalizar cada actualización que Google Libere para sus Pixel, es decir que incluirá bloatware en los terminales además de controlar su actualización.
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Una de las grandes ventajas de los Nexus es que reciben las actualizaciones de forma directa de Google por lo que siempre son los primeros en disfrutarlas, esto también sucederá con los Google Pixel excepto en el caso de los terminales vendidos por las operadoras. Ello implica un retraso de varias semanas o incluso meses para recibir las actualizaciones de Android.
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