Las reducciones en el proceso de fabricación de un procesador tienen como objetivo mejorar la eficiencia energética de los nuevos chips pero no mejorar su rendimiento por ciclo de reloj (IPC). A pesar de ello Intel parece haber hecho pequeños retoques en la microarquitectura para Broadwell Core M que han logrado mejorar muy ligeramente su IPC respecto a Haswell.
Los futuros procesadores Intel Broadwell se caracterizan principalmente por estar fabricados bajo un proceso de 14nm lo que supone un buen avance en eficiencia energética respecto a los actuales Haswell fabricados usando los mismos 22nm que en su día se usaron en Ivy Bridge. Ello permite a Broadwell Core M tener un TDP de tan solo 4,5W.
Intel parece no conformarse solo con aumentar la eficiencia energética en Broadwell y ha conseguido aumentar levemente su desempeño respecto a Haswell funcionando a la misma frecuencia de reloj, una mejora de un 2,97% en el mejor de los casos que puede parecer poca cosa pero recordemos que el objetivo de Broadwell no es mejorar el rendimiento de Haswell sino su eficiencia energética.
Fuente: wccftech