MSI GT80s 6QF Titan SLI Review

Normalmente los usuarios deben elegir si desean potencia y comodidad con un sobremesa, o manejabilidad, con un portátil. MSI quiere romper con esa política con la serie MSI GT80s 6QF Titan SLI, que son unas auténticas bestias que incluyen por primera vez en un portátil un teclado mecánico, acompañado por supuesto de componentes tope de gama.

En este caso en un modelo de 18.4 pulgadas, que hará las delicias de los jugones que viajan, o de los amantes de las partys que no quieren cargar con una torre.

Características Técnicas MSI GT80s 6QF Titan SLI

La lista de componentes no defrauda, en el caso del modelo analizado contamos con un i7-6920HQ, 32 GB de memoria RAM, un SLI de 2 nVidia GTX 980, tarjeta de red inalámbrica Killer Double Shot Pro, teclado steelseries retroiluminado con switches MX Red, un RAID 0 de 2 NVMe M.2 SSD que hacen un total de 512GB, acompañados de un disco mecánico de 1 TB para datos, 4 altavoces más subwoofer Dynaudio y lector de BluRay.

Unboxing MSI GT80s 6QF Titan SLI

El portátil llega en una caja de cartón de grandes dimensiones y con predominio del color negro.

Este modelo en concreto no incluye ningún accesorio aparte del propio equipo, la documentación, un CD de drivers y su alimentador de 330W. Realmente tampoco necesita ningún extra para destacar. El portátil viene en una bolsa de tela para evitar rayones (el aluminio es delicado, y muy sucio en cuanto a huellas), en la linea de otros modelos de MSI:

MSI GT80s 6QF Titan SLI: Diseño

El MSI GT80s 6QF Titan SLI un modelo bastante grande, con 18.4 pulgadas y una resolución FullHD es una pantalla IPS muy adecuada para sustituir un monitor en películas y juegos. Es un equipo ideal si  no se va a mover demasiado pero queremos rendimiento y comodidad.

El portátil está bien diseñado, es un modelo bastante grueso con 4.5 cm en la trasera, pero a cambio las salidas de aire son generosas y la cantidad de puertos muy generosa con un USB 3.1-Type-C, cinco USB3.0, dos miniDP y un HDMI 1.4, junto con el típico lector de tarjetas y el puerto de red, muy bien situado en la trasera

La parte inferior exhibe rejilla roja y negra siguiendo el estilo del resto del portátil y contribuyendo a una refirigeración muy buena. La parte superior tampoco desmerece nada, con detalles muy buenos como el logo de MSI iluminado por la propia retroiluminación de la pantalla, junto con dos bandas también iluminadas.

La tapa es de aluminio y la caja principal del cuerpo es de plástico.  La superficie en la parte superior del teclado también es de metal y presenta el famoso dragón de MSI. Aunque la robustez y estética de esta zona son buenas, se presenta mucho espacio desaprovechado que se podría haber sido aprovechado con algunos botones programables por ejemplo.

Detalle de los tres botones, cuyas funciones son respectivamente poner los ventiladores al máximo, cambiar entre GPU dedicada e integrada, y encender/apagar el equipo. En cuanto a los altavoces, este portátil cuenta con 4+1 altavoces fabricados por Dynaudio para conseguir una calidad de sonido notable para lo que es habitual en portátiles.

Detalle del equipo desde los laterales

El teclado mecánico presenta unas sensaciones inmejorables con los mismos switches Cherry MX Red que la mayoría de teclados gaming de gama alta. Está fabricado por steelseries con retroiluminación en rojo, y se aprecia calidad por todas sus partes. El lugar del teclado numérico lo ocupa el trackpad, que si pulsamos la tecla bloqueo numérico se convierte en un teclado numérico completo, en su posición natural. Además, no se nota nada al tacto cuando se usa en modo trackpad, está realmente conseguido, aunque desgraciadamente para los usuarios que usen mucho el teclado numérico obliga a cambiar de modo todo el tiempo.

Hardware y rendimiento

En cuanto al procesador, nos encontramos con uno de los más pequeños de los procesadores realmente potentes de intel, un i7 6920HQ, con 4 núcleos y 8 hilos, y arquitectura Skylake a una frecuencia base de 2,9 GHz y una frecuencia turbo de 3.8 GHz con un TDP de 45W. El sufijo -HQ quiere decir que es un procesador socket FCBGA 1440 lo que nos indica que va soldado a la placa y no sobre socket, una decisión bastante extraña en un portátil de este tamaño, y que por desgracia nos impide cambiarlo por un modelo superior.

En la memoria RAM han optado por un kit de 32GB en dual channel, una cantidad muy generosa para ir sobrados varios años y nada fuera de lo esperable en estas gamas. Son módulos DDR4L (1.2V) como exige Skylake para una mayor eficiencia energética y un rendimiento soberbio.

