Una pregunta que cada vez es más habitual es si vale la pena invertir en un Core i7 para jugar o si con un Core i5 tenemos suficiente. Ello se debe a que los videojuegos cada vez utilizan más núcleos/hilos de procesamiento por lo que el Core i7 debería tener ventaja sobre su hermano menor gracias a sus 4 núcleos y 8 hilos de procesamiento frente a los 4 núcleos y 4 hilos del Core i5.
Para tratar de dar respuesta a esta pregunta los mismos chicos de eurogamer han enfrentado un Core i7 6700K y un Core i5 6600K en la misma batería de juegos. En esta prueba el Core i7 6700K se ha elevado hasta 4,6 GHz y el Core i5 6600K hasta 4,5 GHz.
Tal como podemos ver la diferencia entre un Core i7 6700K y un Core i5 6600K a frecuencia stock es de un 28% en Far Cry 4 y un 16% en GTA V. En el resto de juegos la máxima es de un 10% e incluso en dos juegos no llega ni a un 0,1%. Si elevamos la frecuencia del Core i7 6700K hasta 4,6 GHz y el Core i5 hasta 4,5 GHz la diferencia máxima se reduce a un 10% y en cinco juegos no llega ni a un 1%.
Con esto queda demostrado que un Core i5 actual es suficiente para mover cualquier videojuego con una GeForce GTX Titan X en su frecuencia stock. Si le aplicamos overclock hasta igualar la frecuencia de un Core i7 la diferencia apenas será de un 10% en el mayor de los casos.
La conclusión es clara, si tienes un presupuesto ajustado opta por un Core i5 y lo que ahorras respecto a un i7 lo inviertes en una tarjeta gráfica más potente, tu equipo lo agradecerá en el 95% de los videojuegos o incluso más.
Nota: Vídeo y datos sacados desde DigitalFoundry.
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