AMD Radeon R9 Nano Review (Análisis en Español)

La AMD Radeon R9 Nano ha sido la última de la familia ‘Fury’ en desembarcar al mercado y buque insignia en todo él como referente en potencia concentrada, es decir, ha tenido la corona de rendimiento en ese sector y que a día de hoy, hasta la llegada de las nuevas generaciones, sigue ostentando tal puesto. Es, probablemente, la más influyente y que mejor estima ha tenido de toda su generación, pues los altos precios del resto de familia (y de ésta), la escasez de modelos personalizados, han dejado frío a muchos clientes.

Agradecemos al equipo de AMD España el préstamo de esta tarjeta gráfica para su análisis:

AMD Radeon R9 Nano características técnicas

Unboxing y diseño

Cuesta imaginar nada más sacarla de la caja, que una tarjeta tan pequeña (¡y hablamos de nada menos que 15,5cm de larga!) y con un disipador tan menudo, sea capaz de albergar y contener, tanta potencia. Es, sin lugar a dudas la Fury más trabajada en todos sus sentidos, ahora enumeraremos todos los por qués.

Comenzando por sus especificaciones, goza de heredar totalmente las especificaciones de la Fury X y su núcleo ‘Fiji’ dotado de 4096 Shaders GCN a una frecuencia de 1000Mhz, 64Rops, 256 unidades de textura (Tmus) y una novedosa e histórica primera generación HBM (High Bandwidth Memory), albergando nada más y nada menos que 4096 Bits, y 4Gb a 500Mhz arrojando una cifra de 512Gb/s de ancho de banda total, consiguiendo que en altas resoluciones, se desenvuelva realmente bien, ya que es uno de las mayores necesidades. En las imágenes inferiores vemos el diagrama de Fiji al completo así como una fotografía del DIE de la misma, compuesto por la GPU y los 4 módulos de memoria HBM.

Este novedoso sistema de memoria no sólo tiene el propósito de aumentar el ancho de banda efectivo, sino que además reduce sustancialmente el consumo de energía (hasta un 65% menor) comparada con la conocida GDDR5 y, eliminando todo rastro de ella en el PCB de la tarjeta haciendo una tarjeta gráfica de dimiensiones realmente reducidas, ya que comparten espacio con la GPU. La siguiente generación de ésta memoria la veremos en las próximas Pascal y Vega, pero de eso hablaremos en otro momento.

Pero no sólo hereda las características a nivel de GPU, sino que también cuenta con los mismos reguladores de voltaje y doble bios. La gráfica ha sido como era de suponer, fabricada en el ya veterano proceso de fabricación de 28nm de TSMC, contando con la misma tremenda cifra de  8,9 billones de transistores en su interior. La pequeña Nano sólo necesita un único conector de 8 pines para su funcionamiento, a diferencia de los dos que demanda la Fury X, asi que para moverla sin riesgo necesitamos una fuente de alimentación capaz de arrojar hasta 225W para la tarjeta (500W de total de fuente de alimentación).

La conectividad de ésta tarjeta es de 3 Displayport 1.2 y un puerto HDMI 1.4a (con soporte 4K limitado a 30Hz). Para resoluciones 4k@60Hz dependeremos obligatoriamente de los puertos DisplayPort así como activar la tecnología de sincronización con el monitor Freesync. Es una tarjeta que ha sido fabricada, aparte de su reducido tamaño, para desempeño en altas resoluciones como mencionamos anteriormente.

Gracias a su tamaño y características, goza de un menor TDP que la Fury X (yb 30% menor) con un total de 175W y un consumo y temperaturas mucho menores. Dichas temperaturas más bajas son fruto del perfil que trae por defecto el ventilador – y que no es ruidoso de por si – dejando la tarjeta en niveles más que aceptables, prevaleciendo la experiencia de usuario en todo momento y manteniendo la tarjeta en 75ºC aproximadamente.

Dicho perfil, tiene la labor primordial de prevalecer haciendo incapié, en dos cosas. La primera es su temperatura y la segunda el nivel de ruido, pero, ¿cómo lo hace? Parte de éste desempeño tiene su origen en el TDP programado, hará que limite las frecuencias del GPU conforme aumente la exigencia en juegos y por ello, su temperatura, teniendo la cifra uniforme final de ~900Mhz siempre que ésto suceda.

AMD optó por un disipador con cámara de vapor, fabricado en cobre toda la superficie de contacto y su heatpipe, cubriendo todas las partes de vital importancia como sus VRM y todo el tamaño final lo cubre un enorme disipador con aletas de aluminio en posición horizontal, haciendo que fluya el aire al exterior de la caja y parte por la parte anterior.

Las especificaciones de la tarjeta también la conforman las tecnologías propias de AMD, hablamos de Freesync, Virtual Super Resolution, Frame Rate Target y especialmente pensada la arquitectura GCN con cómputo asíncrono, y las nuevas Apis de bajo nivel como son Directx12 y Vulkan.