El portátil se nota muy ágil en cuanto a arranque y uso, con apenas doce segundos entre que apretamos el botón y llegamos al escritorio, y no es para menos, ya que MSI ha optado por montar dos discos NVMe de 256 GB en RAID 0, consiguiendo un rendimiento en lectura/escritura secuencial que llega a rozar los a 2.600MB/s como veremos en el test.

El disco duro de datos se trata de una unidad mecánica de 1 TB y 7200 rpm. Ninguna sorpresa en esta parte, es un disco capaz y amplio para guardar nuestros datos. El rendimiento es bastante notable, sin llegar por supuesto a las cotas de un SSD, nos encontramos con 145MB/s de lectura y 135 MB/s de escritura secuencial.

El apartado gráfico es sin duda su punto fuerte, por si lo anterior nos parecía poco. Monta la configuración más potente que se puede encontrar ahora mismo en un portátil, un SLI de GTX980 con arquitectura Maxwell, se trata de un chip realmente eficiente, con mucho menor consumo de energía que la 880M y mejor rendimiento y en general margen de overclock. Esta gráfica cuenta con 2.048 CUDA cores y 8GB de memoria GDDR5 montada en un bus de 256bits. Aunque 8GB de memoria gráfica pueda parecer exagerado, sin duda es una elección muy buena en un equipo de esta gama, ya que siendo uno de los pocos portátiles con potencia para mover los juegos más pesados en resolución 4K sería una lástima que no pudiera por falta de VRAM. Por suerte, no es el caso, y tenemos un portátil para mover todos los juegos unos añitos. Vemos a continuación la información del GPU-Z.

El portátil incluye un botón para cambiar entre la gráfica dedicada y la integrada, una funcionalidad estupenda, aunque por desgracia deberemos reiniciar para aplicar el cambio. El consumo se reduce ligeramente con esta práctica, aunque igualmente el sistema Nvidia Optimus hace su función. Hemos tenido algunos problemas con la batería de nuestra muestra, por lo que no me atrevería a adelantar una autonomía. Por suerte, parece un problema solucionado en los modelos comerciales.

Los resultados en juegos son sobresalientes, dejando atrás a nuestro equipo de pruebas con una gtx 980 de sobremesa, superando incluso gráficas actuales de gama alta gracias a su SLI. Hemos probado los juegos Ryse: Son of Rome y The Witcher 3 en configuración ultra obteniendo un rendimiento excelente.

Este portátil monta algunos de los mejores componentes disponibles a día de hoy, por lo que no nos debe sorprender que los benchmarks den unas puntuaciones muy superiores a la de la mayoría de sobremesas del mercado, incluso contando gama alta.

Refrigeración

El portátil es bastante silencioso en carga baja y media para lo habitual, se aprecia una refrigeración bien diseñada y que cumple perfectamente, gracias en parte al grosor de la base y al tamaño del portátil. Sin embargo cuando le exigimos mucho los ventiladores se aceleran muchísimo y el ruido generado puede llegar a ser incluso molesto.

El portátil es grande y bastante pesado, pero a cambio la refrigeración es muy buena. Las temperaturas En reposo se mantienen en 36ºC en la CPU y 34ºC/43ºC en ambas GPU respectivamente. Sin embargo bajo situaciones de carga muy elevada como los juegos las temperaturas suben bastante hasta alcanzar los 75ºC en la CPU y 77ºC/83ºC en ambas GPUs respectivamente

Palabras finales y conclusión

Estamos frente a un portátil con un rendimiento insuperable, no en vano cuenta en su interior con dos tarjetas gráficas GTX 980 y un procesador Intel Core i7 6920HQ. Podemos estar seguros de que moverá cualquier juego al máximo nivel de detalle. Un elemento muy destacable es la incorporación de un teclado mecánico con switches Cherry MX Red, que nos transmite unas sensaciones similares a los teclados mecánicos de las marcas más prestigiosas.

Como era de esperar, un portátil de estas características tiene un precio muy elevado, no olvidemos que los portátiles más baratos montando la GTX980 superan los 2000€, y en este caso no tenemos una de estas gráficas sino dos. Los precios de este modelo comienzan en torno a los 5.400€ para el modelo básico, que de básico tiene poco todo sea dicho.

Igualmente, vista la calidad de este portátil el precio parece muy justificable. La pantalla cuenta con 18.4 pulgadas y tecnología IPS para una fidelidad de los colores máxima y unos excelentes ángulos de visión, no echaremos en falta un monitor externo.

No flojea en los detalles que menos se suelen mirar, con dos tarjetas de red Killer, una inalámbrica AC y otra para la conexión de cable, lector de Blu-Ray, y 5 puertos US3.0, un puerto USB 3.1 Type-C. Sin duda todo un lujo de portátil para los usuarios que quieren lo mejor.

Por su rendimiento excelente el equipo de Profesional Review le otorga la medalla de platino