Banco de pruebas y tests de rendimiento

Para benchmarks usaremos los siguientes títulos:

• 3DMark Fire Strike normal.
• 3DMark Fire Strike versión 4K.
• Heaven 4.0.
• Doom 4.
• Overwatch.
• Tomb Raider.
• Battlefield 4.

Todas las pruebas han sido pasadas con los filtros al máximo excepto que indiquemos lo contrario. Para tener un rendimiento adecuado hemos realizado tres tipos de pruebas: la primera es la más común a Full HD 1920 x 1080,  la segunda resolución que está dando el salto a los gamers 2K ó 1440 (2560 x 1440) y a los más entusiastas con 4K (3840 x 2160). El sistema operativo que hemos utilizado ha sido Windows 10 Pro 64 bit y los últimos drivers disponibles desde el website de AMD.

¿Qué estamos buscando en las pruebas?

En primer lugar, la mejor calidad de imagen posible. El valor más importante para nosotros es la media de FPS (Fotogramas por segundo), a mayor número de FPS más fluido irá el juego. Para diferenciar un poco la calidad, os dejamos una tabla para valorar la calidad en FPS, pero también contaremos con los Fps mínimos en las pruebas que fueron así posibles:

Benchmarks sintéticos

Como llevamos haciendo en nuestros análisis de tarjetas gráficas hemos reducido a tres pruebas sintéticas, ya que lo que realmente importa es el rendimiento en juegos. Las pruebas elegidas son 3DMARK FireStrike Normal (1080p), 3DMARK FireStrike en calidad 4K y Heaven 4.0.

Como podemos ver tiene un rendimiento parecido a la Nvidia GTX 970. Pero no os desilusionéis y esperar al apartado de overclock, ya que os llevaréis una gran sorpresa ;).

Pruebas en Juegos

Hemos decidido dar el salto a comprobar varios juegos de manera manual. ¿El motivo? Muy sencillo, queremos dar una visión mucho más realista y abarcar pruebas con juegos acordes a la actualidad. Ya que realizamos un esfuerzo, que sea en consonancia al nivel de la página web y al de nuestros lectores.

Pruebas en juegos Full HD

Pruebas en juegos 2K

Pruebas en juegos 4K

Overclock

Nota: Recuerda que el overclock o manipulación, conlleva un riesgo, nosotros y cualquier fabricante no nos hacemos responsables de un uso indebido, utiliza la cabeza y hazlo siempre bajo tu responsabilidad.

Como dijimos en la descripción de nuestra tarjeta, la tarjeta viene por defecto a una frecuencia de 1000Mhz como base pero al estar pensada para tener una temperatura y nivel de ruido acordes a la misma, tiende a hacer algo comúnmente llamado en éste mundillo como ‘throttling’, y que por ello veremos oscilar la frecuencia al rededor de los 900Mhz.

Con cualquier programa, incluido el software oficial Crinsom, podemos alterar ésta conducta de forma manual con su voltaje, frecuencia y TDP. Para mejorar el ya de por si excelente rendimiento de la Fury Nano, aumentaremos su TDP y crearemos un perfil de ventilación acorde a lo mismo, y aumentaremos la frecuencia paulatinamente de la GPU hasta lograr la estabilidad que pueda proporcionar nuestra unidad.

Ahora no sólo tendremos más frecuencia sino que al alterar el TDP y mejorar su temperatura con un perfil más ‘agresivo’ (es la forma de decirlo, no necesariamente al 100%) evitaremos cualquier oscilación en las frecuencias alcanzando el rendimiento de la Fury X, traduciéndose en un escalado de Fps realmente alto.

Temperatura y consumo

Las temperaturas de la AMD Radeon R9 Nano son bastante buenas comparadas a otros modelos de referencia que lanzó no hace mucho AMD. En reposo hemos obtenido 32º C y un máximo de 67º C jugando. Con overclock han subido las temperaturas en pleno rendimiento hasta los 72ºC.

Respecto al consumo conseguimos 71 W en reposo y 298 W jugando con un procesador Intel i7-6700K. Cuando aplicamos overclock sube a 99 W en reposo y 315 W jugando a tope.

Palabras finales y conclusión acerca de la AMD Radeon R9 Nano

Llegamos bastante tarde para su análisis (concretamente un año) pero es que escasas semanas es cuando hemos recibido la muestra. La AMD Radeon R9 Nano se trata de una de las mejores tarjetas gráficas compactas del mercado al incorporar más potencia que una AMD Radeon RX 480 en un formato ITX. ¿Se puede sacar más partido en un tamaño tan compacto? Es realmente dificil.

Tal como hemos comprobado en nuestras pruebas se defienden en todos los juegos de manera excelente en Full HD y 2K, aunque en 4K ha dado bastante la talla, pero claro… al tener sólo 4GB de memoria HBM pueden saturarse.

Actualmente se puede encontrar en tiendas online por unos 590 euros aproximadamente. Es una apuesta segura a día de hoy, pero lo mismo sale más rentable optar por una tarjeta más económica como la RX 480 o un CrossFireX con sus 8GB con un soporte más longevo.

Y tras evaluar detenidamente tanto las pruebas como el producto, Profesional Review le otorga la medalla de oro: